Boletín diario del Portal Libertario OACA |
- Los anarquistas y los socialistas: Afinidades y contrastes – Errico Malatesta
- ¿Qué es la Directiva de protección en caso de afluencia masiva de personas desplazadas?
- [Vídeo] Libro «Anarcosindicalismo (teoría y práctica)» de Rudolf Rocker
- III Congreso Internacional de Investigación sobre el Anarquismo
- (Ex)Presión Nº 58
- La batalla por La República
Los anarquistas y los socialistas: Afinidades y contrastes – Errico Malatesta Posted: 19 Apr 2022 05:06 AM PDT Publicado originalmente en La Protesta, suplemento semanal Nº 149, año 1926 Anarquistas y socialistas somos igualmente enemigos de la sociedad burguesa. Unos y otros queremos abolir el capitalismo, abolir la explotación del hombre sobre el hombre; queremos que las riquezas naturales y el trabajo humano sirvan para satisfacer las necesidades de todos y no ya para dar un beneficio a los usurpadores de los medios de producción, Socialistas y anarquistas quieren que los hombres cesen de vivir a costa del dolor ajeno, de ser lobos que se devoran uno a otro, y que la sociedad entre los hombres sirva para asegurar a todos el mayor bienestar posible, el mayor desenvolvimiento material, moral e intelectual. Nosotros, anarquistas y socialistas, queremos, pues, substancialmente, lo mismo y, aun cuando parezcamos adversarios y enemigos, somos naturalmente hermanos. Pero diferimos, se dice, sobre el medio para demoler y el modo de reconstruir. Perfectamente; pero no hay que hacer equívocos sobre los medios que preconizamos y sobre el modo como entendemos realizar la transformación social y llegar a la realización de nuestro ideal. Nosotros, los anarquistas, estamos todos o casi todos convencidos de que la sociedad burguesa basada en la violencia no caerá as bajo los golpes de violencia de los proletarios, y por tanto tendemos a una preparación moral y material que pueda conducir a una insurrección victoriosa. Mal se trata de hacer creer que nosotros quisiéramos provocar huelgas, escaramuzas, conflictos violentos a cada momento. «Nosotros queremos vencer», y por eso no tenemos ningún interés en consumir nuestras fuerzas y las del proletariado sin ton ni son. A pesar de las mentiras de las hojas policiales, es sabido por todos que en todos los episodios sangrientos de los últimos tiempos no hubo nunca un verdadero y propio conflicto, sino simple agresión no provocada, a menudo asesinato premeditado de parte de las fuerzas públicas. Nuestra predica, dando esperanzas y fe en un movimiento general resolutivo, tiene a evitar los hechos particulares derrochadores de fuerzas y a iniciar una preparación metódica que pueda asegurar victoria. Pero eso no quiere decir que debemos refrenar, cuando se producen, las explosiones de la ira popular. La historia es movida por factores más poderosos que nosotros, y no podemos pretender que espere nuestra conveniencia. Aun continuando nuestra preparación, entendeos obrar siempre que se presente la ocasión y extraer de toda agitación espontanea el máximo de resultado posible para los fines de la insurrección libertadora. Y como estamos también convencidos de que el parlamento y todos los órganos estatales no pueden servir como instrumentos de liberación y que todas las reformas hechas en el régimen burgués tienden a conservar y a reforzar el régimen mismo, somos decididamente contrarios a toda participación en las luchas electorales y a toda colaboración con la clase dominante; queremos profundizar el abismo que separa al proletariado del patronato y agudizar cada vez más la guerra de clase. En todo esto estamos claramente en contraste con los socialistas reformistas, pero podríamos hallarnos perfectamente de acuerdo con los socialistas llamados maximalistas. Y en efecto hubo un periodo en que parecía asegurada una cordial cooperación entre nosotros y los llamados maximalistas; y si las relaciones se han ido enfriando después ha sido porque en nosotros va disminuyendo la fe en su real voluntad revolucionaria. A pesar del absurdo de querer hacerse enviar al parlamento cuando no se podía hacer nada, creemos en sus buenas intenciones manifestadas en el «Avanti!» y en los comicios electorales. Pero después… vino lo que vino, nosotros, en la duda, nos hemos preguntado si todo aquel fuego revolucionario era efecto de transitoria excitación o simple engaño electoral. De cualquier modo, si los dirigentes socialistas quieren obrar, saben que nosotros no queremos atrás. Mientras tanto nos dirigimos directamente a los jóvenes y a las masas socialistas, que quieren de veras la revolución. Pasemos ahora a la cuestión de lo que nos proponemos hacer después de la insurrección victoriosa. Esta es la cuestión esencial, puesto que es nuestro modo de reconstruir lo que constituye propiamente el anarquismo y que nos distingue de los socialistas. La insurrección, los medios para destruir son cosas contingentes, y en rigor se podría ser anarquistas también siendo pacifistas, como se puede ser socialistas siendo insurreccionista. Se ha dicho que los anarquistas son antiestatales y es justo; pero ¿qué es el Estado? Estado es palabra sujeta a cien interpretaciones, y nosotros preferimos adoptar palabras claras que no den lugar a equívocos. A pesar de que la cosa pueda parecer nueva a quien no haya penetrado el concepto fundamental del anarquismo, la verdad es que los socialistas son violentos, mientras que nosotros somos contrarios a toda violencia, salvo cuando nos es impuesta, por razón de defensa, por la violencia ajena. Hoy estamos por la violencia, porque es el medio necesario para abatir la violencia burguesa; estaremos mañana por la violencia si se nos quiere imponer violentamente un modo de vida que no nos conviniese. Pero nuestro ideal, la anarquía, es una sociedad fundada en el libre acuerdo de las libres voluntades de los individuos. Estamos contra la autoridad, porque la autoridad es violencia, en la práctica, de los pocos contra muchos; pero seríamos enemigos de la autoridad igualmente aunque fuese, según la utopía democrática, la violencia de la mayoría contra la minoría. Los socialistas son dictatoriales o parlamentarios. La dictadura, titúlese dictadura del proletariado si se quiere, es el gobierno absoluto de un partido o más bien de los jefes de un partido que imponen a todos su programa especial, cuando no sus especiales intereses. Se anuncia siempre provisoria, pero, como todo poder, tiende a perpetuarse y a engrandecer las propias atribuciones, y acaban, bien provocando la rebelión o consolidando un régimen de opresión. Nosotros, los anarquistas, no podemos dejar de ser adversarios de toda dictadura, cualquiera que sea. Los socialistas, que preparan los ánimos para soportar la dictadura, piensan al menos en asegurarse que vayan al poder los dictadores que ellos desean, pues, si el pueblo está dispuesto a obedecer, hay siempre peligro en que obedezca a los más hábiles, es decir a los más malvados. Queda el parlamento, la democracia. La longitud limitada de un artículo no nos consiente ahora rehacer la crítica al parlamentarismo y demostrar cómo este no podrá nunca interpretar las necesidades y las aspiraciones de los electores y acaba necesariamente creando una clase de politicantes con intereses propios distintos de los del pueblo y a menudo contrarios a él. Nosotros, aun en la mejor y en la más utópica hipótesis de que los cuerpos elegidos consigan representar la voluntad de la mayoría, no podremos nunca reconocer en la mayoría el derecho a imponer la propia voluntad a la minoría por medio de la ley, es decir, por medio de la fuerza bruta. Pero ¿quiere decir esto que no queremos organización, coordinación, división y delegación de funciones? De ningún modo. Comprendemos toda la complejidad de la vida civilizada y no queremos renunciar a ninguna de las ventajas de las civilización; pero queremos que todo, incluso las necesarias restricciones de libertad, sea el resultado del libre acuerdo, en que la voluntad de cada uno de es violentada por la fuerza ajena, sino que es templada por el interés de todos tienen en ponerse de acuerdo, no solamente por los hechos naturales independientes de la voluntad humana. La idea de la libre voluntad parece asustar a los socialistas. Pero en todo lo que depende de los hombres ¿No es siempre la voluntad la que decide? ¿Y por qué entonces la voluntad de los unos más bien que la de los otros? ¿Y La fuerza bruta? ¿La que lograse asegurarse un cuerpo de polizontes bastante fuerte? Nosotros creemos que se podrá lograr el acuerdo y llegar al mejor modo de convivencia social solo si nadie puede imponer su voluntad con la fuerza, y cada cual deberá por tanto buscar, por la necesidad de las cosas y no solo por impulso fraterno el modo de conciliar los deseos propios con los de los demás. Un maestro de escuela, se me ocurre el ejemplo, que tenga el derecho a apalear a su discípulo y se hace obedecer con la disciplina, se ahorra todo esfuerzo mental para comprender el alma de los niños a él confiados y educa salvajes; en cambio, un maestro que no puede ni quiere pegar trata de hacerse amar y lo consigue. Somos comunistas; pero no queremos el comunismo impuesto por los esbirros. Ese comunismo no solo violaría la libertad que nos es cara, no solo no lograría producir efectos benéficos porque le faltaría el cordial concurso de las masas y debería contar solo con la acción estéril y perniciosa de los burócratas, sino que conduciría seguramente a la rebelión, la cual, siendo anticomunista por las circunstancias, correría el riesgo de acabar en una restauración burguesa. Esta diferencia de programa entre nosotros y los socialistas ¿nos convertirá en enemigos al día siguiente de la revolución, e inducirá a los anarquistas, que probablemente estarán en minoría, a preparar una nueva insurrección violenta contra los socialistas? No, ciertamente. La anarquía, lo hemos repetido a menudo, no se hace por la fuerza y no podríamos querer imponer a los otros nuestras concepciones, sin cesar de ser anarquistas. Pero nosotros los anarquistas, quisiéramos vivir anárquicamente cuando las circunstancias exteriores y la capacidad nuestra nos lo permitan. Si los socialistas nos dejan libertad de propaganda, de organización, de experimentación; si no quieren obligarnos por la fuerza a obedecer sus leyes cuando supiésemos vivir ignorándolas, entonces no habrá ninguna razón de conflicto violento. Una vez conquistada la libertad y asegurando el derecho a disponer de los medios de producción, contamos, para el triunfo de la anarquía, solo con la superioridad de nuestras ideas. Y en tanto podremos concurrir todos, cada cual con los métodos suyos, al bien común. Pero si en cambio los gobernantes socialistas quisieran, con la fuerza de los polizontes, someter a los recalcitrantes a su dominación, entonces… sobrevendrá la lucha. Errico Malatesta Fuente: https://es.theanarchistlibrary.org/library/errico-malatesta-los-anarquistas-y-los-socialistas |
¿Qué es la Directiva de protección en caso de afluencia masiva de personas desplazadas? Posted: 19 Apr 2022 05:01 AM PDT El Consejo Europeo adoptó el 4 de marzo la decisión de activar, por primera vez desde su aprobación, la Directiva 2001/55/CE relativa a las normas mínimas para la concesión de protección temporal en caso de afluencia masiva de personas desplazadas. Las Directivas dentro de la UE son actos legislativos que obligan a los Estados miembros a alcanzar los objetivos marcados en ellas. En este caso concreto, nos encontramos con una disposición que exige acoger de forma inmediata y con carácter temporal a personas desplazadas de terceros países “cuyo regreso en condiciones seguras y duraderas sea imposible debido a la situación existente en ese país”. A través de esta Directiva se crea un régimen diferenciado al estatuto de refugiado, la protección temporal, basado en un procedimiento de carácter excepcional, con menos trámites, para, en teoría, garantizar una protección mínima rápida ante una afluencia masiva de personas. Esta norma incluye la regulación sobre el derecho de residencia (un año prorrogable automáticamente otro año si el órgano competente para declarar la protección temporal no la ha dado por finalizada), acceso al mercado laboral, prestaciones sociales, asistencia médica, etc. También establece medidas para obtener la reagrupación familiar. Cuando finaliza dicha protección, se deberá aplicar el Derecho general en materia de protección y de extranjería de cada uno de los Estados miembros. A la hora de aprobar el alcance exacto de las disposiciones de la Directiva no ha habido consenso en algunos puntos concretos entre los Estados de la UE como a qué grupos de personas se les puede aplicar. Determinados países querían restringirlo al máximo, reduciendo la posibilidad de acogerse a ella exclusivamente a los nacionales ucranianos. En España, el Gobierno decidió ampliar la protección temporal a nacionales de terceros países que residieran legalmente en Ucrania y a las ucranianas que se encontraban en España antes del comienzo de dicho conflicto sin importar su situación administrativa. Otras particularidades de la Directiva son: la exención de la obligación de visado, la posibilidad de autorizar la entrada aunque no se disponga de pasaporte, el derecho a circular libremente durante 90 días tras ser admitidos en territorio de la UE para así elegir el Estado miembro de residencia, la opción de solicitar protección internacional (pero no se podrá disponer de las dos a la vez), etc. El procedimiento en el Estado español, que se debe realizar en los lugares habilitados especialmente para ello, consiste en la identificación, la recopilación de diferentes datos y la expedición de un resguardo acreditativo de su solicitud, en el que ya constará un NIE (número de identidad de extranjero). La solicitud será tramitada por la Oficina de Asilo y Refugio del Ministerio del Interior y deberá ser resuelta en el plazo máximo de 24 horas. La resolución incluye la autorización de residencia y, en el caso de los solicitantes mayores de edad, de trabajo. A grandes rasgos este es un resumen de la Directiva y su aplicación concreta en el Estado Español. Una Directiva aprobada en 2001 que no se ha puesto en marcha nunca con anterioridad. Ésta en su articulado no concreta un número determinado a partir del cual se considera una afluencia masiva de personas desplazadas, por lo que no existe un mecanismo de activación directa de sus preceptos, es decir, se activa solamente por la decisión de los Estados miembros. La UE no consideró que las personas provenientes de Siria, Libia, Mali, Afganistán, etc., merecieran este nivel de protección, a pesar de haber momentos, en estos últimos años, en los que fueron miles las personas que trataban de buscar refugio en Europa. La situación actual nos ha demostrado que todas las razones esgrimidas en años anteriores (falta de recursos, incapacidad de asumir un flujo tan grande, etc.) no fueron más que falacias, el único motivo fue la falta de voluntad para acoger a determinadas personas. Además, esta Directiva es muy mejorable pese a la imagen pública trasladada por la clase política. Aunque el Gobierno español haya ampliado su alcance, sigue excluyendo a todas ellas que, residiendo en Ucrania, no lo hacían de forma legal, como si las consecuencias de la guerra no les afectaran también a ellas, imponiendo la lógica del control migratorio en esta situación excepcional. Para terminar, volver a incidir en el hecho de que, por primera vez, se activa un mecanismo administrativo de protección ágil que choca con la práctica cotidiana de las solicitantes de protección internacional o de aquellas personas que quieren realizar cualquier trámite de extranjería. Tan solo conseguir una cita es una misión casi imposible, al menos en Madrid, además de que hay trámites que suelen prolongarse durante meses o años. Ahora estamos viendo cómo en aproximadamente 24 horas se puede resolver una autorización de residencia y desplegar los recursos de acogida, mientras que existen solicitantes de asilo que llevan más de dos años esperando una resolución definitiva. La puesta en marcha de medios de forma tan selectiva no hace más que visibilizar el racismo y eurocentrismo tan arraigado en la clase política de cualquier signo político y en la Administración. Defender la libertad de movimiento, no solo en situaciones de guerra, así como luchar contra la cualquier ley de extranjería que reparta derechos en función de la situación administrativa personal, debe estar inserto en cualquier espacio político que luche contra este sistema. Fuente: https://www.todoporhacer.org/directiva-proteccion-personas-desplazadas/ |
[Vídeo] Libro «Anarcosindicalismo (teoría y práctica)» de Rudolf Rocker Posted: 19 Apr 2022 04:51 AM PDT Rudolf Rocker (1873-1958) es uno de los nombres fundamentales del anarquismo moderno. Esta excelente obra se publica por primera vez en un momento dramático, cuando la Guerra Civil de España está en su última fase y el fascismo va a derrotar a los trabajadores y campesinos del país; tal y como el mismo Rocker expresa en un epílogo realizado en 1947: «El pueblo español tuvo que seguir su valiente lucha por la libertad, dignidad humana y justicia social, casi con una sola mano, mientras que el resto del mundo observó pasivamente la desigual batalla». Ese momento de auge fascista supone para el movimiento libertario internacional un período de reorganización y será la CNT española la organización que más sufra, con miles de militantes muertos y otros tantos en el exilio. A pesar de ello, de las deplorables condiciones socieconómicas del momento, Rocker se mostraba optimista y confiaba en que las fuerzas libertarias no tardarían en resurgir. Las grandes ideas de libertad y justicia social, a pesar de los duros tiempos que haya que vivir, perduran después de los grandes desastres que las personas han tenido que soportar en todos los países. Enlace al libro completo: Anarcosindicalismo: teoría y práctica – Rudolf Rocker [Libro] Capi Vidal http://reflexionesdesdeanarres.blogspot.com/ |
III Congreso Internacional de Investigación sobre el Anarquismo Posted: 19 Apr 2022 04:46 AM PDT
El anarquismo, como cuerpo de ideas y corriente política, ha aportado reflexiones y acciones en el último siglo y medio. Asimismo, desde hace décadas, se ha constituido internacionalmente como objeto de investigación, dentro y fuera de la academia, en diversas áreas del conocimiento, produciendo una importante expansión así como una renovación metodológica del campo de estudios. Hoy podemos visibilizar este proceso en la recuperación de archivos y la disponibilización de documentos, la elaboración de producciones académicas y no académicas, la organización de proyectos editoriales y la publicación de textos, entre otros. Como resultado de estos esfuerzos convergentes, en los últimos años San Paulo y Buenos Aires han acogido importantes encuentros que reúnen a investigadorxs de varios países. En la capital paulista se desarrollaron tres coloquios internacionales, organizados por la Biblioteca Terra Livre, como “Élisée Reclus e a Geografia do Novo Mundo” (Departamento de Geografia – Universidade de São Paulo, 2011), “Colóquio de Educação Libertária: 100 anos da Escola Moderna” (Faculdade de Educação – Universidade de São Paulo, 2012) y “Piotr Kropotkin: Ativismo e Pesquisa” (Departamento de Geografia – Universidade de São Paulo, 2021). En Buenos Aires, destacamos los Encuentros de Investigadores/as sobre Anarquismo, que tuvieron lugar entre 2007 y 2015 promovidos por el Centro de Documentación e Investigación de la Cultura de Izquierdas (CeDInCI/UNSAM). Esta instancia fue decisiva para la organización en 2016 del I Congreso Internacional de Investigadorxs sobre Anarquismo, realizado en la capital argentina y su segunda edición en 2019 en Montevideo impulsada por docentes e investigadores de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad de la República de Uruguay con el apoyo del CeDInCI. Ahora, tres años después, la Biblioteca Terra Livre y el CeDInCI anuncian el III Congreso Internacional de Investigación sobre Anarquismo, que se celebrará los días 8, 9, 10 y 11 de noviembre de 2022 en la ciudad de San Pablo, Brasil. Como en las ediciones anteriores, el Congreso pretende ser un espacio de diálogo e intercambio plural entre investigadores insertos en diferentes espacios y países. Para ello, los interesados en participar pueden proponer la presentación de trabajos relacionados de forma amplia con la temática. En este sentido, al ser el anarquismo un objeto de investigación multidisciplinar, serán aceptadas las propuestas pertinentes procedentes de diferentes campos del conocimiento, como la Historia, la Geografía, la Sociología, la Filosofía, la Educación, la Teoría Literaria, etc. La primera edición del Congreso se celebró en 2016 en la ciudad de Buenos Aires. Organizado por el CeDInCI y la UNSAM (Universidad de San Martín), el evento reunió a más de una docena de ponencias con investigadores de diferentes partes del mundo. Al final, los trabajos presentados se publicaron en los libros de actas, y pueden consultarse aquí. En 2019, la segunda edición tuvo lugar en la ciudad de Montevideo, Uruguay, a partir de la iniciativa de investigadores de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la UDELAR (Universidad de la República). En total, el Congreso pasó por más de veinte mesas, además de presentaciones de libros y revistas, feria de publicaciones y presentaciones artísticas. Ahora, en 2022, el III Congreso Internacional de Investigación sobre el Anarquismo tendrá lugar del 8 al 11 de noviembre en São Paulo. ICEA – Instituto de Ciencias Económicas y de la Autogestiónhttp://www.iceautogestion.org/index.php/es/noticias-pagina/iii-congreso-internacional-de-investigacion-sobre-el-anarquismo Fuente: |
Posted: 19 Apr 2022 04:36 AM PDT Es una pena que haya cerrado LaMalatesta El breve comunicado anterior es amargo porque anuncia el cierre de LaMalatesta. A decir verdad, nunca visité la tienda personalmente. Además, durante el último largo año, por diferentes motivos, no contacté con ellAs tan asiduamente como venía haciéndolo. No obstante, llevaba cerca de diez años comprando material de su extenso catálogo. Entretanto, durante esa década, habré pedido cerca de un centenar de libros junto a diferentes fanzines, folletos o revistas muy interesantes. Es verdad que los proyectos nacen, se desarrollan y finalizan, es ley de vida, pero ¿qué puedo decir ahora? Un millón de gracias por esparcir la semilla de la rebeldía, por preocuparos en difundir textos, a muy buen precio, de numerosAs escritorAs o distribuidoras difíciles de encontrar; y por facilitarnos tantísimos momentos placenteros de grata lectura comprometida.Por lo demás, creedme si digo que os echaré muchísimo de menos. Gracias por vuestro compromiso y os deseo todo lo mejor en vuestros próximos proyectos. Nos vemos en las calles. (EX)PRESIÓN |
Posted: 19 Apr 2022 04:26 AM PDT No soy muy republicano. No me puedo llamar republicano. No me gustan las banderas. No me gustan las fronteras. El hecho de que se ponga una frontera más me da escalofríos. He pensado que hoy tenía que escribir. Todos mis pensamientos se van a un día religioso rescatado por un acto político que se celebra en una pequeña plaza de una pequeña ciudad. Yo creo en las revoluciónes. Sé que “La Nueve” rescató París. Sé cosas del Ebro. Sé cosas de Los Pirineos. He intentado forjar mi opinión. Hoy me veo como un animal que puede que un día se desboque y acabe como tiene que acabar. No sé si sabéis como soy pero hay mucha gente que no ha demostrado conocerme. Tengo mis límites. ¡Tanta República! ¡Tanta República! ¿Dónde están los medios cuando se les necesita? 14 de abril. Las Trece Rosas. La Pasionaria. El Gobierno de Madrid. Los Solidarios. Oliver. Lister… Me imagino que no sé ni por dónde empezar. Sé que tengo mi opinión. Sé que la tengo. Y quiero apoyar al Pueblo. ¿A cuál?: al Pueblo. No os voy a decir que os dejéis de rollos de militancia. No os voy a decir que os dejéis de rollos de activismo. No os voy a decir nada que os haga cambiar las ideas. Pero… ¡Tanta República! ¡Tanta República! ¡Si, al menos, os hubieseis olvidado de La Semana Santa! Yo sé que día es hoy. Yo sé que hoy hay una Batalla. Sé en que bando estoy. Estoy con los duendes y con las hadas, estoy con los unicornios y los hipogrifos. Hoy he querido estar un poco con mi bando. ¿El republicano?: Mi bando. Yo soy antifascista. Yo soy antifascista y sé que hay muchos más antifascistas. Soy más que eso: Soy anarquista. ¡Os dejo! Un día que quizá no recordéis. En mi barricada; con los duendes, con las hadas y con los hipogrifos. -Richie punk– |
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