Asamblea Permanente por los Derechos Humanos La Plata
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JUICIO
CAMPS, RECTA FINAL
Fiscalía
alegó que lo que pasó lo hizo una empresa criminal conjunta
En la jornada del martes Schapiro y
Fernández cerraron con la descripción de los Centros Clandestinos y se
centraron en el caso de la masacre a la casa de calle 30, como así también
hablaron de los nietos recuperados en el marco de la causa. Hicieron pedido de
imputaciones. Seguirán el próximo martes desde las 8.
PRENSA
Y DIFUSIÓN
APDH
LA PLATA
(14NOVIEMBRE2012)
Las jornadas se hacen cada vez más densas, por la cantidad de pruebas y
argumentos. A la Fiscalía no le alcanzó con
una semana para dar los alegatos contra 23 imputados por crímenes de lesa
humanidad. Por eso seguirá el próximo martes a la mañana.
Al
recorrido por el rol que cumplieron los diversos Centros Clandestinos –el
último en tratar fue Brigada de San Justo, donde existieron sesiones de
interrogatorios y torturas- le siguieron los casos de la masacre en la calle 30
entre 55 y 56 de la familia Mariani – Teruggi, los asesinatos en esa residencia
a militantes de la organización Montoneros y la desaparición de la beba Clara
Anahí Mariani.
A
su vez, María Isabel Chorobik de Mariani fue privada ilegalmente de su libertad
horas más tarde porque las fuerzas de seguridad no habían encontrado a Daniel
Mariani, uno de sus hijos, al que asesinaron en agosto de 1977. De ese tema
también se refirió la Fiscalía comandada por Schapiro y Fernández, los
cuales continuaron con los casos de sustracción, apropiación y ocultamiento de
menores, antes de finalizar parcialmente la jornada con el pedido de castigo a
los 23 imputados del juicio.
“El
período de dictadura cívico militar fue realizado por una organización criminal
pre ordenada desde el Estado y desde la
suborganización criminal montada desde la Policía de Buenos Aires. Por eso
apelamos a la teoría del dominio del hecho, como así también a la autoría
mediata a través de aparatos organizados de poder. No dejaremos de lado los
conceptos de coautoría, participación necesaria de homicidios y participación
secundaria”, aclaró en primer momento Schapiro.
Caso Clara Anahí Mariani
Los distintos testimonios y pruebas a lo largo del juicio dieron cuenta
que la beba de tres meses Clara Anahí Mariani fue sacada con vida en manos de
las fuerzas de seguridad que llevaron a cabo la masacre. “En gran medida, la
cantidad de elementos de prueba son el resultado de la tarea que realiza la
señora de Mariani”, destacó la Fiscalía, quién recordó luego las entrevistas
que tuvo “Chicha” con policías, curas y particulares que le confirmaban que la
beba salió con vida pero le advertían que no busque más “porque está en buenas
manos”, según le expresó el sacerdote Monte a fines de 1976.
Varios
testigos del barrio también vieron como a la beba se la llevaron en una manta
azul y la dejaron en un automóvil policial. Según los aportes era el policía
Carlos García.
También
habló en el juicio la ex esposa del imputado Guallama, quién le dijo que la
beba había salido con vida, y que él le disparó por la espalda a Diana
Teruggi. Juan Carlos Elso, testigo
directo de los hechos, hacía el servicio militar en 1976. Vio como se llevaron
con vida a la beba. “Me quedé en la vereda apostado, gente de civil entraba y
salía. Me adentré en la casa. En una de las incursiones vi un cuerpo tirado.
Una persona con pelo largo, barba de dos semanas de civil, llevaba una beba, la
llevaron a una camioneta azul. Había un chofer y subió otra persona. A la beba
la pusieron en el asiento. Ahí me di cuenta lo que había visto. Bazán me dijo
que estaba vivo”, había dicho Elso en teleconferencia desde Bolivia.
Schapiro
recordó que la Comisión Internacional por los Derechos Humanos había expresado en
el año 1978: “se desprende que la niña Clara Anahí fue sustraída por fuerzas
militares. Se desconoce su paradero. Exigimos la aparición al gobierno
argentino”. La Fiscalía mantuvo esa línea.
Chicha
Mariani había dicho al respecto: “La tortura que se sometió a nuestros
familiares solo nosotros la sabemos. ¿Y la tortura psicológica? Levantarse
todos los días con la esperanza. ¿Qué tortura me hizo durante 35 años, día por
día, noche por noche?”
A
su vez, ella también fue privada de la libertad el 10 de diciembre de 1976 cuando
ingresó un grupo armado a su casa, en el marco de la búsqueda de Daniel Mariani
–no estaba en la casa de calle 30 en el momento del ataque-, asesinado en
agosto de 1977. Chicha reconoció entre la patota a Luis Patti, a Almirón y el
ex oficial Santiago Antonini, imputado en este juicio.
Caso de ataque a casa de calle 30
“Se
ha podido acreditar que el 24 de noviembre de 1976 a las 13.30 la casa fue
atacada por fuerzas armadas y de seguridad con un impresionante despliegue”,
dijo Schapiro.
No
solo se llevaron a Clara Anahí sino que asesinaron a Diana E.
Teruggi, Roberto Porfidio, Daniel Mendiburu Eliçabe, Juan Carlos Peiris y
Alberto Oscar Bossio.
El
ex Gobernador Saint Jane y autoridades de la Policía, según artículos de diario
La Prensa, estuvieron presentes: “El Gobernador
y autoridades visitaron dos de las casas de subversivos que fueron allanadas y
atacadas”, expresaba el medio en 1976.
Daniel
Mariani fue perseguido luego del ataque. El Batallón de Inteligencia 601 le
solicitó a servicios de Inteligencia que siga a Daniel: lo mataron el 1 de
agosto de 1977. “El no se quiso ir porque sabía que estaba viva la nena” dijo
Chicha en el juicio.
Cozzani
y Etchecolatz, dos de los imputados, también estuvieron presentes. Intentaron
justificar que Clara Anahí no salió con vida del operativo. “Las afirmaciones
reproducen confusión”, argutó la Fiscalía sobre las expresiones de ambos en el
juicio.
Nietos apropiados y recuperados
La
Fiscalía hizo eje en los distintos casos de bebes apropiados y ocultados por
los represores, a saber:
- José sabino Adbada. Nació
el 16 de marzo de 1977 en Comisaría Quinta. Identidad alterada hasta que en
1998 fue restituido a su familia.
En
1993 se enteró de su identidad. Conoció su familia biológica. “No fue nada
sencillo pero hoy es excelente relación. El dolor fue más fuerte que un
pinchazo”, expresó en el juicio.
- Ana Baratti de La Cuadra. Nació el 16 de junio de 1977 en Comisaría Quinta
según los archivos del libro Nunca Más
y Abuelas de Plaza de Mayo. Retenida, ocultada. Su identidad es incierta. El
represor Von Wernich dijo a testigos que la beba “tenía que pagar la culpa de
sus padres y no podía ir a manos terroristas”.
- Carlos Fosatti. Nació el 12 de marzo de 1977 en la Comisaría Quinta.
Su mamá Ines Ortega estuvo doce horas tabicada y atada de pies y manos en el piso antes de dar a luz. En 1995 se enteró Carlos quieren eran
sus padres biológicos. Su hijo tenía ocho años, así que a los dos le tocó
enfrentar ese camino. “La restitución de identidad es un punto de partida.
Quiero saber de mis padres. Sufrimos cuatro generaciones de forma directa”,
indicó en el juicio.
- María Eugenia Gatica Caracoche. A los 13 meses, fue secuestrada el 16 de marzo de
1977 en el domicilio de Susana Faravela Abdala. Apropiada por el policía Ruben Oscar Silva. Su paso por Comisaría
Quinta fue acreditado por los relatos de varias víctimas, como Adriana Calvo.
“Fui secuestrada junto a Joaquín Abdala. Desaparecida muchos años. A los ocho
años me sacaron sangre, no volví a la escuela, iba de un lado para otro. El
examen dio positivo, tenía la sangre de mi mamá, mi papá y mis hermanos. Estaba
anotada con otro nombre, otra fecha de nacimiento”, expresó la víctima. En el reencuentro con su familia, la
madre Ana María Caracoche destacó el esfuerzo de la familia y Abuelas de Plaza
de Mayo. “Hicimos todas las denuncias posibles”. En 1985 hicimos primera
extracción. El apropiador se la lleva, “fue la segunda desaparición”, expresó
su madre.
- María Mercedes Molina. Nació en cautiverio en Brigada de Investigaciones el
3 de abril de 1977. Estuvo hasta fines de septiembre de 1977 según dijo su tío
Carlos Galarza. Más tarde fue entregada a sus abuelos. Su madre estaba en el
mismo lugar en cautiverio. “Madre e hija reducidas a objeto, no ejercían sus
derecho como seres humanos” dijo el Fiscal Fernández. María fue restituída.
- Pedro Luis Nadal García. El médico represor Jorge Antonio Bergés hizo
certificado de nacimiento falso.
Luis Alberto Ferián fue el nombre que le pusieron los apropiadores. Pedro es
hijo de Jorge Nadal y Magdalena García. Casa en Isidro Casanova. El Periodista
José Moya encontró notas que hacían alusión a Luis Ferián, apropiador, como un
oficial de mayor rango o Brigada fantasma, la cual aparecía como un grupo
operativo de Brigada de Quilmes. “Resulta
evidente la vinculación de Ferián, el secuestro y la apropiación”, dijo
Schapiro. Pedro fue restituído de
adulto.
Autoría y Responsabilidad en los
hechos.
Los
Fiscales decidieron encuadrar los hechos en su dimensión histórica. “La
intervención de los imputados se produjo en el marco de un aparato de poder a
cargo del estado, en un contexto criminal, constituido por la jefatura de la
Policía, como un eslabón de los militares”, expresaron.
El
criterio de esta Fiscalía, a los fines de esta imputación es la de “dominio
final del hecho”, que entre sus categorías comprende autoría mediata por medio
de la voluntad a través de un aparato de poder.
“En
el contexto represivo ilegal orquestado por las altas esferas del estado, me
llevan a sostener que el modelo de maquinarias es el esquema dogmático que
mejor se ajusta a la causa”, sentenció Schapiro, quién luego complementó: “Fueron
crímenes de masa por una cadena de acción. Intervinieron muchas personas”
El juicio continúa el martes desde las
ocho de la mañana, los alegatos de la Fiscalía continúan. Luego será el turno
de las querellas.
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