Villa El Tropezón: 13 casos de dengue confirmados
Vecinos
denuncian emergencia sanitaria por causa de la construcción del Nudo
Vial, y temen que la inacción del Gobierno Provincial los obligue a
abandonar la Villa.
Por Esteban Morales | @EMoralesLR
En diferentes entrevistas realizadas
entre los meses de febrero y marzo, tanto vecinxs como trabajadoras de
salud de la zona, describieron la situación que vive actualmente Villa
El Tropezón, luego de finalizada la obra del Nudo Vial más grande de la
Provincia. Hoy la Villa se encuentra entre escombros y desniveles de
terrenos -que generan graves problemas en días de lluvia-, falta de
desagües, e incertidumbre por su futuro; problemáticas a las cuales se
le sumó el reciente brote de dengue, que ya registra 13 casos
confirmados.
Mariana es trabajadora social, y junto a
una psicóloga y una nutricionista realizan diferentes actividades en El
Tropezón a través de un proyecto de Responsabilidad Social Empresarial
de Autocity. Durante el año pasado conformaron una Red
Interdisciplinaria de Salud junto al Centro de Salud 77 de Barrio Don
Bosco, la Parroquia de Don Bosco y un equipo becado por el Colegio de
Psicólogos. En una entrevista realizada la semana pasada, nos describió
la preocupante situación que se está viviendo.
Con respecto a las actividades de la Red
de Salud, Mariana explica que “venimos trabajando articuladamente desde
hace algún tiempo, pero puntualmente ahora, lo que nos ha motivado es
el conocimiento de varios casos de dengue en la zona: vecinos con los
que trabajamos cotidianamente y otros casos más. Así que bueno, nos
pusimos las pilas para trabajar juntos”.
Entre las principales problemáticas que
destaca Mariana -y que en reiteradas ocasiones han manifestado los
vecinos en estos últimos años-, se encuentra la gran cantidad de basura
acumulada, principalmente en el Canal Maestro Sur, hoy fuera de
funcionamiento: “el Canal es un lugar (…) donde se generan focos de
infección. Además, como la Villa no cuenta con la recolección de basura,
es un lugar de depósito de basura (…). Sabemos que concretamente no es
más grave el caso del dengue porque el agua está estancada, y el dengue
(…) está en lugares donde el agua está limpia, y ahí deposita sus
huevos”. Sin embargo, destaca que “en la Villa hay mucha basura, pero
eso se ha potenciado a raíz de las casitas que se han ido desarmando con
los traslados de los vecinos, y han quedado muchos escombros,
recipientes que pueden acumular agua, y demás”.
El 28 de diciembre, a dos semanas de
inaugurado, el Nudo Vial El Tropezón se cobró su primera víctima. Ante
la ausencia de pasarelas peatonales, un hombre de edad avanzada murió
atropellado al intentar cruzar la Avenida Cárcano, en esta enorme
sistematización que fue pensada sólo para el tránsito vehicular. Lxs
vecinxs denuncian que por la forma en que fue diagramado el Nudo, hoy
les resulta casi imposible acceder al Dispensario o a la Parroquia.
Luego del fallecimiento del hombre, el Gobierno Provincial anunció la
construcción de dos puentes peatonales, los cuales aún no están en
obras, y que se ubicarían en barrios aledaños.
A ese problema se le suman las
consecuencias inmediatas de las intensas lluvias registradas los días 7 y
15 de febrero, teniendo como nueva vecina a una gigante mole de cemento
frente a sus casas de construcción precaria. Una vecina que vive en la
Villa hace 25 años nos comenta que “la consecuencia, primero, es el mal
estado que nos dejó el Nudo Vial. Tanta lluvia complica la situación de
los vecinos, las viviendas, las estructuras, los techos. En general, los
pozos, los callejones, el Canal Maestro, el dengue… Todo. La lluvia nos
trae un montón de consecuencias a nosotros. Ahora aparecieron niños
enfermos, problemas respiratorios, pleno verano, porque todavía estamos
en verano”.
En simultáneo a la finalización de la
obra del Nudo, al lado de la Villa se construyeron 78 casas para
trasladar a vecinos inmediatamente afectados por la obra vial. Otras 50
familias están en proceso de traslado al Barrio Héroes de Malvinas
-conocido como Vicor-, en cercanías de la planta Santa Isabel de
Renault. Pero la gran mayoría de vecinxs -el número estimado es de 180
familias- aún sigue residiendo en la Villa, y denuncian que las propias
obras del nuevo barrio precarizaron aún más su situación.
En ese sentido, una integrante de la
Comisión de Vecinos del Tropezón relata que a partir de la construcción
del nuevo barrio, la Villa “quedó en un pozo. Porque hicieron las
viviendas nuevas, las 78 viviendas que hicieron. Bueno, después de haber
cavado tanto y subir tanto la tierra (…), todas esas viviendas han
quedado como en un pozo. Entonces, por eso la inundación que tiene cada
vivienda. El Canal no tiene salida de agua, por eso se estanca y ahí
empieza a ser todo… el dengue (…). Tiene que haber una desgracia para
que empiecen a reaccionar”.
En la misma conversación, otra vecina
describe lo que significa el Nudo Vial para ellxs: “acá, sí, el Nudo
Vial fue satisfactorio para toda la gente de afuera, para la gente que
viene de los countries, para la gente que tiene auto, que tiene
movilidad, que lo tiene que ocupar. Pero en realidad, a la gente del
Tropezón, al barrio El Tropezón, le arruinó la vida. A la gente no sólo
de acá, sino a los barrios aledaños, también. Porque ahora, por culpa
del Nudo Vial, por culpa de las torres Gama, gente de barrio se inunda.
Que jamás se inundó antes. Nunca se inundaron. Esta gente se inunda, se
les han caído tapias. O sea que no es una problemática solamente del
barrio El Tropezón, porque es precario, o porque las viviendas no están
bien puestas. Es un problema a nivel Córdoba, ya”.
En este contexto, durante el mes de
enero varixs vecinxs comenzaron a tener síntomas similares a lo que en
la radio y la televisión se relacionaba con el dengue. Uno de ellos
decidió ir al Hospital Rawson, donde le realizaron estudios y le
diagnosticaron dengue, quedando internado con suero por algunos días. A
partir de ese primer caso confirmado creció el alerta y se comenzaron a
realizar estudios epidemiológicos en la Villa, incluida la toma de
muestras de sangre. Si bien la Provincia no está brindando datos
oficiales -ni siquiera a lxs trabajadorxs de salud de la zona-, los
propios certificados médicos con que cuentan los vecinos ya suman 13
casos, sin contar aquellos que han tenido síntomas similares pero que no
recibieron atención hospitalaria.
Mariana explica que “en principio,
manejábamos una cifra de 13 personas con diagnóstico. Después, del
Centro de Salud nos dijeron que eran un poco más. Por ese motivo, ayer
[jueves 3 de marzo] también vino el Ministro de Salud [NdeR: Secretario
de Salud de la Municipalidad], y estuvo recorriendo el barrio como para
ayudar un poco más en la zona”. Este número, que en opinión de las
trabajadoras es inferior al real, se dio en un radio de distancia muy
pequeño, “100 metros, un poquito más, pero más o menos esa es la
distancia”. La preocupación del equipo es mayor aún si se tiene en
cuenta que la proyección epidemiológica indica que la mayor cantidad de
casos de dengue se suele producir alrededor del mes de abril.
Ante esta situación, durante el mes de
febrero y los primeros días del mes de marzo, las trabajadoras de la Red
han brindado charlas sobre precauciones y cuidados para prevenir la
proliferación del mosquito Aedes Aegipty, charlas que continuarán
durante las próximas semanas; se gestionó la distribución de repelentes
entre vecinxs, realizada por el equipo y en colaboración con la
Municipalidad; en estos momentos la Comisión Vecinal de la Villa está
gestionando en el CPC Colón la instalación de contenedores para evitar
mayor acumulación de residuos, y el municipio contrató una pala mecánica
que limpió algunos sectores del Canal Maestro, quedando aún la mayoría
del mismo con gran acumulación de basura. Sigue pendiente una fumigación
completa de la Villa, y la limpieza tanto del Canal como de una gran
cantidad de escombros que quedó de las viviendas derrumbadas por el
personal contratado por el Ministerio de Desarrollo Social de la
Provincia.
Las gestiones ante la Municipalidad
fueron realizadas en su mayoría por vecinas de la Villa y el equipo de
salud. Mismas gestiones se realizaron en el Gobierno Provincial, pero
todos los entrevistados coincidieron con preocupación en que no ha
habido respuesta: “…[necesitamos] que la Provincia se haga cargo de la
fumigación, que venga y fumigue todo el sector, pero bien fumigado. No
que pase por la Avenida Don Bosco y nada más. No, que entre a los
pasillos, que le pida a la gente que salga de las viviendas, que abran
puertas, ventanas, y que explique cómo uno se tiene que cuidar”, explica
angustiada Carolina.
Frente a esta situación, no son pocos los vecinxs que especulan con que el Gobierno está dilatando las posibles soluciones, incluida la urbanización prometida desde 2013, para forzar a que abandonen sus viviendas. Doña Rosa, vecina del Tropezón hace más de 30 años, explica que “a mí me dijeron que nos van a urbanizar, la gente que se quiera quedar acá se va a quedar, y mucha gente también se va a Vicor. Ya tienen más o menos planificado todo eso (…). Momentáneamente tenemos que esperar, no hay otra cosa que podamos hacer. Esperar y vivir acá hasta que nos urbanicen. Nos hagan buenas obras, que sea un buen desagüe, que limpien el Canal, todo eso”. En el mismo sentido, una vecina residente hace ocho años en la Villa destacó que “hasta el momento, lo único que nos dicen que nos van a hacer la urbanización pero que no saben cuándo. Y que hasta el momento, nosotros tenemos que aguantar. Todas las familias que nos queramos quedar tenemos que aguantar hasta que ellos decidan hacer una urbanización. Que las lluvias o cualquier cosa que nos pase, tenemos que aguantarnos”.
Por el momento, en la Villa no avizoran
otra solución más que esperar, intentar paliar la situación con los
recursos con los que cuentan, y tratar de visibilizar lo que están
viviendo, otra tarea que parece complicarse cada vez más. Una de las
vecinas integrantes de la Comisión de Vecinos nos dice: “hoy, te digo la
verdad, los medios, que les hemos transmitido la situación del
Tropezón, no lo han sacado al aire. Hemos presentado en Canal 10 y Canal
12 certificados médicos, porque se lo mandé al Lagarto, y se lo mandé a
BdS a la mañana, los certificados médicos del chico del primer caso de
dengue que tenemos en El Tropezón, y no lo han sacado al aire”.
La frase final de la entrevista
transmite la sensación que se vive hoy en la Villa: “Ahora no querés ni
que llueva, no querés ni que llueva. No solamente por mí, sino por
todos. ¿A vos te parece que un barrio como Quebrada de las Rosas esté
pidiendo que no llueva más?”
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