Boletín diario del Portal Libertario OACA |
- Breve genealogía de la propiedad privada
- [Libro] El autoaprendizaje en la educación anarquista
- ¡Muerte al Estado, que viva la Anarquía!
- [Documental] Simón Hijo del Pueblo
- [Poema] Llegará
- [Poema] Aullidos (dedicada al pueblo kurdo)
- [JJLL Madrid] Carteo a presxs el 25 Agosto
- Autogobierno de Cheran, Criptoanarquismo y Cripto-redes Sociales - Keiser Report en Español (E1259) [Anarquismo en los Medios]
- El ideal y la juventud - Elisée Reclus (1895)
- La Evolución de los Movimientos Anarquistas en Eugene, "Capital Anarquista de los Estados Unidos"
Posted: 20 Aug 2018 11:11 AM PDT
Cuando se habla de propiedad privada nunca está de más diferenciarla de la posesión, lo cual ya fue señalado por Proudhon en su célebre obra ¿Qué es la propiedad?. Así, la propiedad privada viene determinada por la ley que es la que dice que algo es de alguien, mientras que la posesión es la relación de usufructo que una persona mantiene con algo. Por esta razón, cuando aquí nos referimos a la propiedad privada lo hacemos en relación a los medios de producción, distribución y consumo, y no a aquellas cosas que son tenidas o disfrutadas, como ocurre con las posesiones.
Si hubiera que trazar una genealogía de la propiedad privada encontraríamos su génesis en las sociedades esclavistas de la Antigüedad, como por ejemplo Grecia. En cualquier caso hay que señalar que en aquel entonces este tipo de sociedades eran minoritarias, y que por ello la propiedad privada estaba bastante limitada. En el caso de Europa fue el Imperio Romano el que introdujo la separación entre posesión y propiedad a través del famoso derecho romano, lo que constituyó el principal antecedente para, ya en tiempos modernos, restablecer la propiedad privada. A pesar de esto no hay que perder de vista que entre el derrumbamiento del Imperio Romano y la época moderna, es decir, durante el periodo medieval, la propiedad privada como tal no existió debido a que imperaban distintas formas de propiedad compartida, tal y como sucedía con los bienes comunales en muchas zonas de Europa, las formas de propiedad enfitéutica, etc. En la Edad Media la propiedad privada, al estilo romano, como propiedad individual exclusiva, apenas existía. La modernidad trajo consigo la recuperación del derecho romano y con este la propiedad individual que hoy conocemos como propiedad privada. Sería complejo explicar los pormenores del proceso que condujo a la recuperación de esa forma de propiedad, y de cómo fue implantada a lo largo y ancho de Europa. Pero basta con señalar que durante la época medieval la ausencia de la propiedad privada como tal era el reflejo de la existencia de comunidades en las que prevalecían redes de interdependencia compleja entre sus miembros, en tanto en cuanto existía una posesión común de la riqueza. No hay que olvidar que las elites medievales eran, con diferencia, una minoría social cuyo poder era muy limitado, de manera que su capacidad para fiscalizar al resto de la población para extraer recursos era sumamente complicado debido justamente a esa circunstancia que acabamos de señalar: la posesión común de la riqueza con la existencia de bienes comunales como tierras, bosques, ríos, pero también ganado, montes, fraguas, batanes, molinos, etc. Así, en la medida en que la riqueza era compartida por muchas personas al mismo tiempo, las elites medievales tenían serias dificultades para llevar a cabo labores de exacción económica, pues era muy difícil identificar a los dueños de este tipo de bienes. Los impuestos, por regla general, consistían en pagos hechos en especie a partir de su propia producción, y que solía combinarse con algunos días de trabajo en las tierras de los caciques locales durante determinadas épocas del año. Las primeras formas de propiedad privada pueden detectarse en la Baja Edad Media en torno a los burgos, ciudades que operaban bajo ciertos privilegios fiscales otorgados por el monarca que les permitía disponer de mercado propio, con lo que sus habitantes desarrollaban actividades comerciales que facilitaron la aparición de las primeras formas de propiedad privada en el terreno mercantil. Los burgos surgieron en parte de manera espontánea, como consecuencia de una serie de procesos sociales e históricos propios de la época medieval, pero también en parte como consecuencia de la acción de los monarcas de aquel entonces al crear centros en los que se desarrollase la actividad económica y comercial, de forma que el enriquecimiento de los habitantes de las ciudades supusiese al mismo tiempo la creación de importantes depósitos de riqueza de los que el monarca pudiera disponer en caso de necesidad. Además de esto los burgos eran zonas que quedaban al margen de las jurisdicciones señoriales, lo que reforzaba la autoridad del monarca al tiempo que en el plano político debilitaba a la nobleza. Pero por otra parte la nobleza era drenada de recursos, y por tanto debilitada económicamente, en la medida en que estos iban a parar a las ciudades donde los mercados hicieron su más temprana aparición. Sin embargo, como decimos, las formas de propiedad privada eran muy limitadas al quedar circunscritas a determinados círculos sociales y económicos de las ciudades, generalmente grupos oligárquicos compuestos fundamentalmente por mercaderes y sólo más tarde por prestamistas. En los albores de la modernidad el fortalecimiento del poder regio con la aparición de las primeras monarquías absolutas dio lugar a una progresiva remodelación de la economía y la sociedad, si bien a una escala todavía limitada. En lo que a esto se refiere nos encontramos con el surgimiento del mercantilismo y el desarrollo de las actividades comerciales, lo que facilitó el incremento de la actividad económica y consecuentemente el aumento de la base fiscal del Estado. No hay que olvidar que la principal fuente de ingresos de la Corona eran, por aquel entonces, las rentas de sus dominios territoriales pero también, y en una medida creciente, los impuestos recaudados del comercio exterior. Todo esto se combinó con la concesión de monopolios que abarcaron una extensa cantidad de actividades económicas, y que se desarrollaron sobre todo a partir de la colonización de América y de otras regiones del planeta. Desde la Baja Edad Media se produjo el desarrollo y crecimiento de una clase social oligárquica afincada en los burgos, centrada en actividades comerciales y compuesta mayormente por mercaderes que traficaban con mercancías de diferente tipo y en diferentes ámbitos geográficos: local, regional e internacional. A estos se sumarían los prestamistas y banqueros, que en muchas ocasiones también eran mercaderes que, dada su enorme riqueza, desempeñaban funciones de préstamo en el desarrollo de sus actividades comerciales pero también en su apoyo financiero a los soberanos. El desarrollo de esta clase social fue desigual a lo largo de Europa, pues ello dependió de las redes de ciudades que existían al final de la época medieval, así como de las estructuras estatales que las abarcaban. Al margen de las tensiones políticas que existieron entre los grandes soberanos y las ciudades, es en los albores de la época moderna cuando se percibe un aumento general de la riqueza, lo que coincidió con nuevas empresas colonizadoras por un lado, y por otro con el desarrollo de las incipientes monarquías absolutas. En este contexto, no exento de complejidades de diferente tipo, no tardaron en producirse en determinados países diferentes tensiones internas en la medida en que las necesidades financieras de las monarquías absolutas no dejaron de crecer. Esto era debido en parte a las carreras armamentísticas y a las guerras que se produjeron por aquel entonces, y que implicaron un encarecimiento de los medios de coerción y dominación política. Entre los siglos XVI y XVII se impuso el mercantilismo como punto de vista de las elites en tanto en cuanto se trataba de una manera de ver la economía que consideraba que esta es un instrumento al servicio de la construcción de un Estado fuerte. Para el mercantilismo la economía internacional es un espacio de conflicto entre diferentes Estados con sus respectivos intereses nacionales. Como consecuencia de esto la competición económica entre Estados es un juego de suma cero, lo que un Estado gana lo pierde otro. De esto se deduce la importancia dada a las ganancias relativas en el terreno económico, pues la acumulación de riqueza constituye la base para el poder político-militar que más tarde es utilizado contra otros Estados. Por tanto, la fortaleza económica y el poder político-militar no eran contemplados como metas que competían entre sí, sino como fines complementarios que beneficiaban al Estado. Así, la búsqueda de la fortaleza económica constituye un apoyo para el desarrollo del poder político y militar del Estado, al mismo tiempo que el poder político-militar mejora y fortalece el poder económico del Estado. La perspectiva mercantilista daba prioridad a lo político sobre lo económico, de manera que allí donde los intereses económicos y los intereses políticos, vinculados estos últimos a la seguridad del Estado, chocaban, era la política la que se imponía. Esto no estuvo exento de importantes problemas y tensiones internas que enfrentaron a las oligarquías económicas con la Corona. Un ejemplo paradigmático de esta situación es la Inglaterra del s. XVII. Esto se debió sobre todo a las exigencias impuestas por el encarecimiento de las guerras internacionales, lo que estaba unido a la actividad expansionista del propio Estado en su competición frente a otros países por la conquista de la hegemonía internacional. La consecuencia inevitable de esto fue la aplicación de medidas coercitivas por parte de la Corona sobre el sector socioeconómico más dinámico del país que consistieron en confiscaciones, encarcelamientos, la imposición de tributos excepcionales, el forzamiento de la concesión de créditos, etc. El resultado fue el enfrentamiento entre la corona y la oligarquía económica, lo que para finales del s. XVII condujo al desmantelamiento del absolutismo y la definitiva instauración del parlamentarismo como sistema político en Inglaterra. Las consecuencias de la revolución de 1688 en Inglaterra fueron importantes, pues constituyó un paso decisivo para la incorporación de la elite económica a las tareas de gobierno de las que había sido excluida por la Corona. En tanto en cuanto una de las principales motivaciones de esta revolución fue la protección de los bienes de los comerciantes, así como la liberalización de la economía con la desaparición del sistema de monopolios hasta entonces vigente, se produjeron una serie de transformaciones en el terreno jurídico, económico y social de gran importancia. En lo que a esto se refiere el liberalismo preconizado por John Locke convirtió la propiedad en el hecho social central. Se entendía que la propiedad era la que garantizaba la libertad del individuo al dotarle de la correspondiente autonomía en la medida en que por medio de ella controlaba sus propias necesidades materiales. El reconocimiento de la propiedad privada en el ordenamiento jurídico fue decisivo, no sólo para proteger los intereses de la burguesía inglesa respecto a la arbitrariedad de la autoridad política, sino sobre todo para permitir una mejor fiscalización de la economía al poner fin a las formas de propiedad compartidas. Después de 1688 Inglaterra se sumió en una dinámica dirigida a expropiar los bienes comunales y a poner fin a la economía natural. La política de parcelaciones iniciada décadas antes fue relanzada y reforzada, lo que permitió, por un lado, la concentración de la mayor parte de la riqueza en unas pocas manos, al mismo tiempo que la población que era desposeída era forzada a vender su fuerza de trabajo, ya fuese en el campo o en las incipientes ciudades industriales. Pero por otro lado la propiedad privada creaba unas nuevas condiciones económicas y sociales al permitir la acumulación ilimitada de riqueza, lo que hizo que el interés individual, entendido como la búsqueda del máximo beneficio y el atesoramiento de riquezas, pasase a ser el motor del desarrollo social y económico del país. Por medio del interés individual vinculado a la propiedad privada se impulsó el crecimiento económico y las correspondientes dinámicas productivistas que convergieron con el desarrollo y ampliación de los mercados, tanto nacionales como internacionales. El Estado logró varios objetivos de un modo simultáneo mediante el reconocimiento de la propiedad privada: facilitar su labor fiscalizadora de la economía al generalizarse la propiedad privada individual, de manera que por cada propiedad había un único propietario, lo que hizo que las tareas de recaudación de impuestos fuese más eficaz al estar claro a quién le correspondía el pago de los tributos; unido a lo anterior al Estado le resultaba mucho más fácil tasar la riqueza nacional, y establecer impuestos; por otra parte, al incentivar el desarrollo económico por medio del crecimiento de la producción, propició el crecimiento del volumen de la riqueza nacional disponible en la economía, lo que repercutió en un aumento de la base tributaria del Estado con la que costear sus medios de dominación política y militar; como consecuencia del aumento de la riqueza se produjo la expansión del mercado y del comercio, y con ellos los ingresos fiscales del Estado también crecieron; asimismo, la propiedad privada dio lugar a la aparición del trabajo asalariado, y facilitó de este modo la monetización de las relaciones sociales y del conjunto de la economía, lo que, a su vez, también facilitó la labor recaudadora del Estado e incrementó su capacidad para movilizar recursos financieros más rápidamente; como corolario de todo lo anterior nos encontramos con la aparición y desarrollo de un pujante sector financiero representado por importantes firmas bancarias, siendo sus principales funciones la custodia de la riqueza nacional, la labor de crédito para el desarrollo económico e industrial, y la concesión de préstamos al Estado. Así las cosas, la propiedad privada ha tenido como principal función histórica sentar las bases para el posterior desarrollo del sistema capitalista. En este sentido comprobamos que fue creada por el Estado tanto para su propio beneficio como para el de los propietarios. Gracias a ella las formas de producción económicas evolucionaron hacia el capitalismo, lo que simplemente facilitó la movilización de los recursos disponibles, el incremento de la riqueza en la economía y el aumento de los ingresos del Estado para apoyar su poder político-militar tanto en la esfera doméstica como en la internacional. La consecuencia de todo esto no fue otra que el trasvase de riqueza de manos del pueblo a manos de una minoría que pasó a acapararla, lo que supuso no sólo el incremento de las desigualdades sociales sino sobre todo un fortalecimiento de las jerarquías ya existentes. La propiedad privada, por tanto, ha sido, y todavía es, un instrumento con fines económicos al permitir el enriquecimiento de la clase propietaria y del Estado, pero también un instrumento con fines políticos al ser la base material del poder político-militar estatal. En el terreno social la propiedad privada ha servido para una remodelación del conjunto de la estructura social por medio del trabajo asalariado, y a través de este el reforzamiento de las relaciones de poder y de explotación que le son inherentes. De todo lo anterior puede concluirse que cualquier aspiración emancipadora pasa necesariamente por la abolición de la propiedad privada y del trabajo asalariado que le es inherente. Pero esto sólo es posible a través de la abolición del Estado que es su principal creador y protector a través de su burocracia y sus cuerpos represivos. De esta manera, mediante la abolición de las bases de la desigualdad social y política, es como puede construirse una sociedad sin clases, libre e igualitaria, basada en la posesión común de la riqueza.
Esteban Vidal
Read more ... |
Posted: 20 Aug 2018 11:00 AM PDT
El librillo expone algunas de las Ideas, teorías y prácticas para el aprendizaje más significativas del último tiempo y que sin duda son una herramienta indispensable para el fortalecimiento de la autoeducación y la transformación del individuo en libertad. Un mirada desde la perspectiva anarquista para el crecimiento individual e intelectual de todo ser humano.
Comparte y Difunde puedes descargarlo en los siguientes idiomas:
Español: http://bit.ly/2MhPLIn
Catalán: http://bit.ly/2vFLO63
Inglés: http://bit.ly/2vKIPJz
Portugués: http://bit.ly/2PbHGCY
Educación Antiautoritaria
Read more ... |
Posted: 20 Aug 2018 10:50 AM PDT
Una de nuestras frases favoritas dice así: “¡Muerte al Estado, que viva la Anarquía!” Frase corta pero profunda, como casi todas las buenas frases. Que sea corta hace que sea fácil de recordar y reproducir. Pero a veces sucede que las frases se quedan cortas, y no llegan a expresar todo su contenido o su implicancia[1], volviéndolas superficiales. El texto que sigue contiene unas reflexiones básicas respecto a nuestra lucha como anarquistas. Como siempre, no buscan bajar línea, sino sumar al debate intentando afilar nuestras ideas y por ende, nuestras prácticas. Nuestros textos, al igual que nuestras prácticas, no buscan ser cerrados, sino al contrario, son diálogos e incluso invitaciones. Queremos que nos respondan, queremos debatir ideas y profundizarlas, sin separarlas nunca de lxs cuerpxs que las expresan.
Todo pastor necesita ovejas Bien, decíamos: “¡Muerte al Estado, que viva la Anarquía!” Cuando lxs rojxs y lxs peronistas escuchan esa frase, lo primero que nos dicen es “pequeñxs burgueses”. ¿Por qué?, porque según ellos, hablar de libertad individual es de burgués, ya que la proletaria tiene que poner el bien común -identificados por ellxs como el Estado- antes que su individualidad. “¿Cómo pueden lxs anarquistas querer, al igual que los burgueses, la destrucción del Estado?” dicen escandalizados y henchidos de un espíritu “patrio” o “trabajador”. Como siempre, las diferentes posturas radican en la posición que se tiene frente a las relaciones de Poder. La mayoría -por no decir todas- de las filosofías occidentales no quieren la libertad, sino que todo lo contrario: le temen, y consideran a la autoridad, el Poder, la jerarquía, líderes, jefes, leyes, jueces, castigos, etc., y todas esas cosas que solamente se justifican abstractamente en nombre de Dios, la Historia, el Progreso, la Moral, las leyes, la Opinión Pública, el Orden, etc., como necesarias e inevitables. “¡Qué se le va a hacer!” nos dicen, “Hay que ser realistas, si no hay nadie que gobierna, esto es un desastre”. Y buen, habrá que entenderles, al fin y al cabo, sus filosofías son profundamente occidentales [2]. Para Marx, “La burguesía ha desempeñado, en el transcurso de la historia, un papel verdaderamente revolucionario” [3], evidenciando así su amor por la eficiencia y el progreso tecnológico del Estado capitalista. Las raíces occidentales del marxismo se logran entender mejor si lo acompañamos de esta otra cita: ¿O acaso es una desgracia que la magnífica California haya sido arrancada a los perezosos mexicanos, que no sabían qué hacer con ella?; ¿lo es que los enérgicos yanquis, mediante la rápida explotación de las minas de oro que existen allí, aumenten los medios de circulación, concentren en la costa más apropiada de ese apacible océano, en pocos años, una densa población y un activo comercio, creen grandes ciudades, establezcan líneas de barcos de vapor, tiendan un ferrocarril desde Nueva York a San Francisco, abran en realidad por primera vez el Océano Pacífico a la civilización y, por tercera vez en la historia, impriman una nueva orientación al comercio mundial? La “independencia” de algunos españoles en California y Tejas sufrirá con ello, tal vez; la “justicia” y otros principios morales quizás sean vulnerados aquí y allá, ¿pero, qué importa esto frente a tales hechos histórico-universales? [4]. No por algo el “sujeto revolucionario”, según ellxs, eran lxs proletarixs que engendrarían la industrialización burguesa. Querían que ésta se expandiese por todo el globo, porque así estábamos avanzando en el sentido correcto de la Historia. Su Dios es la Historia, el Progreso, el Estado que encarna dicho Progreso, y lxs individuxs no pueden más que someterse a esa necesidad histórica. ¿Pero cómo hablar de libertad luego de eso? ¿Acaso somos meramente esclavos de la Historia? ¿Acaso no existe la libertad? En el caso de los peronistas, dejemos que Juan Pablo Feinmann lo explique: ¿Qué es entonces la Lealtad? Es aquello que liga a todos con Dios. La Lealtad es en el peronismo, lo que la Fe es en la religión (…) Todos tienen que ser leales al conductor. El conductor, en exterioridad, otorga unión, armonía a un movimiento en sí caótico. La Lealtad es la argamasa que estructura al movimiento, que lo torna uno”[5]. Como podemos ver, ambas filosofías son arborescentes, ascendentes, jerárquicas. Una basada en el Progreso, la Historia, y por ende en la vanguardia iluminada que “la va a saber interpretar”, y la otra en Dios o su representante en la Tierra, el/la Conductor/a del Movimiento.[6] El individuo es, para ellxs, meramente una cosa que debe sacrificarse por el progreso unidireccional de la Historia (preferentemente occidental). Chorrean esclavitud por todos lados. Bajo estos puntos de vista, toda ausencia de gobierno equivale a una falta de orden, a un caos, al desorden y por ende -les encanta decir esto para pegarnos- a la Anarquía. Este es el típico razonamiento occidental proveniente del platonismo, el cristianismo y sus ulteriores derivaciones, que nos inyectan en las escuelas y las universidades. Para estas corrientes, las cosas, la vida, la Historia, tienen un sentido lineal y acumulativo, lógico, objetivo, progresivo, ascendente, una concatenación racional y necesaria de la Historia, o de la voluntad divina del Señor o su representante en la tierra, el “Conductor” o la “Jefa”. Buscando justificar su Poder, unxs citan a Dios y otrxs a la Historia. Sin embargo, digan lo que digan, ambas son metafísicas y terminan supeditando su práctica a una idea que se encuentra por fuera de ellxs mismxs. El mensaje es el mismo: ¡Sumisión! ¡Pasividad! “que decidan lxs que `saben´”, “respetemos e imitemos al poderoso porque si está ahí por algo es, dejemos que la Historia siga su curso natural, roguemos por un salvador porque nosotrxs estamos muy ocupados como para salvarnos a nosotrxs mismxs”. Como podemos ver, a diferencia de lo que buscan hacernos creer, ellxs tienen mucha más similitud con lxs burgueses que con nosotrxs. De hecho, creo que podríamos sumar a la lista de nombres de teóricos del Estado (Hobbes, Rousseau y Hume) a Marx y todxs sus secuaces. No por algo la URSS exigió, para prestar ayuda a lxs milicianxs españolxs en la Guerra Civil del ´36, la restauración de un Estado con ejército militar regular, buscando así desarmar al pueblo que ya estaba organizado en milicia, luchando y resistiendo contra el fascismo. Tanto el imperialismo yankee como el imperialismo soviético, como a su vez el fascismo franquista, se veían interesados en sabotear la Revolución Española. Esto, sumado a los propios errores de lxs anarquistas, sepultó la Revolución. Tampoco hace falta irnos tan lejos para hacernos explicar. ¿No vimos hace unos meses atrás, en una de las marchas por Santiago Maldonado, como lxs rojxs tuvieron la desvergüenza de proteger la catedral de lxs revoltosxs que la estaban atacando en un contexto de memoria combativa? Luego, tras las jornadas del 14 y el 18 de diciembre, fueron los mismos partidos de izquierda los que entregaron a sus militantes (a excepción de Sebastián Romero del PSTU el cual se dio a la fuga y esperemos que esté bien) buscados por la justicia burguesa por haber participado de los disturbios. Es a ellos, como a los burgueses, a los que les aterra la insumisión de lxs explotadxs al Partido, a la vanguardia iluminada, al Orden. Ellxs le tienen miedo a la Libertad, y es entendible. Todo pastor necesita ovejas. Divide y reinarás Entonces, ¿por qué “Muerte al Estado”? Porque sin Estado, no hay Capital. No existe uno sin el otro, ambos son las dos caras de la misma moneda, hoy en día fusionados en un Moloch cyber-tecnológico de control y explotación. El Estado moderno, hablando pronto y rápido, fue creado por la burguesía francesa, y luego imitado por las burguesías de cada país. Dado un momento, necesitó seguir expandiendo su mercado, saliendo a la caza del “nuevo mundo” y colonizando África y Sudamérica. El Capital llega al mundo “chorreando lodo y sangre” (Marx). Hoy en día, la burguesía domina todo el Globo a través de la democracia capitalista y las multinacionales. No podría ser de otra forma, ya que toda clase dominante, una vez en el Poder, buscará desarrollar una estructura que le permita reproducir y acrecentar dicho Poder cada vez más. Esa estructura es el Estado de la democracia capitalista. “La institución de la Propiedad, no podría existir sin el Estado, el que concentra el Poder en las instituciones de dominación. Sin las leyes, las armas, los policías y los tribunales, la Propiedad no tendría una base real, ninguna fuerza para sustentarla” [7] ¿Cómo podrían los ricos sustentar su Poder si no hubiese un Estado encargado de educar proletarixs respetuosxs de la patria, la bandera y la ley, dispuestxs a ser trabajadorxs asalariadxs y orgullosxs de serlo? ¿Acaso existiría la policía que se encarga de resguardar las riquezas que nos han robado, y que reprime a la población, tanto en las manifestaciones como en los barrios con el gatillo fácil, y que a diferencia de lo que nos dicen, no combate el delito sino que lo regenta? ¿Cómo se sostendría el statu quo de la democracia capitalista si no hubiese un Estado que les enseña a sus ciudadanxs que el Grupo Clarín tiene todo el derecho a inundarnos de mierda diariamente a través de sus distintos tentáculos, y a la vez tener la cara para hablarnos de la “libertad de prensa”? No compañerxs, se nos tiene que grabar en la cabeza: el Estado es una herramienta de dominación de clases, es por eso que no se le puede utilizar con otra finalidad que la de dominar, y es por eso que Estados Unidos -la meca del Capital desde la Primera guerra mundial- “exporta Democracia y Libertad” hacia otros países aún libres del Estado capitalista. Nos quieren hacer creer que esa es la mejor forma de vivir, o mejor dicho (desde la caída del muro de Berlín), nos dicen que es la única forma de vivir. Su gran truco es hacer pasar los intereses particulares de la burguesía por el interés de todxs. De ahí el pobre de derecha o la clase media que consume toda la mierda que se le arroja. De ahí la Guerra Social de la que hablamos. No es el Estado el que impide que el hombre sea el lobo del hombre como decía Hobbes, sino que es justamente el Estado el que perpetúa que lxs individuos se vean entre sí como enemigxs, como contraposiciones, eliminando cualquier capacidad de comunidad y solidaridad entre ellxs. “Divide y reinarás” era la ley máxima según Maquiavelo, y ese sí que sabía de Política. Donde hay libertad, no hay Estado Ahora bien, ¿cómo se podría resolver todo este embrollo? Ciertamente no con “políticos honestos y nuevos” como sugiere la izquierda, el progresismo y los liberales cuando quieren lavarse la cara. En primer lugar, debemos comprender que hoy en día estamos así de mal por la culpa de los políticos, la pasividad y la delegación de responsabilidades. Quiero decir que los líderes y su contracara, la pasividad del resto, son un problema en sí. Somos nosotrxs mismxs (y esto no es casual) lxs que alargamos el problema, nombrando una clase gobernante que se encargará de administrar nuestros asuntos. Como decía Bakunin: “Donde todos gobiernan, ya no hay gobernados, y ya no hay Estado. Donde todos disfrutan del mismo modo de los mismos derechos humanos, todo derecho político pierde su razón de ser” [8]. Elegir representantes cada tanto no es libertad, es esclavitud. En segundo lugar, los diferentes gobiernos marxistas que han existido a lo largo de la historia son más que suficientes para argumentar lo antedicho. La Revolución Social no es algo que se pueda construir desde afuera o desde arriba, “guiando” a las masas. Esa forma de ver las cosas sigue reproduciendo relaciones de dominación. Como siempre decimos: el fin no justifica los medios, sino que el fin debe de estar contenido dentro de los mismos. Si para alcanzar la libertad te organizás de forma autoritaria y pretendes mandar a las masas, en lugar de proponerles y acompañarlas a que ellas mismas se organicen, para que justamente, dejen de ser masa, estás derrotadx desde el comienzo. Más allá de que la complexión económica de un territorio dominado por un Estado comunista cambie, las relaciones de Poder continúan, esta vez ejercidas, no ya por una clase capitalista, sino por una clase burocrática y esta nueva clase, que ya por el simple hecho de administrar el Estado (la ley, la policía, la cárcel, la economía, etc.), generará y desarrollará herramientas para perpetuar su nueva posición de privilegio. El Estado nunca podrá liberar a los individuos porque “como el Estado es un parásito, no puede vivir después de haber matado al cuerpo que lo alimenta” [9]. Donde hay libertad, no hay Estado. El Estado es la Guerra Social “¿El Estado es un parásito? Esto es el colmo ya” dicen aún más enojados que antes los autoritarios. “¿Cómo van a decir eso? Gracias al Estado hay familias que reciben sus pensiones, su AUH, jubilaciones, etc. ¿Qué querés que esa gente quede en la calle? ¿Qué se mueran?”. Ese tipo de chicanas son delicadas, pero solo buscan pegar bajo. Tenemos bien en claro que hay gente que vive de la plata que le da el Estado, y de trabajos que el mismo Estado crea; pero si el Estado le da esa plata o ese laburo es porque en primer lugar se la sacó, y porque, como dijimos, el Estado es una herramienta de dominación de clases que tras siglos de lucha contra los pueblos ha ido perfeccionando la ciencia de gobernar, de regular las contradicciones inherentes a un sistema que socializa el trabajo pero no el producto del trabajo. El Estado es un parásito porque nos ha robado la capacidad de auto-organizarnos, nos ha vuelto esclavxs al robarnos la capacidad de auto-determinar nuestras comunidades, nuestras vidas. De hecho, ha destruido la comunidad, condenándonos a vivir en una sociedad de masas en la cual cada vez se busca homogeneizar y atomizar más el terreno. El Estado con toda su educación y su represión histórica nos ha despojado de toda posesión real de nosotrxs mismxs y de lo que nos rodea, a tal punto que hoy en día, el Estado se encuentra incluso dentro de nosotrxs mismxs. Digo, el Estado más allá de ser estructuras concretas -que deben y pueden ser atacadas- desde las que se ejerce el Poder (cárceles, congresos, medios masivos de comunicación, escuelas, comisarías, bancos, etc.), también se encuentra dentro de nosotrxs en nuestra subjetividad. He allí, la eficacia de la dominación; formar sensibilidades sumisas que creen ser libres y que toman sus decisiones. Como dice el Lonko Facundo: “La gente no piensa como quiere, la gente piensa como quiere el sistema”. ¿Acaso la gente va a votar con un fierro en la cabeza? No, la gente va con ganas a votar, siente que está ejerciendo su libertad, y que es parte de la Historia haciéndolo. Siente y cree que el patrón es alguien honorable y que el político debe ser respetado. Siente que las ganas de comprar y consumir cosas son naturales. El Estado está dentro nuestro porque ni siquiera tiene que decirnos que a la hora de protestar lo único que podemos y debemos hacer es ir a marchar y demostrar nuestro enojo de forma pacífica. El Estado está dentro nuestro porque nos matamos entre nosotrxs por plata o por un celular, porque matamos a nuestrxs novixs, porque lxs celamos, porque queremos poseer al otrx, porque competimos entre nosotrxs, porque comemos lo que nos dice y porque nos medicamos con sus remedios como si nosotrxs mismxs lo quisiésemos. Incluso, con las farmacéuticas y los antidepresivos, el Estado ha logrado que dejemos de sentir “depresión” o al menos que la tapemos lo suficiente para seguir soportando esta realidad. Está dentro nuestro porque somos patriarcales y nos relacionamos con las cosas de forma dominante y no solidaria. El Estado no nos une, sino que nos separa. El Estado es la Guerra Social. Y donde hay guerra no hay solidaridad. Sostenemos y afirmamos que la solidaridad es el arma más revolucionaria de todas. ¿Qué entendemos nosotrxs por solidaridad? Entendemos esto: Organización. El Estado, con su “divide y reinarás”, busca cortar todo lazo de solidaridad entre lxs explotadxs, empujándolxs a competir y al “sálvese quien pueda”. De hecho, como sabemos, la burguesía, tanto a nivel nacional como a nivel internacional, es una minoría. Todas las sociedades divididas en clases sociales y cristalizadas en un Estado son en beneficio de una minoría por encima de una mayoría. ¿Pero cómo puede ser que, a lo largo de toda la Historia, las minorías se las han arreglado para dominar a la gran mayoría? Responder esa pregunta podría ser extenso y no es el interés de este escrito, pero podríamos atinar a una hipótesis: la causa de la dominación de la minoría por sobre la mayoría se debe a que la minoría se encuentra sumamente organizada y coordinada a nivel mundial, y que con el pasar de los años, perfecciona esa estructura de dominación, poniendo mucho énfasis en promover y sostener la des-organización de la gran mayoría sometida. Ése es el fin de la política, del Estado y los partidos políticos. Nos dicen cómo tenemos que organizarnos para cambiar las cosas porque saben que esa forma solo perpetúa la dominación. Generan así, un espectáculo intrincado, lleno de palabras inentendibles que buscan confundir. ¿Cómo saber quién tiene la verdad, si los radicales o los peronchos?, ¿o la tendrá la Izquierda que es tan creativa que tienen al FIT (Frente de Izquierda de los Trabajadores) por un lado, y a la IF (Izquierda al Frente) por el otro? ¿O será verdad lo que dicen los economistas del espectáculo? Por eso, como anarquistas, creemos que la lucha está en promover la auto-organización de la gente, impulsándola a apropiarse de sus vidas y sus territorios. ¿Por qué permitimos que la policía se pasee plácidamente por nuestros barrios? ¿Por qué hay cada vez más cámaras de seguridad? ¿Por qué hay cada vez más vallas en los parques? ¿Por qué recibimos alegremente a lxs políticxs cuando visitan o inauguran una obra pública o una fábrica? ¿Por qué pagamos mansamente todos los tarifazos que nos meten? ¿Por qué hay que pagar para tener un techo? Porque no poseemos nada. Ni los barrios son nuestros, ni el trabajo, ni los parques, ni el transporte público. Sentimos que nosotrxs le debemos al Estado, cuando es realmente él quien nos debe a nosotrxs. No tenemos nada más que nuestra voluntad para cambiar las cosas. Y las cosas van a cambiar cuando logremos robarle espacio y tiempo al Estado. Cuando comencemos a generar nuevas formas de relacionarnos entre nosotrxs, contrarias a la lógica patriarcal y estatal. Debemos sabotear las bases mismas de este sistema, generando una nueva sensibilidad que no quiera ni dominar ni ser dominada. Y la única forma de construir estas nuevas relaciones es generando organizaciones autónomas del Estado y de sus recuperadores históricos (partidos y sindicatos), que construyan diversas estructuras autónomas pero relacionadas entre sí en base a la solidaridad, en las cuales se pueda expresar esa nueva sensibilidad de la que hablamos. Esas estructuras deberían ser capaces de organizar y defender la nueva vida. Es por eso que la frase “¡Muerte al Estado, que viva la Anarquía!”, es mucho más profunda de lo que nuestros enemigos quieren que sea.
Fran Fridom
Citas[1] La frase “Nunca más” es un claro ejemplo de olvido de la implicancia. [2] El anarquismo también es una filosofía cuyo corpus teórico nace en Europa, y sufrió un rato de occidentalismo. Esto se observa claramente en Kropotkin y su amor y predilección por la ciencia y la bondad de la naturaleza. Vale la pena leer la crítica de Malatesta al “optimismo kropotkiano”. [3] Karl Marx y Frederick Engels. Manifiesto del Partido Comunista, 1848, fragmento de la primera parte “Burgueses y proletarios”. [4] Engels.De la primera parte del artículo “Der demokratische Pauslawismus”, publicada el 15 de febrero de 1849 en la Neue Rheinische Zeitung MEW, t. VI, p, 273-274.] [5] JP Feinmann, Peronismo, Filosofía política de una persistencia argentina, Tomo II, Planeta, Buenos Aires, 2012, p.53. [6] Pretender realizar un análisis exhaustivo del marxismo y el peronismo citando un par de frases es, obviamente, una locura, pero dichas citas atestiguan muy bien las raíces occidentales-burguesas de dichas ideologías. [7] Wolfi Landstreicher, La red de la dominación. [8] Escritos de Filosofía Política, compilado de textos de Bakunin por Maximoff. [9] Anarquismo y lucha de clases de Albert Meltzer y Stuart Christie. Editorial proyección. Read more ... |
Posted: 20 Aug 2018 10:41 AM PDT
Documental que describe la vida del compañero Simón Radowitzky (Симон Радовицький), anarquista de la región de Ucrania. Conocido por su acción en contra el jefe de policía Ramón Lorenzo Falcón, a quien asesino con una bomba gritando ¡VIVA EL ANARQUISMO!, por ser el responsable de los brutales asesinatos contra obreros que conmemoraban un nuevo 1 de mayo en la región Argentina, en 1909.
Simón participó en muchas instancias y luchas anarquistas, de la cuál como anarquistas debemos rescatar como parte de nuestra memoria histórica y combativa. Simón Radowitzky vive en cada lucha, por la liberación total.
Fuente y Descarga: https://instintosalvaje.org/simon-hijo-del-pueblo/
Read more ... |
Posted: 20 Aug 2018 10:35 AM PDT
Un día llegará,
llegará lo que todas esperamos, ese amanecer multicolor en el que todas pensamos.
Luz del día
en el que yo no pude más, en que en mi interior algo se fracturó y yo me deslicé hasta la locura intensa.
Ahora, a rachas,
voy asomando y cayendo entre los mundos de la locura y la cordura, vislumbrando a cachos el camino por donde he de pasar caminando a trompicones.
He de ir despacio,
mi interior sigue soñando, mi vida joven, ha sido breve e intensa, con las emociones a flor de piel, pero ya no aguanto las derrotas.
En mis pensamientos
queda mi imagen desdibujada; un cacho de carne que deambula por la ciudad sentándose en cada terraza a consumir café y cigarrillos,
otra parte de mi sueña.
Sueña con pensamientos e ideas que después del frenesí de la locura casi no sé describir.
No me siento atrapado.
En mi interior se respira libertad, y en mi mente hay algo que busca crecimiento interior.
Poeta: no te rindas,
quizá no hayas elegido esta vida, pero, has descubierto la hermosura y el misterio que ella esconde y creo que te has enamorado.
Vivir es la eterna pregunta
que tengo en mi pensamiento, ¿por qué vivimos?, ¿de dónde sale esta existencia tan demoledora, donde todas nos arruinamos las unas a las otras?
Tal vez sea un ingenuo,
¡tantos años luchando por una causa, por un mundo que parece hecho de sueños!, que ahora me siento perdido y desdibujado, que ahora me engulle el olvido y la desdicha, que ahora no puedo olvidarme de la ilusión y de la verdad.
Todo es un sueño,
¿de verdad se pensaba que la realidad era algo sólido? Ahora pienso que todo es una ilusión, que todo está hecho para el beneficio de unas pocas y que todo es relativo depende quien lo piense.
No creo en las que piensan
el el bien y en el mal, en mi interior se ha formado algo más complejo, algo que a veces me forma un nudo en el estomago, algo que no sé explicar, algo que de repente sube a las estrellas para luego bajar a la Tierra y sumergirse en las profundidades de mi ser.
No hay tormenta
que no me la pase pensando en una idea; en la gran Idea que movilizó a pueblos enteros contra las opresoras, esa idea que cruzó fronteras y se introdujo en el fuero de todas las parias, de todas las oprimidas,
pienso en ti, anarquía,
pienso en ti como en el futuro del ser humano, pero también de los animales y de la Tierra.
No puedo olvidar el día
en el que te conocí, allá lejos, en un aula del instituto, luchando siempre contra las injusticias, soñando siempre con un mundo mejor.
Ahora siento tus caricias,
desbordando el vaso de lo establecido, haciendo estremecer solo con oír tu nombre a aquellas que han elegido el poder como forma de vida.
Hoy no es noche de poetas,
hoy es el amanecer de un mundo esclavo que se sacude el yugo de la opresión. ¡Salud!
-Richie punk
Read more ... |
Posted: 18 Aug 2018 04:33 AM PDT
Sin poder escribir un poema
que realce la belleza de una noche en tus laderas cuando el silencio es vida, tumbaditos al lado de la hoguera desnudos contándonos las pecas.
Me meto en la cama,
los aullidos no cesan
no hay descanso en la estepa,
los lobos aprietan los dientes.
Si me exilio que sea entre tus brazos,
pero antes hay que echar a los fascistas del barrio.
La montaña espera,
inmóvil, a los guerrilleros que la protejan.
Espera,
la noche en que la Luna baje y los aullidos cesen. Read more ... |
Posted: 15 Aug 2018 07:41 PM PDT
El próximo sábado 25 de agosto en Madrid, a las 19h, con motivo de la semana internacional de apoyo a presxs anarquistas, organizamos una noche de carteo a presxs.
Nos vemos en el Local Anarquista Magdalena (calle Dos Hermanas 11, Metro Tirso de Molina). Read more ... |
Posted: 14 Aug 2018 01:43 PM PDT
Oír hablar de anarquismo en los medios es como si nosotrxs mismxs, ahora en frío, intentasemos habar en japones con unx extraterrestre, no nos vamos a entender aunque lo expliquemos en diagramas. De todos modos en este episodio de 'Keiser Report' se abordan temas interesantes que la ortodoxia anarquista no solo no trata, si no rechaza y hasta evita.
Autogobierno de CheránEn la primera parte de este episodio Max Kaiser habla junto con Stacy herbert, con su particular visión de predador capitalista, de la famosa comunidad mexicana de Cherán, en la cuál, tras echar a los políticos, comenzaron a producirse maravillas, como un descenso de la criminalidad o la paralización de la deforestación galopante que les azotaba desde hacía años. La abolición del sufragio les valió la intervención de las Fuerzas Armadas, a las cuales derrotaron, declarándose territorio autónomo.Criptoanarquismo de internetEste repaso a la situación de México les lleva a hablar del empuje que las criptodivisas en el país, donde se están afincando muchos proyectos por ser un área poco legislada. Ofrece una interesante visión de modelos de redistribución de valor descentralizados basados en la cadena de bloque y cómo éstos reflejan el espíritu anarquista en lo que ya se considera Criptoanarquismo ("la realización ciberespacial del anarcocapitalismo" Vernor Vinge vs criptolibertad.com).Recordemos que en Acapulco se afinca uno de los máximos exponentes del anarcocapitalismo, Jeff Berwick, editor de 'Anarchast' y 'The Dollar Vigilante', organizador de la famosa conferencia anual 'Anarchapulco', partícipe y promotor del negocio de las criptodivisas y adalid del criptoanarquismo. En la segunda parte Max se ofrece una entrevista a Bill Ottman, de Minds.com, red social basada en la cadena de bloques, es decir una "Cripto-red Social", y se debate sobre el cómo competir con gigantes como Facebook o Twitter. Es decir, en este mejunje de programa se concentra lo mejor del anarquismo, como lo es la experiencia comunal de autogobierno de Cherán, lo peor del anarquismo, como es la estafa del anarcocapitalismo, con una serie de tendencias tecnológicas y culturales transversales tan mezcladas y confusas que se hacen prácticamente indefinibles como es el criptoanarquismo y las cripto-redes sociales. La impresión general es que los movimientos anarquistas van a diferentes velocidades en proyectos parciales que no llegan a impregnarse ni integrarse, a veces ni influirse, los unos de los otros. Actuamos como comunidades separadas. El timo del anarcocapitalismoComo reflexión final recordar que el anarcocapitalismo acepta, promueve y se basa en la propiedad privada, origen de la propiedad de los medios y por ende de la explotación de los trabajadores. Aceptan el despojo. Es decir, por mucho que eliminasen el estado, el dominio de los funcionarios, siempre al servicio de los empresarios, seguirían gobernando los empresarios, inversores y accionistas, esta vez de forma directa, en lo que sería literalmente tecnocorporativismo, criptocapitalismo o cripto-tecno-liberalismo, con todas sus sonoras y molonas variantes. El anarcocapitalismo es otro engañabobos ideológico de un capitalismo descabezado que busca soluciones donde no las hay. Solo hay que ver el tipo de publicaciones y publicidades emplean para darse cuenta que usan el prefijo anarc- como quien habla de los productos bio-, eco-, natur-; hacen caja de una marca. Para ellos somos otro producto.A pesar de todo este es un episodio que merece la pena ser visto. Desde este espacio le damos gracias a Max y Stacy por su difusión. Salud! PHkl/tctca
https://www.youtube.com/watch?v=rE0HAk4SAp8
______________
Fuente - "El anarquismo es un tipo de filosofía política pacifista" - Keiser Report en Español (E1259) - YouTube 28.7.2018
_____________ Para Saber Más:Criptomonedas y anarquismo: una nueva bandera libertaria | CriptoNoticias - Bitcoin, Blockchain, criptomonedas 28.1.2018Cripto-anarquismo - Bitcoin - Forobits - El foro de Bitcoin y Criptomonedas en Español 15.4.2015 Read more ... |
Posted: 13 Aug 2018 06:08 PM PDT
El ideal y la juventud, por Elisée Reclus (1895)1
Si la palabra "Ideal" tiene realmente algún significado, significa mucho más que un vago anhelo de cosas mejores, una fatigosa búsqueda de la felicidad o un anhelo irregular y triste de un ambiente menos odioso que la sociedad de hoy; ah, sí, debemos darle al término un valor exacto, debemos resolver resueltamente e inteligentemente cuál es el final ostensible de nuestras incesantes aspiraciones. Investiguemos entonces ese Ideal. Para algunos, no sería más que un retorno a las edades del pasado, a la infancia de la humanidad; consistiría en la negación de la ciencia, en una postración humilde como en el pasado frente a un atronador Sinaí, y bajo el ojo de un Moisés que obra milagros, el autoritario traductor de la voluntad divina. A esa concepción de completa renuncia y obediencia, los anarquistas oponen otra, orgullosamente consistente con la libertad individual más plena y también con la acción voluntaria de la sociedad, la acción espontánea que se hace posible mediante la supresión del privilegio y de la autoridad arbitraria, mediante la abolición de la propiedad privada, por respeto mutuo, y por la cooperación inteligente con las leyes naturales. Entre esos dos ideales no hay compromiso posible: el conservadurismo y el moderatismo, el liberalismo, el progresismo e incluso el socialismo son solo un recurso político, diseñado para retrasar el buen momento, detener con unas pocas migajas de la libertad las bocas de aquellos que demandan pan completo Para liberarse de la agonía de la evolución, el hombre debe perderse en Dios o, como ser, erguido y libre, convertirse en su propio amo. Solo tome en consideración la última alternativa, hacia la cual todos los jóvenes, en quienes las gloriosas posibilidades de la vida están latentes, dirigen consciente o inconscientemente su pensamiento y esfuerzo. Lamentablemente, la mayoría actúa y piensa para este fin de forma inconsciente. Deambulan de aquí para allá, sin ningún propósito fijo, escépticos y pesimistas en teoría, aunque afortunadamente su acción es frecuentemente inconsistente con su profesión. Sobre todo, es importante tanto para ellos como para nosotros mismos deshacernos del lenguaje de la desesperación. ¿En qué tipo de futuro podríamos contar si fuera cierto que, a pesar de toda apariencia de lo contrario, no había nada nuevo bajo el sol, y que todas las luchas humanas eran meros conflictos de fuerza bruta, en el cual, por supuesto, el débil debe invariablemente ser conducido contra la pared? ¿De qué serviría en ese caso soñar y hablar de mejores entornos sociales en los que habría alimentos para todos, libertad y justicia para todos? Nuestras palabras serían solo un sonido pasajero, y el hombre sabio, como dijo Eclesiastés hace más de dos mil años y como los poetas y los rimadores han repetido repetidas veces y con frecuencia, estarían contentos de comer, beber y divertirse. Tomar la vida tal como viene sería una verdadera filosofía, y si debería estar cargada de demasiados problemas o demasiadas penas, lo mejor sería ponerle fin. Se jugaría una pequeña bola de plomo, una pequeña gota de veneno y la pobre farsa de la existencia. Aunque el suicidio es incuestionablemente raro entre los jóvenes, el modo de pensar que lo justifica es demasiado común; y además, hay muchas maneras de entrar a la muerte sin el vulgar derramamiento de sangre. Quizás lo más conveniente es dejar de vivir en cualquier sentido real, abandonar el uso de la mente, llegar a la conclusión de que no hay nada más que conocer, de derivar como una paja en el diluvio, tomar nuestras opiniones listo y repetirlos como un loro, para mirar desdeñosamente todos los esfuerzos independientes y la especulación; y aunque un retorno a la superstición del viejo mundo sea imposible, porque no podemos resucitar el pasado, estos muertos en la vida pretenden ser todavía del rebaño de los fieles, hablan de los artículos del credo y practican las payasadas prescritas por los sacerdotes. Sin fuerza de carácter o fuerza de voluntad para descubrir la verdad, se vuelven hipócritas cobardes, y pronto alcanzan el fin que han buscado, la aniquilación en sí de todas las cualidades humanas nobles. Esa es la verdadera muerte; deje que la cesación de la respiración sea rápida o lenta, solo hace que se coloque en un ataúd un objeto que hace mucho tiempo era un cadáver. Pero como decidieron no ver, no escuchar, como pueden ser pesimistas y hombres de placer, los peores, los pesimistas, ven que un cambio se cierne sobre el futuro cercano: como pasajeros en un barco cruzando un mar tormentoso sienten el temblor de las maderas, la vibración de la embarcación sobre la que viajan, y, a pesar de sí mismos, están asombrados por la posibilidad de un desastre inminente. La mañana lanza su molesta sombra al día: la "cuestión social", o para usar su propio lenguaje, "las cuestiones sociales" se destacan en el primer plano de su punto de vista, y saben que los obstáculos y retrasos, como quiera que sean causados, son todo en vano para evitar una solución rápida. La nueva era está a la vuelta de la esquina, y el gran problema exige que se resuelva y todas las demás preguntas quedan relegadas. Entre los dichos, atribuidos al Cristo tradicional, hay uno que fanáticos piadosos y cómodos ruedan bajo su lengua con santo placer, y es este: "Tenéis al pobre siempre contigo". Pero fuera de las profundidades ahora se escucha una voz que grita: "¿Por qué siempre?" Incluso últimamente algunos creían que la tierra no podía producir suficientes medios de existencia para aquellos que se aferraban a ella, y que para obtener una participación era necesario luchar con otros hombres en la necesidad similar, peleando como cerdos por la basura arrojada a sus abrevaderos Esa sigue siendo la doctrina de algunos economistas políticos, y aquellos que la enseñan la exponen con la mayor unción después de una buena cena. Pero ahora incluso los pobres se han cerciorado de que el mundo produce lo suficiente y de sobra para el pan, y que si los hombres fueran libres e iguales, las necesidades de todos podrían ser satisfechas. ¿Crees que después de que esta simple verdad haya sido dominada por la mente humana, la contienda continuará? No, en verdad, la sociedad se reorganizará: de acuerdo con los hechos. Ya no escucharemos esa voz incesante, triste y lastimosa que llama desde las profundidades: "¡Pan! ¡Pan!" haciendo que todo el trabajo sea un dolor, y robando la vida de cada gozo. Entonces llegamos al punto de inflexión de la historia. Todos los problemas sociales y revueltas de épocas pasadas han tenido, en mil fases diferentes, una causa fundamental: la falta de pan, y esa fuente continua de enemistad y odio está a punto de ser abolida. Ahora, por fin, el mundo girará en su propio eje, y los trabajadores del mundo tomarán sus asuntos en sus propias manos. Corto como puede ser el lapso de la vida humana en comparación con la evolución gradual de la humanidad, hay algunos de nosotros que pueden estar presentes cuando llega el gran cambio, y todos nosotros podemos abrir nuestros ojos para saludar el amanecer de la humanidad. Y en esta crisis, de verdad, leemos acerca de los jóvenes, descuidados de lo que depare el futuro, que están cansados de aburrimiento y que pretenden dar la bienvenida a la muerte con el dicho de que "la vida no vale la pena vivirla". Sin embargo, parecería natural que los jóvenes de todo el mundo, con su impetuosidad característica, se apresuren a abrir las puertas a la nueva era, se pongan de puntillas para ver la llegada del futuro. Recordamos con qué entusiasmo los estudiantes alemanes se prepararon para la refriega cuando fue necesario derrocar la tiranía napoleónica, cuán espléndidamente los jóvenes de las universidades francesas tomaron parte del derecho contra el poder al final de la Restauración, y en los años inmediatamente precediendo a la Revolución de 1848. Los estudiantes de esa época eran mucho menos numerosos de lo que son hoy, pero desempeñaron un papel más destacado en la historia de su país. Se lanzaron a todas las luchas, románticas, republicanas y socialistas, de ese período fatídico, y negaron que ninguna clase en la nación fuera tan receptiva como ellos mismos a la nueva idea. Tampoco fue simplemente la licencia de los soñadores poéticos, la exuberancia de los espíritus animales o una exhibición teatral de desprecio por la burguesía. ¡Cuántos de ellos desafiaron el encarcelamiento e incluso la muerte por sus opiniones! ¡Cuántos de ellos, inspirados por el celo misionero, se convirtieron en los apóstoles de un altruismo revolucionario, arrojando fortuna, posición y ventaja monetaria! Cuando el santo simonismo y el fourierismo llevaron el pensamiento humano al punto de ebullición, fueron los estudiantes los que se alistaron valientemente en las filas de los rebeldes intelectuales, sin importar la calumnia, la persecución y el exilio. Aunque los estudiantes de la Europa moderna suman más de cien mil hombres, su influencia en el mundo de las ideas es mucho menor que la de sus predecesores. Hoy en día es por cientos y no por miles que contamos a los jóvenes de las universidades que han puesto sus intereses personales en el altar del progreso social y que, bajo diversos estandartes, están liderando la entrada a la tierra prometida. Incluso se dice, y no podría aventurarme llamarlo injuria, que la mayoría de nuestros jóvenes académicos están contentos con las cosas tal como son, y que su gran ambición es adoctrinar a la sociedad con conservadurismo, y sorprender a sus amigos con lo que llamar a la "moderación" de sus puntos de vista; a este respecto, afirman modestamente ser más sabios que sus padres, quienes no pueden negar haber compartido en sus días jóvenes el entusiasmo prevaleciente. Un fenómeno extraño es ver a hombres jóvenes que se jactan de sentirse cansados de la vida, como si la incapacidad de admirar, disfrutar y ser feliz fuera más un mérito que una desgracia. Pero es bastante cierto que de esta manera mueren los ociosos ricos. Sin lugar a dudas, nuestra juventud universitaria moderna, aunque naturalmente orgullosa de haber pasado por el molino de muchos exámenes, no podría resistir sus extravagantes pretensiones de enseñar a los obreros mucho en la esfera del estudio y el pensamiento. No, su tarea es ser alumnos, no dar instrucciones. En los grandes movimientos populares, como el de la Comuna, los estudiantes estuvieron muy poco representados, mientras que los obreros suministraron abundantes tendones y cerebros. No era la pregunta meramente de trabajo y salarios; los intereses en juego eran los de toda la nación, de hecho, de toda la humanidad. En la hora actual, cuando una nueva dispensación está a punto de ser introducida, cuando los jóvenes caballeros de la reforma se preparan para su tarea, no es en las avenidas de las escuelas que las cuestiones más importantes en las mentes de los hombres se discuten más inteligentemente y con la más aguda visión. El graduado no es necesariamente el filósofo, ni una memoria bien almacenada invariablemente acompaña una comprensión iluminada. A menudo, el escudriñador seco como el polvo es pobre en sabiduría junto al hombre astuto del mundo que ha reunido aquí y allá los innumerables hechos a partir de los cuales desarrolla una gran cantidad de ideas generales. Su hombre científico puede encerrarse en su laboratorio como en una prisión, y malinterpretar el gran mundo; pero las personas siempre forman una teoría consistente del universo, ya sea verdadera o falsa. Pero hace poco tiempo, los profesores de la universidad despreciaron la evolución, pero en las calles y detrás del arado, entre obreros y campesinos, la nueva verdad encontró un hogar tranquilo y una bienvenida entusiasta. Sería tonto hablar despectivamente de la ciencia. El descubrimiento de un ladrillo babilónico, o la observación de un estambre de flores rudimentario, bien puede alegrar nuestros corazones, cuando el científico relaciona el hecho aparentemente aislado con muchos otros y muestra el valor del descubrimiento. Todavía más en el ámbito de las ideas deberíamos valorar la enunciación de un pensamiento nuevo o la disposición de los datos mentales en su debida importancia y relativa orientación. A este respecto, el estudiante, a menudo ha sido observado, cegado por el polvo de la biblioteca, apenas percibe que hay una "pregunta social" al aire libre, mientras que el trabajador, por otro lado, lo considera el objeto más importante de estudio, y se encuentra, por lo tanto, muy por delante de su estudioso hermano. Esta observación es válida en otras tierras además de las lenguas latinas, aunque en éstas la evolución intelectual o revolución, si prefiere la palabra, pueden haber progresado más, mucho más que en las escuelas alemanas de Alemania o entre los jóvenes alumnos de las universidades americanas. Los socialistas están contados por millones al este de la cordillera de los Vosgos [en Francia], pero en la Patria, dos o tres miserables pueden agruparse lejos de los bebedores de cerveza, unos pocos entre miles. En Harvard, la famosa universidad estadounidense, que cuenta con 3200 estudiantes, los reformadores son más numerosos, pero pocos se han atrevido a emanciparse de la superstición cristiana; en un censo reciente, solo dos de ellos declararon que no pertenecían a ninguna de las muchas sectas cuyo nombre figuraba en el cronograma. Es en la Inglaterra aristocrática, tal vez, que la mente humana disfruta de la mayor libertad. Bien, ¿cuáles son las causas de esta moderación conservadora entre los jóvenes, completamente fuera de contacto con el espíritu de la época? Incluso los profesores observan el fenómeno, pero tal es la esclavitud social de la vida universitaria moderna que el mal persiste con todas sus nefastas consecuencias. En general, se acepta que, desde su primer día en la escuela, la vida normal del niño es contraria a la naturaleza. ¿Qué se puede decir de una educación que organiza condiciones favorables para el desarrollo de la enfermedad de la columna vertebral, que a menudo daña permanentemente la visión, que controla los deseos naturales, que debilita o pervierte los instintos humanos? ¿No se opone a los grandes objetos de la educación tal como los entiende el sabio en todas las épocas: fuerza, gracia, belleza? Los indios americanos y los nativos de Australia, así como los griegos de la antigüedad, son unánimes en prescribir una vida fuera de la puerta como la mejor para los niños; mucho atletismo y ejercicio, calculado para desarrollar hombres fuertes, ágiles y sanos, elásticos con la vida y radiantes de energía. Entre nosotros, por desgracia, a menudo vemos que el joven que es nutrido de manera más cuidadosa y costosa resulta ser uno de los especímenes más deplorables de la humanidad muscular. Las estadísticas médicas nos permiten comprender que más de la mitad de los jóvenes académicos de las academias superiores de Europa continental han arruinado sus constituciones por autoindulgencia, por una vida de cansancio y monotonía; dos de cada tres son jóvenes débiles; y entre aquellos que han perdido su salud, hay muchos que han lesionado gravemente sus facultades mentales y que, al azotarlos y estimularlos en sus primeros años de vida, se ven obligados a utilizarlos con moderación en la edad adulta. Es cierto que podemos citar numerosos ejemplos de hombres que han mantenido su constitución robusta, sus extremidades ágiles y fuertes, su razón brillante y útil; pero estos casos son la excepción, no la regla, deben considerarse como causa no del currículum ordinario de la educación, sino casi siempre a los privilegios de la adolescencia adinerada y bien condicionada. Los jóvenes favoritos de la fortuna se agrupan naturalmente en dos clases: voluptuosos que agotan y no se capacitan por el libertinaje y el pesimismo, y unas pocas almas hermosas que aprecian un gran ideal, y se esfuerzan por estar a la altura. Si el entrenamiento de la familia y de la universidad educa al niño y al joven en detrimento de su naturaleza multifacética, al apartar de su visión los aspectos urbanos y rurales de la vida, excepto como se ve a través de agujeros, si se muere de hambre y lo empobrece físicamente, ¿qué significa eso para su persona? Por desgracia, hasta ahora, nuestras costumbres no nos han permitido respetar la individualidad del niño como la de un futuro igual, tal vez el de un superior en logros intelectuales y morales. Rara vez son los padres que ven en su hijo a un ser cuyas ideas y disposición tienen una inclinación propia, y rara vez se encuentran con el maestro que no trata de imbuir las mentes de sus alumnos con sus opiniones, su moralidad aceptada y quien no se esfuerza por facilitar su tarea al insistir en la obediencia estricta. Luego siga los exámenes de los cuales depende la carrera futura, y cada alumno, recibe su libro de texto como convicto con su cadena. El libro es el mismo para todos, y para todos el programa de estudio es el mismo. De ahora en adelante, toda originalidad en la investigación mental está prohibida, y la carga del compromiso diario con la memoria ocupa el lugar del pensamiento libre y la investigación espontánea; del mismo modo que el sacerdote debe saber de memoria su breviario, y el molino del budista tibetano gira incesantemente, mezclando su shibboleth perpetuo Oum mane padmi houm. Al menos algunos de estos manuales están maravillosamente condensados y contienen un resumen extraordinario del conocimiento humano. Una emoción de reverencia y asombro nos alcanza frente a estas estupendas obras, de las cuales cada línea es volumen, embalsamando el trabajo de una larga sucesión de sabios. ¡Qué riqueza no contada, qué alegría indescriptible realmente haber dominado el contenido de estas revistas preñadas! Bien podríamos considerar con envidia al bendito examinado que responde con confianza todas las preguntas basadas en el libro de texto. ¿Pero él realmente sabe todas estas cosas? ¿Ha aprendido las razones por qué de todos los hechos? Si eso fuera así, podríamos orar con benevolencia que él pudiera devolver, como lo hicieron los invitados de Vitellias, toda la comida que le resultaba superflua de esa comida indigerible. Permita que olvide lo antes posible su examen para conocerse a sí mismo y para encontrarse en el dominio del estudio libre, en la perspectiva de descubrimientos inesperados como resultado de una investigación independiente. Pero si él ha incursionado en todas las ciencias sin gustarle, es probable que produzca un inventario ambulante, sin entusiasmo, sin ambición, profesantemente capaz sin preparación para la tarea más difícil. Suponiendo nuevamente que sea cierto que los testimonios y certificados de los profesores no son implícitamente confiables, que el favor especial de los maestros se otorga a menudo a los alumnos a quienes un amigo común les ha dicho una buena palabra. "Acostúmbrense como hombres", dicen los maestros, ¡en vista de la distribución de premios! Pero no tomes esa llamada a la energía demasiado en serio. Con qué frecuencia, por el contrario, se debe interpretar como, "Sé complaciente, aprende a arrastrarte". Además, a menudo se ha encontrado que los hombres que son geniales por genio pueden caer muy bajo a través de la flexibilidad del carácter. ¿No es bien sabido que los científicos a veces son lentos para respaldar una nueva opinión porque es inaceptable en lugares altos: "Tienes razón", dicen ellos, "y nos complacería hablar bien de ti en público, pero el Emperador no está dispuesto ". Ciertamente, la forma de educación es espantosa para los jóvenes, con sus competencias, sus exámenes, sus libros de texto y todo el atiborramiento científico sustituido por la ciencia: pero eso es solo una pequeña parte del mal. Con mucho, la fase más alarmante debe buscarse en la organización económica de la sociedad. ¿Cuál es el propósito final hacia el cual todos, jóvenes y viejos, son arrastrados por la corriente de las circunstancias? ¿Cuál es el ideal vulgar y común de los que nacen en la cima de la inundación? El viejo Guizot lo dio a conocer hace mucho tiempo, con su cinismo habitual: ¡hazte rico! ¡Hazte rico! "Ahora, desde la propia constitución de la sociedad, los estudiantes toman conciencia como un hecho preliminar de que acumularán dinero por medio de sus diplomas". La ciencia significa dinero "bien pueden decir confidencialmente entre ellos, o incluso en voz alta cuando desafían la política de moderación. De sus filas se reclutan las clases dominantes, que son también las clases ricas. En la conversación de la familia se discuten sus perspectivas como hombres profesionales, pero sin eso están demasiado bien informados, con una matrícula inconfundible de juventud , en cuanto a la posición social y la fortuna que su trabajo les traerá. Más sabios que sus padres, que fueron neciamente contaminados por el republicanismo y el romance, pisan con los ojos abiertos y la mente autoconsciente los caminos tortuosos que conducen a una carrera brillante, a la fama y a la fortuna. Recientemente, el gran profesor Dubois-Reymond, en la recepción del emperador alemán a su regreso de la coronación en Versalles, se esforzó por glorificar la universidades como el guardaespaldas de los Hohenzollerns! ¡Con el mismo espíritu, el ejército de estudiantes, sacerdotes y funcionarios podría presumir más sinceramente de que son el guardaespaldas de El Capital! Incluso en el santuario interior de la ciencia podemos leer estas palabras que Lamartine – pronunció innoble, "Comprado y Vendido". Sin duda, la formación de la sociedad, construida sobre la propiedad privada como sobre una piedra angular, nos obliga a hacer lo que hacen los demás, las condiciones inevitables de éxito en la vida, pero debemos comprender a fondo la vergüenza de nuestros procedimientos forzados, y determinar poner fin a la desgracia, cada uno de acuerdo con su capacidad, trabajando para la realización de un mundo nuevo donde los resultados del trabajo común pertenecerán a todos sin una negociación preliminar. Cuanto más alto es un acto en la esfera intelectual y moral, más difícil y molesto es pedirle un salario: una vez más es la desmoralización de lo excelente lo que se convierte en lo horrible. ¿Qué se debe pensar, del cirujano que posee la vida de un hombre al final de su bisturí y quién comienza la operación estirando su mano por un poco de oro? ¿El poeta que se deleita en una nueva imagen, o el sabio que un nuevo descubrimiento transporta con alegría, espera una lista de precios o estudia la tasa de salarios de la unión comercial antes de publicar sus versos o proclamar la nueva verdad? Ante semejante cálculo, muchos miles de millones estaríamos en deuda con Bacon y Descartes por la ayuda que han dado al mundo científico. La antigüedad nos ha otorgado una historia significativa, la de Arquímedes, quien mientras tomaba un baño y notando el grado de inmersión de un flotador en madera y un corcho de aceite, de repente fue golpeado por un rayo por la idea de su ley el peso específico de los cuerpos. El descubrimiento fue hecho. ¿Pensó Arquímedes en el dinero que podría pedirle al tirano Hiero como recompensa de su genio? Saltó de la bañera, corrió por las calles de Siracusa y lloró a todos y cada uno, acuáticos, carreteros y peones: "Lo he encontrado, lo he encontrado". El eco de ese grito de alegría se reduce a nuestros días. Los descubrimientos de la ciencia traen consigo felicidad tan exaltada que signfca que toda consideración debe degradarlos. Saber nos impone la obligación de enseñar. El hombre profesional de hoy en día se da cuenta de que puede vender al menor postor su conocimiento de segunda mano: el verdadero estudiante, digno de su nombre, investiga que se pueda difundir ampliamente la verdad. Además, ¿cómo podría un hombre semejante vivir a la altura de un ideal elevado si se le permite que su mente se vuelva insensible por la contemplación de intereses sobornables? La vieja fe religiosa que los supersticiosos aún nos predican está desapareciendo detrás de nosotros como una niebla. Hace lo mejor que puede para reconciliarse con el espíritu de la época en la beatificación de los que antes ardía, llamándose amigo de la evolución, del republicanismo, incluso del socialismo. No responde más a los requisitos de la humanidad; la cadena de milagros y de dogmas que arrastra retrasan su avance, y su moralidad, que es sustancialmente la de la resignación, del pesimismo atemperado por esperanzas lejanas, no puede entrar en rivalidad con éticas puramente humanas, lo que inculca el uso y desarrollo de nuestras energías en toda su plenitud. Así que la religión -y uso esa palabra en su más noble sentido, es decir, el amor y el éxtasis por un ideal sublime- se aleja cada vez más de la región del misterio y de lo desconocido, para dedicarse a los seres del mundo conocido, es decir, sobre la humanidad. ¿Crees que podría agotarse allí en profundidad, en intensidad, en poder de devoción? El que se sacrifica a sí mismo, sin esperanza de recompensa, ¿es inferior a aquel que macera su cuerpo o se dedica a la caridad para ganar la salvación? Los escritores antiguos nos han legado admirables tratados de ética y filosofía sobre la educación del ser humano, que puede encontrar sabiduría y, al mismo tiempo, felicidad al controlar sus pasiones, modelar su carácter, purificar sus pensamientos, reducir al mínimo sus necesidades. Tales palabras sobre este tema las de Lucrecio, Zenón, Epicteto, Séneca, incluso, Horacio, son palabras inmortales, que reverberarán de edad en edad, y que ayudarán constantemente a elevar el ideal humano y a elevar el valor del individuo. Pero ya no es en estos tiempos una mejora puramente personal, como en los días del heroísmo estoico, es una empresa hoy en día de ganar, por educación y unión, para toda la sociedad lo que nuestros antepasados reclamaban anteriormente para el individuo solitario. Debemos estudiar a la humanidad en la constitución de su conciencia moral y ver que encuentra su camino hacia la felicidad ante ella metódica y con energía, es decir, que alcanza la plena realización de su libertad. ¿No es esta estupenda tarea lo suficientemente grande como para emplear toda nuestra actividad, todos nuestros afectos, todo el poder intelectual y moral de cada uno de nosotros? Pero esta felicidad, ¿alguna vez podremos alcanzarla? Aquí es que el problema social nos confronta en toda su complejidad, porque para una mera comida feliz no es suficiente, también necesitan el libre desarrollo de su individualidad en condiciones de igualdad con otros hombres, sin restricciones y sin servidumbre. Tal es nuestro ideal anarquista, tal es también el ideal (estoy seguro de ello) que es apreciado de una manera más o menos consciente, por todas las personas benevolentes. Sin embargo, estamos sorprendidos de escuchar en ciertos círculos una opinión contraria. Algunos escritores incluso han sido conocidos por declarar que tal dicha no es algo que se desee. Para estos extraños idealistas, la guerra parece una bendición; se trata de despertar nuestra energía, nuestro coraje, restablecer el carácter que se ha avergonzado en los suaves abrazos de la paz. Odio mutuo entre las naciones, tal vez entre clases: tal es, si no su ética, al menos su esperanza. Para aquellos de nosotros que hemos experimentado las abominaciones de la guerra, tal idea parece monstruoso; sin embargo, mediante un ingenioso ejercicio de la inteligencia podemos comprender el residuo del sentimiento moral que se encuentra en el fondo de esta paradoja. La guerra es una condición de la actividad, y como tal es mejor, o al menos es menos una calamidad, que un estado de inercia flácida; podemos recuperarnos de ella, mientras que la inacción absoluta conduce inevitablemente a la muerte. Sí, la actividad es indispensable; cada fuerza debe ser probada antes de ser aplicada a un trabajo definido, pero, ¿deberían estos ensayos entrar en peligro, o no deberían emprenderse a la luz de la ciencia y con los métodos más aprobados? En este sentido, las personas a las que llamamos salvajes, y aún más notoriamente, los griegos, las civilizaciones más altamente civilizadas, nos dan dirección. Los hombres jóvenes no fueron admitidos a la ciudadanía y no se consideraron aptos para tomar su lugar al frente de una familia, o para realizar las tareas prescritas por el estado, antes de haber dado pruebas indudables de su destreza, su fuerza, su coraje y sus poderes de resistencia. No estaban sujetos a la complicidad, eran perfectamente libres de evitar la prueba, sin embargo, ninguno tomó ese curso, lo que habría implicado su deshonor. El respeto por la opinión pública era demasiado intenso como para que alguien quisiera retirarse de los juicios que lo pondrían en la categoría de los hombres. Entre las tribus más primitivas, una vez más, los héroes voluntarios, tanto niños como niñas, se sometieron alegremente a los sufrimientos más terribles, a auténticos dolores de tortura; soportaron el hambre y la sed durante varios días, se entregaron a las abrasadoras picaduras de las hormigas, se azotaron sin piedad entre sí, sufrieron mutilaciones temerosas, sin un grito, sin un murmullo. Con características sin problemas, sí, con una cara sonriente, se presentaron ante sus jueces: habían dado el precio de su futuro. No es de esta manera incivilizada en la que imaginamos que se aplicarán pruebas de valor, el futuro de los jóvenes en su admisión a la vida de hombres maduros, pero nos parece en armonía con la naturaleza humana que en el período de florecimiento de la adolescencia , fortaleza bien desarrollada y amor incalculable, los jóvenes pueden mostrar de manera brillante de qué material están hechos mediante actos de coraje, sacrificio y devoción. Si la opinión pública solo los alienta, ninguna acción parecerá demasiado difícil para su osadía. Apelemos solo a su naturaleza superior y todos responderán. Durante la guerra de los Estados Unidos, las jóvenes del Oberlin College dijeron a los jóvenes: "Ir, únanse al ejército", y los cien mil estudiantes fueron a la guerra, no quedó nadie. ¿Qué no podríamos lograr con estas fuentes prodigiosas de fuerza, sustentadas por el entusiasmo? Cuando los jóvenes ya no tendrán el sucio lucro para corromper en su propia fuente su ambición de moverse libremente hacia su ideal, sin el disgusto de tener que despreciarse a sí mismos y despreciar su trabajo, cuando el aplauso general los alentará a la devoción, ¿Cuál será la empresa audaz de la cual se reducirán? ¿Les pedimos que vayan al polo antártico? Ellos irán. ¿Explorar el mar en buques submarinos y trazar un mapa de las profundidades? Lo harán. ¿Para transformar el Sahara en un jardín? Eso será para ellos un trabajo de amor. ¿Para servir a su aprendizaje de viajes, exploración, encontrar estudio? El trabajo será absorbido por el placer. ¿Pasar los años entre la juventud y el matrimonio en la educación de los niños, en la cura de los enfermos? Tendremos millones de maestros y enfermeras que ocuparán noblemente el lugar de los miles de soldados que ahora trabajan diligentemente para abrir sus brazos con el propósito de matarse unos a otros. Tal es el ideal que proponemos a la juventud. Al señalarle un futuro de solidaridad y altruismo, les prometemos nuestra palabra de que en ese futuro todo rastro de pesimismo habrá desaparecido de sus mentes. "Dense a ustedes mismos". Pero "para darse a sí mismos, deben pertenecer a ustedes mismos". Nota: 1 Título Original:. The Ideal and Youth Publicado en. Liberty Press, Londres, 1895. Traducido por Piratea y Difunde. Texto en inglés recuperado de http://dwardmac.pitzer.edu/anarchist_archives/bright/reclus/idealandyouth.html Consultado el 11 de Agosto de 2018. Read more ... |
Posted: 10 Aug 2018 02:06 PM PDT
Cinco meses antes de la considerada primera protesta contra la globalización, la Contra Cumbre de Seattle de 1999, al sur, la ciudad de Eugene anunciaba la tormenta. La ciudad era un hervidero de actividad anarquista, desde la cual los movimientos sociales planeaban sus actividades y organización el asalto a la contracumbre. Ese Julio se desataron entonces los primeros choques con la policía.
El tiempo pasó, el panorama cambió, los compañeros se dispersaron. El Daily Emerald nos ofrece una breve resumen de la historia del movimiento libertario, su transformación y devenir, recordando alguno de los colectivos más representativos de la ciudad, muchos de los cuales ya no solo en activos desde entonces, sino que continúan siendo referentes mundiales. Tal vez podamos sacar algunas ideas de sus experiencias.
Salud! PHkl/tctca
_________________ Traducción tarcoteca - The evolution of Eugene’s anarchist movements - Emerald Media 30.7.2018 Nic Castillon vía anarchistnews.org Eugene 1999
Los manifestantes recorrían las calles del centro de Eugene, bloqueando el tráfico y resistiendose el arresto el 18 de junio de 1999. La protesta había surgido a partir de un evento internacional llamado "Carnival Against Capital" ese mismo día. La gente fue al banco más cercano y comenzó a reventarle las ventanas según cuenta John Zerzan http://johnzerzan.net/radio/, un renombrado filósofo anarquista afincado en Eugene . El activista Rob los Ricos, que estuvo presente en los disturbios, terminó pagando siete años en prisión por golpear a un policía en el hombro con una piedra.
"Nadie hubiera dicho lo que iba a pasar", dijo Zerzan acerca de los espontáneos disturbios. "Ningún anarquista lo había planeado, pero se le llamó el 'Alboroto Anarquista' en el titular a portada completa al día siguiente".
De los disturbios, dos fueron hospitalizados, más de 25 arrestados y más de un centenar con heridas leves de garganta y ojos causadas por gas lacrimógeno antidisturbios, según un artículo de "the Oregonian" publicado el día después. Fue en esta época en que la ciudad de Eugene comenzó a desarrollar una reputación nacional por sus movimientos anarquistas y su activismo. En 2000, el Chicago Tribune describió a la ciudad como "cuna de la última generación de manifestantes anarquistas". Esa reputación puede haber disminuido desde entonces, pero las pisadas de la comunidad anarquista de Eugene, que una vez fueron bulliciosos, siguen vivas hoy. En aquel momento, el entonces alcalde republicano, Jim Torrey, calificó a Eugene como la "Capital anarquista de los Estados Unidos". Consideró que las protestas tenían un impacto definitivamente negativo en la ciudad. "Tuvimos una buena dosis de anarquismo sucediendo en Eugene en ese momento", dijo Torrey. Recuerdaba a los anarquistas "tirando piedras a las ventanas, bloqueando el tráfico y atacando coches". Inicialmente, estos sucesos estuvieron ligados a un movimiento antiglobalización más grande, pero en los años siguientes, Eugene comenzó a funcionar como un centro para una gama más amplia de actividades anarquistas. Se produjeron y distribuyeron varias publicaciones anarquistas pequeñas e independientes en el área y alrededores. Un boletín informativo titulado "Break the Chains" centrado en el apoyo a prisioneros políticos y en las críticas al sistema penitenciario. Otra publicación, "Conducta desordenada", publicaba noticias anarquistas generalistas, ensayos e información, junto con su lema, "¡A la mierda con lo civil, volvámonos desobedientes!" Radio Free Cascadia RFCEn el distrito de Whitaker, Zerzan transmitía un programa de radio desde la emisora de radio pirata Radio Free Cascadia RFC. "Fue algo muy diferente", hablando sobre el contenido de sus primeras transmisiones. Dado que nadie podía hacer llamadas a la radio pirata, Zerzan principalmente leía sus textos favoritos y resaltaba las noticias anarquistas.RFC finalmente fue asaltada y cerrada por la policía, pero Zerzan todavía mantiene su programa en Radio Anarchy de la emisora KWVA, en que transmite todos los martes a las 19h [hora del pacífico, UTC -8:00].Zerzan ahora se muestra como una de las voces más destacadas del anarco-primitivismo o anarquismo verde, una parte del pensamiento anarquista que se centra en el ecologismo y la desindustrialización. La filosofía critica tanto a la civilización como a la tecnología.
Algunas de estas ideas también ganaron la atención nacional en la década de 1990 después del arresto y condena de Ted Kaczynski, también conocido como Unabomber, que mató a tres personas e hirió a muchas más durante una campaña de atentados con bomba que se desarrollaron entre 1978 y 1995.
Antes de su arresto, Kaczynski había escrito "La sociedad industrial y su futuro", un ensayo que critica la tecnología y la industrialización como un perjuicio para la sociedad y la libertad humana. Zerzan cree que Unabomber y este ensayo tuvieron al menos cierta influencia sobre las posteriores protestas anarquistas en Eugene.
El propio Zerzan visitó a Kaczynski antes de su condena de 1998. "Pude ver que teníamos las mismas ideas", dijo Zerzan. Sin embargo, se puso énfasis en diferenciar sus métodos: "No es el mismo enfoque táctico; poner algo en el correo y que le pueda explotar a algún oficinista o cartero o lo que sea, eso no está bien".
Zerzan ha tenido su programa de radio en funcionamiento desde 2001, y ahora ya ha transmitido más de 800 episodios. También es editor de "Black and Green Review", una revista anarco-primitivista actualmente en su quinto número. El objetivo principal de la revista es "profundizar las críticas anarco-primitivistas y verdianarquistas a través de una discusión y debate abiertos". A pesar de la relevancia perdurable de Zerzan, sigue siendo uno de los pocos vestigios de la comunidad anarquista de Eugene, una vez bulliciosa y altamente visible. Admite que la escena anarquista en Eugene se ha ciertamente calmado. "Para [2006] todo había concluido", dijo. "Volvió la normal y silenciosa Eugene, y amo a Eugene, pero la escena anarquista ... todos se desperdigaron". El ex alcalde Torrey también da cuenta de este cambio, pero reconoce las formas en que todavía existe una cultura anarquista Eugene: "No esta cerca de ser lo prevalente que era en el pasado. Creo que ahora [las actividades anarquistas] son más actividades orientadas a la sociedad [en vez de a la confrontación]". Neighborhood Anarchist Collective NAC
Y eso ciertamente suena a verdad si tenemos en cuenta al Neighborhood Anarchist Collective [NAC, Colectivo Anarquista de Barrio], uno de los desarrollos más recientes de la comunidad anarquista de Eugene.
De acuerdo con los principios de NAC, el colectivo basa su actividad en una visión del anarquismo social que enfatiza las ideas de ayuda mutua, autonomía y apoyo comunitario. "El problema de nuestro sistema actual es que la democracia no es real", dijo Serra Joy, quien ayudó a fundar NAC el año pasado. "Si todos realmente tuvieramos voz y realmente participaramos en ese sistema, entonces tendríamos una democracia directa. Eso es anarquismo en el sentido en que yo lo veo: anarquismo social". Joy no siempre se identificó como anarquista. De hecho, recientemente se involucró con ella después de una serie de eventos que la hicieron perder la fe en el sistema político actual del país. "Bernie [Sanders] vino como se fue", dijo Joy. "Antes de eso, podía decirme a mí mismo que tan solo necesitamos a la persona adecuada, que solo necesitamos suficientes personas, pero incluso teniendo la persona adecuada, las personas adecuadas y el grupo adecuado, no funcionó". Para Joy, el énfasis que el anarquismo social otorga a la comunidad es lo que le da esperanza para mantenerse fuera de un sistema político arduo. "Si no se puedes influir en la democracia, si no se puedes votar a favor de un cambio a gran escala, entonces tenemos que buscar más localmente", dijo. "Desde que hice eso, me siento más empoderada". Parte de los objetivos de NAC es reconectarse con la fuerte cultura anarquista del pasado de Eugene. "Éramos conscientes de éste y sentimos que queremos ayudar a revivir esa cultura", dijo Joy. "Queremos ayudar a las personas a empoderarse, a que vean el poder que tienen dentro de si mismxs y su grupo de amigxs". La Feria Colaborativa
Una forma en que NAC intenta alcanzar ese objetivo es a través de un evento mensual llamado Share Fair [Feria Colaborativa]. "Generalmente reunimos un montón de recursos y apoyos de las organizaciones y creamos espacios para que las personas vengan y reciban esos recursos, y encuentren la conexión con la comunidad", dijo Joy. El evento pone a disposición de la comunidad cosas tales como atención médica, cortes de cabello, apoyo emocional, comida y ropa, todo de forma gratuita.
Por la Feria Colaborativa han pasado más de 100 personas en cada evento en el transcurso de sus seis meses de existencia. "Es muy divertido y siento que ese es el mejor proyecto que surgió del Neighborhood Anarchist Collective", dijo Joy. Además de la Feria Colaborativa, NAC organiza eventos educativas tales como proyecciones de películas y clubes de lectura radical, así como eventos de redacción de cartas de apoyo a los presos políticos. Tanto para Joy como para Zerzan, estas ideas anarquistas todavía son muy relevantes y necesarias para recuperar el sentido de comunidad. "La comunidad [tradicional] se ha ido", dijo Zerzan. "Ha sido engullida por la sociedad de masas, por lo que todo el mundo lo quiere ... pero no, no lo pillan". Por esta razón, Zerzan llega a decir que es probable que la sociedad vea otra alzamiento [anarquista]. Sea o no cierto, está claro que el pensamiento anarquista todavía tiene su lugar dentro de Eugene. "Es sorprendente cuánta gente está realmente interesada en los valores básicos y fundamentales de la teoría anarquista en la que nos movemos", dijo Joy. "Mis esperanzas con el anarquismo en general es que ayuden a las personas a encontrar esa comunidad que tan desesperadamente necesitamos ". Read more ... |
No hay comentarios:
Publicar un comentario