Boletín diario del Portal Libertario OACA |
- La opinión sobre la Revolución mexicana (1911-1917) en la prensa anarquista española
- El individuo de la sociedad de consumo
- No más muertes en prisión. Respeto a los derechos de las personas presas
- Ruta contrahistórica I: De la dulce perla a Karabanchel
- Ya disponible el numero 3 del periódico anarquista "Aquí y ahora"
Posted: 25 Oct 2018 11:17 AM PDT
Resumen
El artículo estudia el parecer de los anarquistas y anarcosindicalistas del Estado español sobre la Revolución mexicana, a través de los periódicos consultados. Los ácratas del Estado español veían, a través de la prensa estudiada, a los magonistas primero, y a los zapatistas después, como los únicos capaces de redimir mediante la revolución social a los trabajadores mexicanos. Pero sus opiniones no fueron monolíticas: hubo quienes pensaron que el indígena era incapaz de llevar a cabo la tan deseada revolución social. Pero otros libertarios españoles sí aprobaron la lucha del campesinado indígena (y mestizo), porque valoraron su comunismo primitivo. Por lo tanto, no todos los libertarios del Estado español enjuiciaron de igual manera la Revolución que se inició en México a finales de 1910 Descargar Artículo [PDF]
Joaquín Beltrán Dengra
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Posted: 25 Oct 2018 11:08 AM PDT
Para mí, el desprecio o indiferencia que el individuo de la sociedad de consumo siente por los valores espirituales es la causa principal del callejón sin salida en que se encuentra el mundo en todos los aspectos esenciales, incluída la problemática económico-financiera que hoy tanto alarma y preocupa al hombre. Epicteto señalaba con plena razón que “ocuparse continuamente del cuerpo constituye un signo de probreza espiritual”. Sin saberlo, el gran estoico estaba exponiendo no solo una tesis de vigencia general, sino anticipando también lo que constituiría uno de los rasgos centrales de la sociedad de consumo del siglo XX, y de principios del XXI, a saber, el culto fetichista que el individuo medio rinde a los ejercicios físicos, al body bulding, a la cirujía estética y a la fittness somática en general y su desinterés por la cultura del alma a la que la Antigüedad clásica adjudicaba tanta importancia. Pero también el entusiasmo desorbitado que despiertan los profesionales del deporte denota el papel preeminente que el mundo del músculo desempeña en la sociedad saturada de hoy. Los nuevos ídolos y héroes de la sociedad no son, como en otros tiempos, quienes hacen algo útil o sublime por la humanidad, sino los que más eficacia demuestran a la hora de batir récords, ganar competiciones y acumular medallas y trofeos, sea brillando en los campos de fútbol, ganando carreras de coches o corriendo por las pistas de atletismo. Es como en la vieja Roma del panem et circenses, con la única diferencia de que los gladiadores de entonces son hoy los futbolistas, atletas y demás héroes deportivos al uso. Léon Bloy supo captar hace ya un siglo lo que el culto al deporte significaba: “Creo firmemente que el deporte es el medio más seguro de producir una generación de tarados y cretinos nefastos”. La gratificación infantilista a los bíceps y la destreza física va unida, por añadidura y por desgracia, a la exaltación de la juventud y el desprecio a las personas mayores, versión burguesa del culto irracional que el fascismo rendía a la fuerza biológica. Lo que Anais Nin consignaba a principios de la década del 40 sobre Norteamérica ha pasado a convertirse en un fenómeno planetario: “América es un país que no ama más que a la juventud y a la inmadurez”.
Es evidente que una civilización que concede tanta importancia a los bienes físicos y materiales es escasamente apta para comprender lo que significa la cultura espiritual y está destinada, por ello, a engendrar un tipo de individuo inclinado a confundir el sentido de la vida con los eslógans y lugares comunes difundidos por los administradores del poder, los grupos de presión, los profesionales de la publicidad, el marketing y las relaciones públicas y los medios de comunicación de masas. Eso explica que la existencia del individuo medio sea hoy un producto de lo que Vance Pacard llamaba hidden persuaders y Jean Braudillard “la tiranía total de la moda”. No deja de ser paradójico que el mismo individuo que tan ufano de su libertad y de su capacidad para afirmar su ego frente a los demás se deje arrebatar tan fácilmente su soberanía propia y acepte ser degradado a mero pelele de la ideología de mercado hoy dominante, una ideología cuya finalidad consiste precisamente en hacer posible la instrumentalización total del ser humano. La cruzada antimetafísica surge con la pretensión de liberar al hombre de quimeras idealistas como el platonismo y sus sucesores, pero lo que realmente consigue es destotalizar al sujeto y reducirlo a una parte de su identidad. De ahí que la cosmovisión antimetafísica vaya unida a la dessubjetivización del hombre, o lo que es lo mismo, a su subordinación a un imperativo estructural superior a su autoconciencia y su voluntad. Ello significa en último término un empobrecimiento de su condición ontológica, un atentado contra su tendencia genética a la ensoñación y la trascendencia. Los antiguos dictados de la religión o la ética son sustituídos por los dictados del código semántico, la lógica formal, la filosofía analítica, los ejercicios hermenéuticos y la ciencia. De lo que en último término se trata es de que el hombre deje de pensar libremente y quede sometido a la camisa de fuerza de lo que el pensamiento antimetafísico en sus diversas acepciones declara como verdad única. Creer en Dios, en determinados valores eternos o en la autonomía personal constituye un anacronismo incompatible con los resultados infalibles de las ciencias naturales y exactas, la teoría del lenguaje, el estructuralismo, el psicoanálisis o la realidad biológica. No puede sorprender, por ello, que en una de sus cartas a Horkheimer, Adorno definiera el neopositivismo como “la prohibición de pensar” y como una “fetichización de los métodos científicos”. Lo que la verdad significa pasa, pues, a ser un monopolio de los expertos y especialistas. Quien no tenga acceso a estos conocimientos “superiores” está condenado a vivir en plena ignorancia y sin saber lo que es su verdadera condición. Éste es, en efecto, el corolario que hay que extraer del elitismo epistémico de la nueva intelligentsia. Atreverse a buscar el sentido de la vida propia y de la humanidad en general por otros conductos como el amor al bien, el altruísmo social o la fe religiosa constituye una empresa carente de todo sentido. De ahí que la tarea central de las corrientes del pensamiento antihumanista y postmodernista haya constituído en “destruir” (Heidegger) o “deconstruir” (Derrida) toda la herencia espiritual y ética de la humanidad y sustituirla por una visión de hombre y del mundo basada en sucedáneos de tipo cientificista y tecnocéntrico. Consituye consciente o inconscientemente una invocación al conformismo y a la negación de “la nostalgia de lo completamente distinto” postulada por Max Horkheimer como reacción coherente frente al dominio de la razón instrumental y del irracionalismo del aquí y el ahora. El mito más extendido de la hora actual es la fetichización del éxito como nueva versión del summum bonum, un fenómeno lógico en un modelo de civilización dominado por el culto burgués a la competencia, a la guerra hobbesiana de todos contra todos, al individualismo posesivo y al afán de botín. En su acepción más vulgar y corriente, el mito hoy predominante significa la posesión y uso de los productos y cachivaches técnicos fabricados y renovados constantemente por los consorcios industriales. La fiebre consumista se ha apoderado totalmente de la vida cotidiana y expulsado de ella modos de ser y de pensar procedentes de épocas menos materialistas que la nuestra, entre ellos la praxis religiosa o la lucha por la utopía social o política, actitudes sustituídas hoy por el más ramplón de los hedonismos. Se trata, pues, de un modelo de autorrealización carente de toda trascendencia cualitativa, y, por tanto, prisionero de la propia inmanencia de la facticidad reinante aquí y ahora.
Heleno Saña
Extraído de: Heleno Saña. “El camino del bien. Respuesta a un mundo deshumanizado”. Fundación Salvador Seguí Ediciones (CGT), Madrid 2013.
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Posted: 25 Oct 2018 11:01 AM PDT
Somos familiares de personas que están presas y también de personas que murieron en la prisión. Somos entidades, colectivos y personas que trabajamos por los derechos de las personas presas y que exigimos que se respeten sus derechos y su dignidad. Hemos decidido reunir nuestras voces para romper el silencio y la opacidad que rodea la situación existente en las prisiones.
Las muertes en prisión son un problema insostenible. Exigimos a las autoridades que dejen de mirar hacia otro lado. Raquel, Eduardo, Claudia, Lewis, lGina y muchos más sobre las cuales no conocemos su historia. Muertes de personas bajo custodia del Estado que se aceptan y normalizan por quien dirigen las prisiones. El año 2017 murieron 41 personas en las prisiones de Cataluña. Según las estadísticas de la Generalitat, 8 personas murieron por suicidio, en 9 casos se señala una causa “desconocida”, 5 murieron por sobredosis y 19 por enfermedades. Los “suicidios” en la prisión, en muchas ocasiones, se producen cuando las personas se encuentran en régimen de aislamiento. El aislamiento en la prisión impone un régimen de vida a las personas que consiste en el encierro en soledad durante la mayor parte del día, entre 18 y 22 horas. Hay personas que están días, meses e incluso años, a pesar de que las normas internacionales para el tratamiento de las personas recluidas, conocidas como las “Reglas Nelson Mandela”, que establecen que el tiempo máximo de reclusión en aislamiento tiene que ser de quince días. El aislamiento penitenciario genera un daño físico y psicológico enorme e irreparable. Así mismo, hay muertes por sobredosis que no se tendrían que producir y personas con enfermedades mentales recluidas en departamentos de aislamiento que acaban para hundirlas definitivamente. Respecto a las muertes por enfermedad, hay que destacar que en la actualidad hay personas enfermas que no tendrían que estar en la cárcel, puesto que existe la posibilidad que se les conceda la libertad condicional por motivo de su enfermedad. Sin embargo, son muchísimos los casos que conocemos de personas con enfermedades terminales que no son liberadas y que finalmente mueren en la prisión o que obtienen un tercer grado in extremis para salir a morir fuera de la prisión, pero que vieron como su enfermedad las acabó consumiendo. Exigimos que se revise el régimen de visitas y las condiciones en prisión de las personas que sufren enfermedades. Todo esto demuestra que no se protege de manera adecuada la vida y la integridad física y psíquica de las personas encarceladas. Denunciamos que en la cárcel se producen situaciones de violencia institucional hacia las personas presas: se las maltrata, denigra y veja diariamente. Estas vulneraciones de derechos y estos abusos de poder no se están investigando de manera adecuada, y esto genera una terrible indefensión por quien las sufren en primera persona y también para sus familias. También denunciamos que están teniendo lugar discriminaciones hacia las personas migrantes y/o racializadas: el conjunto de discriminaciones que opera a la sociedad se intensifica dentro de la institución carcelaria. Todo esto demuestra que no se protege de manera adecuada la vida y la integridad física y psíquica de las personas encarceladas. Las familias denunciamos que el trato cotidiano por parte de los funcionarios de la prisión hacia los familiares y hacia las personas presas es denigrante. Además, hay una gran indefensión jurídica debido a que el sistema público de defensa no funciona de manera ágil y efectiva. Las familias sufrimos una gran desinformación y esto nos desconcierta, a la vez que hace aumentar nuestro dolor y nuestra angustia. Hacemos un llamamiento a emprender una lucha colectiva. A generar una red dentro y fuera de las prisiones, acompañando iniciativas como la huelga de hambre que numerosos presos y presas iniciaron el pasado 1 de octubre. Queremos romper el silencio en torno a la prisión y poder impulsar una lucha que nos traiga a defender los derechos de las personas presas y sus familiares, así como cuestionar un sistema penitenciario obsoleto, que hiere profundamente a las personas que pasan por este sistema y que genera un gran daño social.
Familias Frente a Crueldad Carcelaria
Fuente: http://tokata.info/
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Posted: 25 Oct 2018 10:28 AM PDT
Sábado 27 de Octubre, a las 11.30h.
Salida desde el Local Anarquista Motín (C/ Matilde Hernández, 47) A las 15.00h comida en el local RUTA CONTRAHISTÓRICA I: "De la dulce perla a Karabanchel". Un recorrido a través de la memoria de los Carabancheles y su historia rebelde y suburbial. Este es el primer recorrido de lo que será una serie de rutas contrahistóricas por los barrios de Carabanchel y Aluche. No os lo podéis perder. “Llegamos sin ocurrencia notable a Carabanchel... Echamos pie a tierra en una calle de cuyo nombre no quiero acordarme... Por de pronto, nos examinaron bien, rieron de nuestros sombreros y casquetes: franquearon su puerta a una caterva de muchachos en camisa que nos perseguían con el epíteto de “lechuguinos de Madrid” ... todos en general quejándose de que el día en Carabanchel tuviera cuarenta y ocho horas.” - Obras jocosas y satíricas de El Curioso Parlante - Mesonero Romanos. 1835. El nombre de Carabanchel será asociado desde mediados del siglo XX a chabolismo y marginalidad. Y sobre todo unido para siempre al sombrío recuerdo de los muros de la cárcel. Pero hubo un tiempo en el que el hoy barrio obrero se consideró un entorno excepcional, de aires y aguas excelentes, clima suave, vistas privilegiadas y situación inmejorable en las proximidades de la capital. Aristocracia, burguesía e incluso realeza disfrutaron de recreo y desenfreno en fincas y palacios construidos para esconder sus vergüenzas, mientras los Carabancheleros veían ajenos transformar su condición agrícola a industrial sin demasiada prisa. Cementerios, reformatorios, manicomios, prisiones, cuarteles e iglesias conformaron una mitad de su historia. La otra campesinos y obreros enfrentados a los excesos de la vecina Corte, organizando milicias y trincheras para defender sus casas una a una ante el avance del fascismo que convirtió sus calles en línea de frente. La de movimientos vecinales, de mujeres, de jóvenes que reclamaron a gritos una vida mejor. De tempranas ocupaciones, primero, y okupaciones después que nunca han dejado de estar presentes en el ahora barrio madrileño. Para recordarlo, muy particularmente esa memoria rebelde, os invitamos a una ruta alrededor de algunos de aquellos lugares del barrio capaces de revelar secretos si se les sabe cómo mirar. Una ruta contra histórica en la que no faltarán recuerdos de represión tras los muros de infaustos edificios aún presentes, algunos, o de otros ya desaparecidos, relatos de la disidencia y la resistencia, la quema de iglesias, las milicias, las trincheras, las luchas sociales, las okupas, los punks y mucho más. Una mirada a un Karabanchel orgulloso de reescribir su historia, su presente y su futuro con esa “K”, marginal e invisible como ninguna otra letra, utilizada para representar el espíritu iconoclasta de quienes la reivindican. Read more ... |
Posted: 25 Oct 2018 10:20 AM PDT
Seguimos apostando por el debate y la “contrainformación” como herramientas para generar personas y sociedades más fuertes, más rebeldes y más críticas.
Esperamos que cumpla con la función esperada y que alcance los rincones más insospechados del barrio, los vagones de metro repletos de zombies yendo a trabajar, los bancos en los parques de quienes pasan el rato disfrutando de la lectura y los locales que acogen este y otros muchos periódicos y revistas con el afán de difundir las ideas. Sumario: 1.- La psiquiatrización de la vida cotidiana 2.- Nacionalismo, patria y fronteras: cortina de humo en tiempos revueltos 3.- El auge del fascismo en Europa Anexo: Solidaridad Noticias breves / Convocatorias / Recomendaciones / Proyectos de la zona Descargar Periódico [PDF]Puntos de distribución fijos:- Local Anarquista Motín, C/ Matilde Hernández, 47 - Casa Auto-gestionada del Barrio de Aluche, C/ Quero, 37 - Ateneo Libertario de Carabanchel, 2ª planta del Centro Social Okupado “EKO”, C/ Ánade, 10 - Espacio Social Liberado Autogestionado EKO. C/ Ánade s/n Otros puntos de distribución: - En los metros de Aluche, Carabanchel, Carpetana, Oporto y Vista Alegre principalmente - En centros culturales, bibliotecas y demás espacios públicos Si quieres distribuir, sugerir, aportar o contactar: aquí_y_ahora@riseup.net Read more ... |
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