Boletín diario del Portal Libertario OACA |
- [Cómic] Hidráulica Social
- Una mentira repetida mil veces se convierte en verdad -Más que una defensa de un prólogo incómodo
- [Charla 23/03] Valdemingómez: 20 años son suficientes. Por la salud colectiva, Cierre de la Incineradora
- Revolución o contrarrevolución en España - Artículo inédito de Benjamin Péret
- El imaginario revolucionario. Una aproximación a las propuestas de Eduardo Colombo
- Réquiem por las redes sociales
- La dictadura de lo políticamente correcto
- Nueva publicación anarquista desde Madrid: "Infamia"
- Socialdemocracia
- Presentación del libro "Del lado del pueblo: El periplo de los anarquistas venezolanos durante la rebelión popular de 2017"
- Intervención contra el uso de pieles
- [19M] Coloquio sobre Neocolonialismo y ONG en la UCM
- Eduardo Colombo 1929-2018. Un gran luchador anarquista nos deja
- Entrevista a Hex, herido de un disparo de una fascista en Seattle, el pasado 20 de enero de 2017, día de la investidura de Trump
- Emanciparnos de la emancipación
- Tercera España o España de tercera
- [18 de marzo] ¡Llamada a la solidaridad con lxs anarquistas rusas!
- Periódico Siglo XXI nº 32
- En memoria de Agustín Rueda
- [Documental] Ayotzinapa: La otra historia
- Inauguración de la exposición "Mujeres Libres (1936-1939), precursoras de un mundo nuevo"
- Sobre Feminismo y otras Políticas de Identidad
- [Libro] Sobre el anarquismo - Nicolas Walter
- [Vídeos] Brutal represión en Murcia al término de la manifestación del 8 de marzo
- Se busca milagro en Caltagirone
Posted: 20 Mar 2018 10:51 AM PDT
Título: "Hidráulica Social".
Una nueva historieta visual realizada por el compañero Alfonso "El Seta" de El Seta Producciones. Read more ... |
Posted: 20 Mar 2018 10:13 AM PDT
Poco a poco van saliendo a la luz más y más historias y perspectivas que van bajando del altar de la mitificación revolucionaria al EZLN. En esta ocasión B.A. nos presenta un escrito que sigue profundizando la critica anti-autoritaria al neo-zapatismo dandole hilo al escrito realizado por Gustavo Rodríguez titulado “La irradiación pornográfica del neo-zapatismo”.
“Libertad de pensamiento significa tener el derecho de decirle a la gente cosas que no quiere oír”
George Orwell
“Quien supo obedecer sabrá mandar”
Lema de la campaña electoral del expresidente Díaz Ordaz.
“Los sueños de la razón producen monstruos”
Aldous Huxley
He decidido escribir públicamente las siguientes líneas (tras algunos comentarios en diferentes foros anarquistas no públicos) sobre el Prólogo “La irradiación pornográfica del neozapatismo” de Gustavo Rodríguez, a la edición en castellano del libro Detrás de la máscara: más allá de los pasamontañas del sureste mexicano de Charles Reeve, Sylvie Deneuve y Marc Geoffroy, de la editora y distribuidora “Pensamiento Ilícito.”
La frase con que titulo este intento de intercambio reflexivo se le imputa al jefe de propaganda de Hitler, Joseph Goebbels, reconocido por la decisiva influencia de su estrategia mediática en el arribo del Führer al poder y, por el alcance de su propaganda en la consolidación del régimen nacional socialista y la identidad nazi. Tanto Goebbels como Lenin, insistían con empeño en el uso “adecuado” de la mentira más allá de los posicionamientos éticos y/o morales, con el objetivo de alcanzar una “finalidad superior”: influir determinantemente en la consciencia de las masas. Desde esa óptica, Goebbels lanzó cientos de slogans publicitarios que se convirtieron en “verdad” a partir de la repetición constante de una mentira, como por ejemplo, “Gobernemos gracias al amor y no gracias a la bayoneta”, cuando es por todos conocidos el terror y la violencia exacerbada que caracterizó al nazismo.
Guardando la sabia y debida distancia, habría que aceptar que algunos medios electrónicos (incluso “compañeros”) y uno que otro periódico de circulación nacional, han colaborado en la difusión de la propaganda neozapatista a través de slogans machacones qué repetidos “adecuadamente mil veces” se han convertido en “verdad” y transforman en enemigo público a todo aquél o aquella que cuestione lo irrefutable de antemano. Tal es el caso del “mandar obedeciendo” neozapatista. Ya ni hablar de “para todos todo, para nosotros nada” o, de aquél otro que reza: “luchamos por un mundo en el que quepan todos los mundos” y demás slogans construidos desde cierta poética pretendidamente indígena y lanzados al ruedo oportunamente por el sup Marcos, que se han convertido en verdaderos hitos contribuyendo en la desinformación y en la penetración ideológica del “movimiento”, transmutando automáticamente en “mentira” toda denuncia al autoritarismo neozapatista.
Sin faltarle el respeto a la inteligencia, de quienes han vertido comentarios en el sentido de descontextualizar el discurso intrínseco en el escrito en cuestión y que desvían la atención escapando por la tangente en vez de confrontar el fundamento principal del mismo. Vale aclarar un hecho a todas luces indiscutible: El texto, está narrado en primera persona a partir de la experiencia de primera mano de su autor durante aquellos años de la reestructuración neozapatista tras el fallido intento del EZ de la toma militar de las cabeceras municipales en Chiapas; momento en donde los indígenas que no se alinearon al zapatismo fueron “desplazados” de sus comunidades por la jerarquía rebelde siendo muchos cooptados, tras su expulsión, bajo las banderas partidistas del PRI, del PAN o, con el transcurrir de los años por el Verde Ecologista e incluso terminaron creando grupos paramilitares.
Lamentablemente, cada vez que se expresa sin cortapisa que el neozapatismo no es lo que parece, mostrando su verdadera esencia autoritaria y la realidad que enfrentan las llamadas “comunidades en rebeldía” (aún al interior de los círculos autodenominados “antiautoritarios”), se cae inapelablemente en el fundamentalismo milenarista y religioso que no admite cuestionamiento alguno y se apega con los ojos cerrados a un guión previamente redactado que se repite hasta la saciedad ajena. Y desde luego, como siempre pasa en estos casos, se ataca indiscriminadamente a las y los herejes que se atreven a cuestionar el dogma: “mentirosos”, “agentes del CISEN”, “agentes de la CIA”, “contrarrevolucionarios”, “traidores”, “oportunistas”, etc.
Sin embargo, como anarquistas, más allá de las filias y las fobias manifiestas en torno a esta organización ajena a nuestras ideas y nuestra práctica, deberíamos de plantearnos un sin fin de interrogantes que nos ayudarían a reflexionar retirando tanta telaraña milenarista que nos impide ver. Aquí, más bien, las preguntas podrían plantearse justamente en torno a quienes conforman las denominadas bases de apoyo zapatistas y cabría delinear como primeras interrogantes: ¿Por qué algunos grupos indígenas se sumaron al neozapatismo desde sus inicios y otros no quisieron sumarse? ¿Por qué hay muchos grupos indígenas chiapanecos que tampoco han querido incorporarse a dicha organización con el transcurrir del tiempo, incluso se han pasado al lado de entes del Sistema? ¿Por qué algunos continúan siendo parte de esta estructura y otros han desertado? ¿Cuáles son las razones por las que abandonan el neozapatismo?
Un segundo bloque de preguntas necesarias deberá centrarse en un contexto político ideológico que bien podría comenzar con estas tres interrogantes. ¿Por qué el discurso neozapatista es tan cambiante?; ¿Por qué si tomaron las armas contra el Estado en busca de la instauración de un régimen socialista al estilo cubano, cuándo fracasaron militarmente se subieron al barco “democrático” de las transformaciones y la “paz social con justicia y dignidad”, impulsando el frentismo mediante el fallido Frente Zapatista de Liberación Nacional, para otra vez volver a saltar, en esa ocasión a La Otra Campaña con un virulento discurso antielectoral, para ahora terminar participando en la farsa electorera a través de su candidata Mari Chuy en un intento de resurrección aprovechando la plataforma de las próximas elecciones?; ¿Todas las preguntas anteriores no hacen evidente el pragmatismo político de la jerarquía militar neozapatista, misma que no renuncia a la idea primigenia de la toma del poder pero ahora “por cualquier medio necesario”?
Desde luego, no pretendo contestar el cuestionario anterior en esta breve invitación al debate pero si quiero dejar planteadas estas preguntas para que las contestemos colectivamente y enfrentemos todo lo que acarrea responderlas reflexivamente desde los principios ácratas. De momento intentaré continuar con esta repuesta recontextualizando el texto publicado en algunos foros y que ha motivado este intercambio.
Me atrevo a afirmar, que el texto en cuestion, no fue escrito expresamente con la intención de irrumpir la tranquilidad de quienes se han sumado al llamado de la selva, moviéndoles el petate ideológico.
Desde los renglones iniciales de este “prólogo incomodo” se puede percibir que la crítica no está dirigida únicamente contra el discurso nacionalista liberal (evidenciado en sus primeras declaraciones y reconocidos en los insurgentes Independentistas, donde dejaban ver de manera manifiesta que en su agenda no estaban los pueblos indígenas, sino que, una vez más, estos fueron usados como carne de cañón) del EZLN; el verticalismo propio de su estructura militar y; algunos deslices discursivos que yo califico, quizá ingenuamente, como “resbalones” de claro signo socialdemócrata (como cada vez que hacen hincapié en “la falta de gobernabilidad”, en la “necesidad” de una nueva constitución, o su doble discurso ante las negociaciones con el Estado), sino que también tiene como destinatario al movimiento anarquista local e internacional; ése “movimiento” que se ha dejado seducir por estos discursos ajenos, diametralmente opuestos a lo que el compa Gustavo denomina el “andamiaje teórico-práctico” del anarquismo.
En ese sentido, no considero “agresivo”, señalar los puntos que evidencian esas desvirtuaciones del “movimiento” anarquista, como tampoco me parece “agresivo” que se denuncien las prácticas autoritarias y el verticalismo del EZLN desde la perspectiva ácrata ni que se narre la situación que enfrentan las comunidades indígenas bajo su control en un contexto conocido por el autor del texto. Sin embargo, lo que sí considero agresivo y, hasta un truco barato, es ese viejo recurso de echar mano de las descalificaciones para restarle credibilidad al exponente. Hacer alusión a supuestas posiciones de “derecha” de manera indirecta y, calificar de mentiroso a cualquiera que emita comentarios contrarios al discurso del EZ: eso si es agresivo.
Espero que el empleo de adjetivos calificativos no degenere después en la larga lista antes mencionada, que casi siempre se reduce al intangible “agente del imperio” emanado originalmente de los discursos populistas tan usados por las dictaduras socialistas (Cuba, Venezuela, por mencionar un par de casos en Latinoamérica) y repetidos hasta el cansancio por sus fanáticos adoradores. Recuerdo, cuando hace ya varios años organizamos una serie de presentaciones con el compa Nelson de El Libertario de Venezuela1 en la ciudad de México, como se nos acusó cínicamente a los promotores del evento de “agentes del imperialismo” o, como el diario prozapatista La Jornada acusó al compa Gustavo de ser “agente de la CIA” justificando su expulsión del país por la autoría del libro ¡Que se ilumine la noche!. Insisto: ojalá esa no sea su estrategia.
Quizá, se me podría acusar de “derechoso” si no tratara de expresar mis propias opiniones sobre el neozapatismo o, si no difundiera las reflexiones de otros compañeros anarquistas y me limitara a echar mano de lo vertido en los libros de Carlos Tello y Marco Saavedra, en este caso, libros que se convirtieron en bestsellers, gracias a la publicidad que le diera sin ese propósito el conocido propagandista del neozapatismo, Hermann Bellinghausen, cuando “censuró” dichos libros argumentando que le daban “sustento ideológico” a la contrainsurgencia porque en ellos se narraba la presencia de “censores ideológicos” supervisando lo que los indígenas en territorio zapatista pueden decir sobre la situación política y la organización o, sobre las comunidades Tojolabales que han desertado del EZLN. Pero tampoco estoy dispuesto a reproducir la apología de los libros de Adolfo Gilly y Carlos Montemayor, para ganar la aceptación y el reconocimiento “políticamente correcto” de mis palabras.
En realidad, resulta extremadamente endeble la acusación de “mentirosos” cuando ni siquiera hacen el menor esfuerzo por desmentir con aportaciones que realmente demuestren que lo que se expone en el prólogo de Gustavo no es cierto sino limitándose al empleo de adjetivos descalificativos y repitiendo (con puntos y comas) todo lo que la maquinaria de propaganda neozapatista, incluyendo La Jornada, se empeña en hacernos creer para poder llevar a término sus objetivos.
Ojo, no estoy casado con ninguna tergiversación ideológica, sino con la construcción teórico-práctica del anarquismo, por eso, nos abocamos a generar debate y reflexión dentro de nuestros círculos a partir de la práctica anárquica de nuestros días y, justo por eso, nos mantenemos alejados del campo de la confrontación personal tratando de poner en marcha el caminar “natural” (por decirlo de alguna manera) de la Anarquía, desarrollo que, precisamente, considero se vio interrumpido tras la irrupción en el escenario político del neozapatismo y su posterior adopción acrítica en nuestros círculos.
No cabe duda que la percepción de la realidad cada individuo la aprecia de manera diferente casi siempre en dependencia de la distorsión del lente a través del cual la observa; mi percepción sobre ciertos conceptos y/o “resbalones” del EZLN, me orillan a desconfiar de sus verdaderas intenciones pero, sobre todo, me conducen a preocuparme por la actual crisis teórico-práctica del anarquismo y por el futuro inmediato de ese “movimiento” que una vez más se ha dejado arrastrar en proyectos con agenda e intereses propios, ajenos a nuestra teoría y nuestra práctica.
Habría que comenzar por reflexionar sobre lo que se ha venido produciendo recientemente en nuestro entorno geográfico, como por ejemplo, el lamentable libro de Marcelo Sandoval, que concluye que la actualización del anarquismo va de la mano del neozapatismo o el texto de Guadalupe Rivera, quien desde la tardía influencia del feminismo socialdemócrata de Simone de Beauvoir, nos habla de la postura euromachocentrista de los anarquistas mexicanos tanto en los tiempos magonistas como en la actualidad, o las reiteradas reediciones de textos que nada aportan a la reconstrucción teórico-práctica del anarquismo en el siglo XXI; entre otros tantos textos que consideramos necesario debatir para poder avanzar no sólo teóricamente sino en el día a día de la vida y la lucha cotidiana.
Cabe destacar que en ningún momento he afirmado que sean tontos, ciegos o, que se empeñen en andar equivocados todos los involucrados en la solidaridad acrítica al EZLN. Eso dependerá de la honestidad de cada uno de los que la nutre. Sin embargo, es indiscutible que cada quien ve lo que quiere ver y en el momento en que quiere hacerlo. Muchas veces, el lente distorsionador de la ideología nos impide ver los árboles aunque estemos en el bosque. También el oportunismo condiciona la ceguera, así encontramos a muchos intelectuales becarios y laureados escribanos que prefieren no ver para seguir mamando o alguno que otro punk acostumbrado a talonear sus frijolitos a cambio de posar para la foto en medio del multiculturalismo caracolero.
Esta crítica en realidad, va dirigida al circuito anarquista en particular y a todo aquel o aquella que deseé leer el libro alejado de los mitos y los dogmas. El objetivo, a mi consideración muy particular, es llamar la atención “ante los continuos desvaríos del anarquismo contemporáneo” y mantener la mira crítica sobre el avance del neozapatismo bajo el carisma de Marcos y el liderazgo que hoy asume el CGI con su candidata MariChuy; es decir, “advirtiendo” y “alertando” (términos usados por el EZ en sus primeras declaraciones) a través del debate y la reflexión o, mejor aún, más que advertir o alertar, prefiero usar términos más antiautoritarios como “avisando” o “previniendo” a los anarquistas, de caminar con cuidado los pasos del neozapatismo, no con la prepotencia de los “iluminados”, como se han señalado en los comentarios que motivaron esta respuesta (otro recurso gastado) sino desde posiciones consecuentes con nuestras ideas y nuestra práctica, como por ejemplo, un oportuno “aviso”, de una compañera publicado en uno de los foros del circuito libertario, sobre las desviaciones del levantamiento kurdo dirigido a todos los compañeros anarquistas dispuestos “… a combatir en medio del desierto por una causa de la que aún no se sabe el fondo pero que es atractiva a simple vista, pues usa la libertad y la autonomía como estandarte…”. Ambos hechos se han nutrido de energías y fuerzas libertarias y comienzan a contar con la solidaridad acrítica del “movimiento” como bien señala el compa Gustavo en el prólogo en cuestión.
En este sentido, mi crítica no es desde una posición de comodidad, sino desde la preocupación genuina ante la inminente crisis teórico-práctica del anarquismo contemporáneo. Considero que todo es criticable y que todxs cometemos errores por lo que debemos de ser siempre sujetos de crítica. La crítica y, más aún si ésta es anárquica, es nuestra mejor aliada; no debemos de temerle sino fomentarla. La crítica teórica y la crítica práctica son nuestras mejores armas.
Como anarquista, no deseo contribuir al desarrollo de un movimiento mesiánico, tampoco estoy dispuesto a dejar que se le apoye en el nombre del anarquismo. No luchamos por nadie, no delegamos nuestra actuación a un vocero o vocera o representante, por eso enarbolamos la bandera de la acción directa, luchamos por la libertad como compañerxs iguales, sin jerarquías verticales ni guías iluminadxs que nos repitan una mentira hasta convertirla en verdad, por eso no creemos en las bondades o las buenas intenciones de la estructura neozapatista.
Parece que en el afán de ver a los indígenas como los nuevos sujetos revolucionarios, muchxs compañerxs perciben al neozapatismo como una opción, sin embargo, si al interior de su estructura se encuentra un grupo de “iluminados” en quienes delegan el resto de los indígenas los “bastones de mando” y las responsabilidad para solventar sus demandas y peticiones ante el gobierno (algo que ellos mismos deberían hacer de manera autogestiva mediante la auto-organización), nos parece evidente que ese “movimiento” tiene muy pocos puntos (si no es que ninguno) en común con nuestras concepciones sobre la libertad y la autonomía individual.
Para finalizar, en lo referente a los medios libertarios. Mi pregunta va dirigida a quienes integramos o nos reclamamos del anarquismo: ¿se considera una tontería publicar un texto que genere el debate al interior de nuestros medios? ¿Qué piensan lxs anarquistas en general, respecto a la existencia de un amplio sector del anarquismo que no somos simpatizante del EZLN, que no apoyamos las tesis del NEOZAPATISMO ni las movidas electorales de la candidata MariChuy?
¿Consideran un error fomentar el debate y la reflexión? ¿Creen que debemos publicar en los medios libertarios sólo apologías y artículos acríticos sobre el EZLN, el NEOZAPATISMO y todo lo que le rodea?
Nos queda claro que las pautas (sin caer en dogmas) a la pertenencia al movimiento libertario están establecidas en los principios entre las y los mismos integrantes. En el que se ha manifestado el antimilitarismo (pero que hay entonces del EZLN con su estructura y jerarquía militar) y, el rechazo a la religión (el EZLN tiene su estandarte de la virgen encapuchada que se alinea con el estandarte de Hidalgo o con el de los zapatistas del caudillo del Sur, sin mencionar las implicaciones directas de la Diócesis de San Cristóbal y otras formaciones católico-liberacionistas), entre otros puntos, para finalizar con un enfático “SOMOS ANARQUISTAS” que, lógicamente, implica el cuestionamiento y la confrontación de toda estructura autoritaria.
Parece que muchos medios libertarios, terminan convirtiéndose en nuevos voceros del neozapatismo, como sucedió en su momento con el periódico Amor y Rabia, que concluyó sus días siendo el vocero oficial del EZLN en los círculos anarquistas, abandonando sus proyectos para dar cobertura con sus propios medios a un organismo ajeno que incluso los medios de alienación masiva han magnificado a través del vedetismo de Marcos, haciéndolo el personaje central de entrevistas, artículos, reportajes y ensayos. Hoy en día la estructura de marketing y comunicación del neozapatismo es mucho más amplia de lo que podamos imaginar, rebasando con creces todos los medios del anarquismo internacional.
Febrero del 2018
B.A.
1 Y el ataque contra los compañerxs de Venezuela no cesa, como por ejemplo el más reciente, una convocatoria para este 15marzo a una concentración en Argentina, promovida por los grupos subsidiados por las menguadas finanzas de la dictadura gobernante en Venezuela, accesible en https://www.lahaine.org/mundo.php/premio-a-provea-un-tiro
Lo anterior como una nueva campaña de agresiones y quizás hasta un eventual montaje represivo, al acusar a los compañerxs de actuar como “plataforma para la sedición contra el gobierno constitucional de Venezuela”.
No se puede dejar de mencionar que el comunicado es reproducido por el portal “La Haine”, que se dice libertario y afín a las voces anarquistas, pero que desde siempre ha sido un entusiasta difusor de todas las campañas de ataque contra los compañerxs de El Libertario. Igualmente, esto ocurre al mismo tiempo que ese otro portal que llevan los plataformistos y que se hace llamar anarkismo.net vuelve a publicar una de las viejas andanadas contra los comapñerxs, pues al parecer son incapaces de elucubrar algo diferente a su gastado arsenal de calumnias.
Y como ha dicho el compa Nelson Mendez: “En todo caso, no deja de ser satisfactorio: ¡Les seguimos dando donde les duele y siguen resollando por la herida!”
Read more ... |
Posted: 19 Mar 2018 12:29 PM PDT
El viernes 23 de marzo de 2018 a las 19 horas en Traficantes de Sueños C/Duque de Alba, 13-Madrid (Metro: La Latina-Tirso Molina), charla Valdemingómez: 20 años son suficientes. Por la salud colectiva, Cierre de la Incineradora con la participación de médicos y sanitarios del GEIS-Grupo de Estudios Incineración y Salud y Fernando Palacios, científico titular del CSIC.
El GEIS se constituyó en 2017 para revisar los estudios científicos existentes sobre el tema, con el objetivo de informar a la población de los efectos de dichas industrias. GEIS Madrid no acepta subvenciones de ninguna organización pública o privada, y somos totalmente independientes de cualquier grupo político. La incineración de residuos urbanos fue presentada en el siglo pasado como la alternativa definitiva para la gestión de las ingentes cantidades de materiales, que esta sociedad basada en la ecuación extracción, producción, distribución, consumo, desechos, necesitaba para gestionar dichos subproductos. A pesar del escaso interés de las Administraciones, durante la última década se han incrementado las publicaciones científicas que apuntan a un incremento de la mortalidad por diversas causas, así como patologías relacionadas con las emisiones de dichas industrias, entre las poblaciones que viven en sus cercanías. En este contexto, desde el GEIS reclamamos que se aplique el principio de precaución para salvaguardar la salud de la población. Read more ... |
Posted: 19 Mar 2018 12:13 AM PDT
Escrito: A fines de 1937
Fuente del texto: Este texto apareció junto a traducciones de siete cartas enviadas por Benjamin Péret a André Breton en "Cartas de Benjamin Péret a André Breton enviadas desde España (1936-1937). Y un artículo inédito: «Revolución o contrarrevolución en España»", en el número 26 de la revista Balance. Cuadernos de historia del movimiento obrero (Barcelona, noviembre 2002), con introducción, notas, y bibliografía de Agustín Guillamón. PRESENTACIÓN DEL ARTICULO INÉDITO "Revolución o contrarrevolución en España" de Benjamin Péret Reproducimos a continuación un texto inédito de Benjamin Péret, escrito a finales de abril de 1937, antes de su partida definitiva de España, en vísperas del inicio de las sangrientas Jornadas de Mayo de 1937 en Barcelona. Se trata de un magnífico texto de análisis político de Péret en el que anticipa los graves enfrentamientos callejeros que se producirían en Barcelona pocos días después. Sin embargo Péret se equivocó al prever que la lucha se iniciaría por un llamamiento de la CNT-FAI. La lucha de los revolucionarios se entabló espontáneamente, pese a los comités superiores de la CNT-FAI, y fue derrotada precisamente porque esos comités superiores estaban ya del otro lado de la barricada. La diferencia entre Julio del 36 y Mayo del 37 radicaba en que los revolucionarios en Julio estaban desarmados pero tenían unos objetivos políticos claros de derrota del ejército y del fascismo; pero en mayo, pese a un armamento superior que en julio de fusiles y balas, estaban desarmados políticamente. Las masas obreras iniciaron una insurrección contra el estalinismo, pese a sus organizaciones y sin sus dirigentes, pero fueron incapaces de proseguir el combate hasta el final sin sus organizaciones y contra sus dirigentes. En mayo de 1937, igual que en julio de 1936, faltó un partido revolucionario. Ni el POUM ni la CNT-FAI eran, ni podían ser, como parece insinuar Péret, esa vanguardia revolucionaria; sino por el contrario el mayor obstáculo a su surgimiento. Agustín Guillamón REVOLUCIÓN O CONTRARREVOLUCIÓN EN ESPAÑA por Benjamin Péret Cada cual se sitúa respecto a la revolución que intenta abrirse paso, según el significado que da a la lucha que prosigue desde hace unos nueve meses al otro lado de Los Pirineos. Todos los partidos antifascistas, excepto los anarquistas y el POUM, ven en la guerra civil una lucha entre la democracia y el fascismo, mientras que estos últimos estiman que se trata de una guerra a muerte entre los trabajadores y sus opresores capitalistas, cuya derrota en España sería señal para el desencadenamiento de la revolución mundial. Quieren pues que la guerra antifascista y la revolución marchen paralelamente, mientras los republicanos de izquierda, los socialistas y los comunistas quieren aplazar la revolución hasta después de la victoria militar, con el objetivo apenas disimulado de estrangularla más fácilmente. Para alcanzar esta meta no han dudado emprender la vía de la represión contra el ala revolucionaria: CNT, FAI y POUM. En Barcelona, el POUM es objeto de todo tipo de chismes, que anuncian una represión sistemática. Se suspende su prensa bajo los más diversos pretextos. Sus milicias son las peor equipadas de todo el Frente de Aragón, pues no se les abastece lo que necesitan. En Madrid, la prensa y la radio del POUM han sido suprimidas por los comunistas, dueños y señores de la mutilada capital, donde persiguen a los militantes anarquistas, que son encarcelados y torturados en prisiones clandestinas que acaban de descubrirse, al mismo tiempo que liberan a fascistas declarados ("Solidaridad Obrera" del 20 de abril [de 1937] cita diecisiete casos de fascistas notorios inexplicablemente liberados por un tal "señor" Cazorla, responsable por otra parte de numerosos arrestos e injustificables "desapariciones"). Hechos similares se han producido en la provincia de Murcia. Por haber dicho la verdad sobre el desastre de Málaga y haber reclamado sanciones contra los responsables de la catástrofe, el anarquista Maroto está en la prisión de Almería desde hace tres semanas, en huelga de hambre para obtener su liberación. Durante todo este tiempo a los trabajadores de Barcelona les ha faltado el pan, la carne, etc..., cuando hoteles y restaurantes de lujo rebosan de víveres. Pero el pueblo, extenuado por horas de espera en las interminables colas para obtener un poco de pan o leche, empieza a gruñir ocultamente contra los mercachifles protegidos por el PSUC. Hace quince días las mujeres se rebelaron en los mercados de Barcelona, saqueando algunas tiendas. La Generalidad, asustada, ha constituido una comisión de investigación sobre la especulación, pero el coste de la vida continúa elevándose y los artículos de primera necesidad son cada vez más escasos. Pero el fenómeno más destacado de estas últimas semanas ha sido sin duda la reaparición de los atentados individuales. La pasada semana un militante de la CNT, otro de la UGT, y el comisario de Orden Público de Barcelona, Rodríguez Salas, han sido víctimas de atentados que todas las organizaciones condenan públicamente, y sobre los que se exige un esclarecimiento que jamás se hará. Es síntoma de una grave enfermedad, que requiere urgente remedio, si no se quiere que perezcan los restos de las conquistas del 19 de Julio. Y digo bien, los restos, pues los comités antifascistas de Cataluña (base del nuevo orden revolucionario que debería haber sustituido a la Generalidad) ya no son más que un recuerdo y las Milicias obreras militarizadas no son ya el ejército rojo en formación, sino el ejército burgués que renace con su cuerpo de oficiales, surgidos la mayoría de la burguesía o la pequeña burguesía, siempre dispuestos a traicionar al pueblo en beneficio de las clases poseedoras. Pero, ¿existe alguna solución? La última crisis de la Generalidad ha durado quince días. Provocada por las medidas reaccionarias que los representantes del PSUC proponían aplicar, únicamente ha podido ser resuelta negando que hubiera existido, es decir, reeditando un consejo de la Generalidad de una composición análoga al que había originado la crisis. Puede pues preverse con seguridad que estallará una nueva crisis, que por otra parte ya parece haber empezado. Y esta crisis será incomparablemente más aguda y de una solución mucho más penosa que las precedentes, ya que contará con todos los elementos de desacuerdo que el consejo de la Generalidad no ha podido resolver, más los nuevos e inevitables que tal situación no puede dejar de engendrar. En realidad, lo que se juega ahora en los consejos de la Generalidad, en las conversaciones entre UGT y CNT (cuya fusión parece más improbable que nunca), en todos los organismos públicos, incluso los más anodinos, es la suerte de la revolución. Del triunfo de los reformistas (Esquerra Republicana y PSUC) o de los revolucionarios (CNT-FAI, POUM) depende que la revolución sea asfixiada o reciba un nuevo impulso. En cuanto a las modalidades que revestirá esta lucha entre las fuerzas de la revolución y de la conservación social, no es difícil imaginar que tarde o temprano saldrá de los consejos de la Generalidad para descender a la calle. El descontento de las masas se agrava día a día y "Solidaridad Obrera" se ha convertido en su más atento y fiel eco cotidiano. Al primer llamamiento de la CNT-FAI las masas obreras tomarán la calle, empuñando el revólver. Enfrente encontrarán tanques y ametralladoras, pero ¿qué no puede esperarse de las masas que el 19 de Julio arrebataron cañones con sus cuchillos? Sin embargo, pese al heroísmo que ya ha hecho maravillas, el resultado de las próximas luchas es imprevisible. Lo único seguro es que del resultado de esa lucha depende la definitiva victoria o derrota de la revolución en España. La victoria significaría la rápida marcha hacia la conquista del poder por los trabajadores, la derrota el compromiso con el fascismo a cargo de las masas obreras aplastadas. F I N. Read more ... |
Posted: 18 Mar 2018 11:29 AM PDT
Introducimos en el siguiente texto al pensamiento de Eduardo Colombo, desgraciadamente, fallecido este mes de marzo de 2018, un teórico y militante anarquista con grandes conocimientos en filosofía política, sociología y psicología, cuya obra realiza una aproximación a las fundamentales ideas de imaginario social y espacio público; frente a la apatía política y la desesperanza social de gran parte de la sociedad, como él insistía, se impone la necesidad de extender un imaginario colectivo revolucionario que reproduzca los rasgos de una sociedad verdaderamente libre.
Los hombres creen que llegará un día en que serán libres e iguales cuando hayan destruido los obstáculos que le impiden serlo, sin darse cuenta que sólo lo son mientras luchan para conseguirlo. Gustav LandauerRecordaremos en primer lugar el concepto de "bloque imaginario" o "imaginario social", cuando se alude al funcionamiento de la sociedad sobre la base de una serie de ideas y valores que se organizan como una especie de "campo de fuerza" que atrae y orienta los diversos contenidos de todo un universo de representaciones (expresado en instituciones, ideologías, mitos o formas sociales); cuando se consolida ese universo, supone una evidente limitación para el pensamiento y la acción. El imaginario social, no obstante, posee también una carga creadora basada en la realidad que vive el ser humano, no en fantasías o ilusiones. El bloque imaginario triunfante después de la caída del bloque soviético se basó primordialmente en que las únicas posibilidades reales eran ya la democracia representativa, el liberalismo y la economía de libre mercado. Eduardo Colombo considera que existe en la sociedad un imaginario revolucionario (es decir, verdaderamente progresista), aunque no de una manera unívoca, al igual que también se producen los imaginarios conservador y reformista. Resulta francamente difícil tener una opinión sobre el comportamiento humano, y sobre las instituciones y la historia, desde un punto de vista independiente de nuestros propios valores, deseos y prejuicios; no obstante, es el peso de los argumentos, un juicio sólido y el conocimiento lo que nos permite acercarnos a una comprensión razonable del mundo en que vivimos. Así, no hay posición más sumisa, ni mayor obstáculo al "libre examen", que la que se pliega al pensamiento establecido y a los consecuentes paradigmas sociales y políticos; insistiremos una vez más, al igual que hace Colombo, que el ejercicio de la razón es tributario de un pensamiento verdaderamente crítico. Colombo insiste en la capacidad simbólico-instituyente de los seres humanos, lo que llamamos el "imaginario social"; cuando esta potestad queda acaparado por una minoría, o a veces también por una mayoría, que es la que impone la ley al conjunto de la sociedad es cuando nace el Estado (el poder político); a la posición anarquista de Colombo le es indiferente si el origen y justificación de dicho poder son religiosos, naturalistas o democráticos (en su vertiente representativa). Los movimientos anarquistas se esforzaron por transferir al colectivo social esa capacidad de decisión, combatiendo así el poder colectivo concentrado en pocas manos; solo los explotados y oprimidos, por su propia condición social, podían ser la fuente de una transformación revolucionaria. No resulta muy sensato que los ricos y poderosos renuncien a sus riqueza y al poder; volvemos de nuevo al concepto de "imaginario social", por lo que los valores y aspiraciones de una sociedad jerárquica (son los de dominadores y sometidos) son los que ese encarnan en la instituciones y, a pesar de ello y aunque sea de forma extraordinaria, se siguen produciendo sublevaciones (producto del imaginario revolucionario). Es el imaginario revisionista, concretado en el pensamiento neoliberal, el que niega toda tentación revolucionaria equiparándola inmediatamente con el totalitarismo. Colombo nos recuerda que las revoluciones no son solo hechos históricos, sino momentos necesarios en la vía para un cambio radical en la sociedad jerárquica; por supuesto, es una visión netamente anarquista, pero de una profundidad revolucionaria incuestionable. No es casualidad que el anarquismo resulte despreciado y vilipendiado por el revisionismo histórico, sea conservador, reformista o cuestionablemente revolucionario (por autoritario). Solo el anarquismo resulta verdaderamente transformador, ya que el lenguaje del poder es siempre el del estatismo y la sujeción; sea la Iglesia o el Estado, en cualquiera de sus formas, los que ejercen el poder siempre existen límites de todo tipo para el ser humano (el cuerpo, la moral, la democracia…). Colombo considera, al igual que Landauer, que existen dos formas en que la historia interviene en las pasiones humanas: una es la historia que se enseña en la escuela (los detritus del pasado) y otra es la fuerza que nos propulsa concretada en nuestros deseos y pasiones. Insistamos en el imaginario revolucionario anarquista, obviado también a nivel histórico por la visión simple y maniquea del revisionismo neoliberal, con el modelo político de la democracia representativa, que considera que "toda revolución está preñada de jacobinismo, leninismo y totalitarismo". Tal y como lo ve Colombo, el anarquismo jamás idealizó al pueblo, ni tuvo una visión romántica del proletariado; muy al contrario, solo es posible ver que la mayor parte de las personas tienen una visión de la vida sencilla y, en gran medida, conservadora. El imaginario social predominante asegura la institucionalización autoritaria garantizando la obediencia y la sumisión. No obstante, el imaginario revolucionario produce "momentos fuertes" en la historia en los cuales se produce una nueva institucionalización de lo social y la acción humana desplaza los límites de lo posible; a pesar de ello, esos momentos revolucionarios acaban instaurando un nuevo orden en el que se aplastan los movimientos marginales y aseguran una nueva domesticación. A pesar de que los trabajadores se acabaron integrando en la sociedad moderna de forma mayoritaria en el nuevo imaginario (división entre sociedad y Estado, igualdad solo formal ante la ley, democracia representativa, sacralización de la propiedad privada…), no se logra acabar del todo con los deseos sociopolíticos de la plebe (igualdad de hecho, democracia directa, delegación con mandato controlable y revocable…). El anarquismo, nacido en el siglo XIX, combatió siempre toda explotación y dominación, también el imaginario social que incluye las formas propias de la democracia representativa; el imaginario revolucionario anarquista, que debe formar parte siempre de los movimientos libertarios, está formano por una libertad construida con la base de la igualdad, el rechazo a dominar o a ser dominado, la desaparición del Estado y de la propiedad privada, el antiparlamentario, la acción directa y la lucha de clases. Son las señas de identidad ácratas que Colombo considera inexcusablemente recuperables, ya que el poderoso imaginario neoliberal puede haber influido también sobre los movimientos revolucionarios. El imaginario social que ha caracterizado el proyecto de la modernidad, como todo paradigma histórico, es susceptible de ser vulnerado y volver a confiar en las ideas como motor para la acción revolucionaria. Por lo tanto, hay que comprender la crítica radical que realiza el anarquismo, no solo al poder instituido, también al imaginario que lo sustenta; su reproducción simbólica y la servidumbre que genera por costumbre establecida. El poder político, aunque pretende presentarse como incontestable al ceñirse a un marco preestablecido, es susceptible de todo tipo de análisis y, como es lógico, es solo producto de la contingencia histórica y humana. Insistiremos en que Eduardo Colombo considera que el poder político, al margen de la forma institucional que tome (sea tiranía o sea democracia representativa) es "la consecuencia de la expropiación efectuada por una minoría de la capacidad de autoinstituirse, que es propia del colectivo humano"; a pesar de ello, el expropiador del poder social quiere presentarse como si la sociedad se debiera a su existencia. Colombo denuncia que toda la filosofía política, clásica y moderna, es un esfuerzo para justificar y legitimar el derecho de coerción inherente al poder político. A pesar de ello, junto a ese derecho a la dominación se produce de forma paralela un derecho a la resistencia, el cual parece haberse manifestado siempre enfrentado al primero. Resulta muy reivindicable una espacio político no jerarquizado en el que los seres humanos pueden reconocerse como libres e iguales, "el espacio político de la anarquía". El movimiento anarquista, según Colombo, debe esforzarse en reflexionar sobre las formas institucionales que se producirían en una sociedad libertaria;el anarquismo es una teoría política, ya que lo que suprime en realidad es la coacción y no la política en sí, y de forma consecuente es también una ética y un ethos (el lugar donde habitaría esa deseable sociedad). El movimiento anarquista puede orientar una transformación social en sentido libertario gracias a la acción de cada momento del presente; aunque mucha gente, debido a que no perciben cotidianamente la construcción del proceso, tienen la impresión de que se trata de una irrupción brusca, es en realidad producto del trabajo de una difusión de ideas y de formas organizativas de carácter práctico. Colombo insiste, y resulta tremendamente importante comprender esto, en que todos estamos socializados; es decir, vivimos y estamos impregnados de los valores de una sociedad jerárquica. Es por eso que los anarquistas, aunque obviamente rebeldes e insumisos en gran medida, también deben luchar contra un bloque imaginario que tienen interiorizado. Desde ese punto de vista, se comprende que tiene que haber una transformación radical de la sociedad, y consecuentemente de los seres humanos, para vivir en una auténtica comunidad libre. Volvemos a la necesidad de una imaginario revolucionario que transgreda la apatía política y la profunda desesperanza que sufre una gran parte de la sociedad. Las ideas, para ser verdaderamente eficaces, deben estar estrechamente relacionadas con los deseos y emociones de los seres humanos; así, aunque la idea de emancipación social hace tiempo que existe, aparece hoy como utópica en el sentido de estar desligada de la vida colectiva. Colombo recuerda que la ideas deben integrarse en la realidad cotidiana a través de los procesos sociales en que las personas se involucran; mediante la insurrección colectiva, se quiebra el imaginario establecido y la gente, a través de esa fractura, puede apropiarse de las ideas emancipadoras y convertirlas en realidad. El imaginario, como mundo de representaciones y creencias, es colectivo, jamás camina solo; así, existen dos procesos que no son extraños entre sí: por un lado, los movimientos de discusión y difusión ideológica y, por otro, cómo ese trabajo debe estar vinculado a los procesos sociales. Colombo recuerda una fuente de discusión constante en el mundo de la sociología y es cómo pasan las ideas a la realidad social; según este autor, "ese pasaje está en el doble movimiento de elaboración crítica de las ideas y en los movimientos sociales de desobediencia, de protesta y de insurgencia". El imaginario revolucionario pasa, como es obvio, por una dimensión utópica del cambio, ya que de lo contrario seguirán repitiéndose errores; si el imaginario conservador o reformista pasa por poner a alguien de nuevo en el poder, después de un vacío del mismo, hay que hacer comprender a la gente que es un error producto de no haber pensado nada nuevo. Esa incitación a la polémica, a debatir y a pensar cosas nuevas, es con seguridad una de los rasgos del imaginario revolucionario anarquista. Bibliografía: El imaginario social, Eduardo Colombo (Nordan-Comunidad, Montevideo 2002). El espacio político de la anarquía, Eduardo Colombo (Nordan-Comunidad, Montevideo, 2000). El lenguaje libertario, varios textos compilados por Christian Ferrer (Tupac Ediciones, Buenos Aires 2005). La voluntad del pueblo, Eduardo Colombo (Tupac Ediciones, Buenos Aires 2006). Enlaces relacionados: “Cuando el proyecto no existe, el gesto de la revuelta se transforma en repetitivo”. Conversación con Eduardo Colombo durante el Encuentro Internacional Anarquista de St. Imier en 2012 Entrevista a Eduardo Colombo (vídeo)
Capi Vidal
Read more ... |
Posted: 18 Mar 2018 05:38 AM PDT
Durante mucho tiempo he sido partidario de "leer de todo" y no me refiero con esto a leer de todos los géneros (y subgéneros) literarios, que también es conveniente, saludable y enriquecedor. Aquel "algo está podrido en el estado de Dinamarca" de Marcelo en "Hamlet" salpimenta cualquier vistazo, de reojo, al Gobierno y a la Monarquía. En su "Canto a mí mismo", Whitman reclama "Que se callen ahora las escuelas y los credos. //Atrás. A su sitio.". Un Unamuno ¿dolorido? en "Del sentimiento trágico de la vida" nos proporciona las lentes definitivas para mirar a nuestro alrededor cuando dice que "los hombres se menguan los unos a los otros.". El beneficio de la lectura está fuera de duda en este sentido... y sin embargo no se lee, porque el placer de aquel beneficio era un placer lento y sereno y hoy hay poco tiempo y demasiadas urgencias. Y se impone la imagen sobre la letra, lo sublingual a la punta de los dedos y el zasca a la visión de conjunto.... Pero voy un paso más allá, abandonando la dimensión más lúdica de uno de nuestros mejores e infrecuentes hábitos, y me adentro en terreno árido, cuando propongo leer aquello cuyos contenidos no se corresponden con lo que creemos, pensamos y sentimos. O, más aún, ni con lo que conocemos. No he dudado en promover este propósito en cualquier debate desinformado, cuando me ha resultado evidente que perdemos, como colectivo, algunos de los contenidos más elementales en materia de Historia, Filosofía, Antropología, Sociología o Psicología. Unos contenidos que arrebatan los gobiernos y distorsionan o sepultan, según convenga, los miedos de masas. Bajo un más que evidente yugo coercitivo, en este país se ha idealizado, por cojones, una Transición que no tuvo lugar, se ha normalizado el darwinismo social, se ha estigmatizado la diferencia, se ha criminalizado lo colectivo y se ha responsabilizado a la pobreza de sí misma, a través del fraude neoliberal de la actitud individual. Que duda cabe que si fuéramos perfectamente conscientes de cómo hemos llegado hasta aquí, muy probablemente tendríamos claro hacia dónde nos dirigimos y si tuviéramos una capacidad de elección real como colectivo tomaríamos las decisiones oportunas para corregir nuestro rumbo y adecuarlo a nuestras necesidades reales. Algo bastante contraproducente para el pensamiento único y la necro-economía del extractivismo. El destrozo de las Humanidades en las dos últimas décadas ha tenido por objeto la narcosis, la desmemoria, la insensibilización y el aislamiento del individuo. La estrategia no era otra que la de tratar de reducir el número de individuos que tuvieran la capacidad de detectar las múltiples fisuras y falacias del discurso del poder y las divulgaran, no para combatirlas, sino para construir antipoder. Porque una vez que se han fabricado ciudadanos (esto ha sido, sí, un riguroso proceso de ingeniería social y producción de carne de cañón) que no saben, que no recuerdan, que no tienen curiosidad, que no cuestionan y que repiten como mantras los zascas, memes y tuits que corresponden, ante estímulos concretos y consecutivos (todos los esfuerzos en la difusión de los medios está prevista en este sentido),... lo que más ilusión le hace al poder es que le combatan a través de sus propios medios, de sus propios espacios, con sus reglas, con sus leyes, con sus herramientas...Y es aquí donde la izquierdita coge el guante de la derechona y se embarca, con una pasión bochornosa, en las batallas (pseudo)culturales más improductivas, irrelevantes o inoportunas, mientras los ayuntamientos del cambio obedecen igual de bien que sus predecesores y sus aparatos esperan a recoger el rédito de los esfuerzos de los movimientos sociales. Parece muy grande la tentación del tuit viral, del artículo de opinión definitivo, del más brillante análisis (que, por cierto, no es nada sin su síntesis)...¿Tienen salario los vigilantes de la hemeroteca?, ¿y los redactores de los comunicados de lo obvio y las declaraciones de relleno? ¿Se percibe la política y la comunicación como un nicho de empleo desde la izquierda? ¿Se estará extendiendo el pensamiento de que se puede hacer dinero ganando el zasca la razón en tuitero combate singular? Sea como fuere, es fácil e inmediato observar la gran cantidad de energía que se disipa en las trincheras virtuales en torno a los temas que han venido siendo tendencia, desde lo previsible y esperado hasta lo innecesario y desquiciado (Cataluña, Tabarnia, la mordaza 2.0, la prisión permanente revisable, la huelga feminista, las pensiones,...) ¿Será esto interesado? Los trolls son de derechas y de izquierdas. Sí, la izquierda, también trollea. Los tuits de los progres, mal que les pese, no son epifanías, ni revelaciones, ni constituyen episteme. No hay diferencia entre un Pastrana y una Protestona. Hay una interdependencia aceptada y consciente en las pistas del circo virtual. Nadie va a cerrar la puerta tras de sí. Es el bipartidismo que no cesa. Ambos signos tiene el don de una inoportunidad que, por continuada, sugiere más alguna disfunción cognitiva y/o emocional que una impertinencia reincidente. No hay asunto delicado en las redes que una legión de imbéciles no aproveche para hacer pedagogía cutre, balance de cagadas y propaganda electoral. La izquierda institucionalista está empezando a advertir que no aporta absolutamente nada en las redes sociales porque estas (corporaciones capitalistas) no son lugar para lo otro. Las luchas que se han organizado al margen de sus aparatos ya se han encargado de recordárselo en ese mismo contexto digital (huelga feminista, pensionistas,...). Dice Holloway en sus "Doce tesis sobre el anti-poder" que "la revolución no se puede entender como una respuesta, sino sólo como una pregunta (terriblemente urgente, una pregunta llena de mil respuestas), como una exploración de la realización de la dignidad. Preguntando caminamos.".Huelga decir que las redes sociales ejemplifican otro éxito de la industria a la que sirven obviando las preguntas e imponiendo un número limitado de respuestas prefabricadas que no salen de sí mismas. Los nodos de la redes, sus usuarios, reordenan su conectividad para sí, adecúan la información que reciben a sus deseos, tanto a nivel de estímulos,... como de respuestas. Se ve lo que se quiere ver, nada más. No es casualidad que perfiles nítidamente libertarios limiten el uso de las redes a la divulgación de contenidos y a la difusión de convocatorias. Es lo que tiene, entre otras cosas, el atrevimiento de pensar con libertad.
Alejandro Floría Cortés
Read more ... |
Posted: 18 Mar 2018 05:29 AM PDT
Las convenciones sociales son un elemento inherente al ser humano, pues estas surgen con él. Son una construcción social en la medida en que forman parte de la cultura. De hecho constituyen una parte importante de la cultura debido a que moldean la cotidianidad de las personas que viven en una determinada sociedad. Estas convenciones las componen las costumbres, los códigos de conducta, los usos establecidos, las reglas, etc. Digamos que las convenciones sociales constituyen las formas específicas de una sociedad, y más concretamente las formas del comportamiento de sus integrantes. Estas convenciones varían de una sociedad a otra y tampoco permanecen inmutables, sino que cambian a lo largo del tiempo. Por esta razón lo que es considerado socialmente aceptable en una sociedad no lo es en otra, y lo mismo ocurre a lo largo de diferentes épocas dentro de una misma sociedad.
Las sociedades son como los individuos, cambian a lo largo del tiempo como consecuencia de sus diferentes experiencias. Y con ese cambio también son modificadas las convenciones sociales que forman parte de la cultura que diferencia a esa sociedad, lo que indudablemente afecta a su identidad. Un individuo en su madurez es muy distinto de cuando era un niño o un adolescente. Ciertamente en un sentido muy literal estamos ante el mismo sujeto sólo que considerado en diferentes momentos. Son los cambios que el individuo experimenta a lo largo de su vida los que le transforman y le convierten con el paso del tiempo en otra persona. Estos cambios le moldean y pese a que siga siendo Juan o María no es, en definitiva, el mismo Juan o la misma María de hace 10 ó 40 años. Lo mismo ocurre con las sociedades. Así pues, las sociedades primarias se caracterizan por no tener mucha cultura en tanto en cuanto las convenciones sociales que organizan su vida son limitadas. Su escasa complejidad hace que la cultura tenga un papel limitado mientras el individuo se encuentra en un estado de naturaleza. En este tipo de sociedad las necesidades son limitadas al circunscribirse fundamentalmente al mantenimiento y reproducción de la vida, de manera que las convenciones sociales existentes además de ser escasas están adaptadas a esas necesidades y al mantenimiento de las formas a través de las que esa sociedad las satisface. En este tipo de sociedades uno es dueño de todo y nadie es dueño de nada, de lo que se deducen una serie de relaciones no mediadas por el dinero ni sometidas a coacción alguna que, sin embargo, facilitan la satisfacción de las necesidades humanas, tanto materiales como inmateriales. Pero el proceso de civilización imprime en este tipo de sociedades unos cambios drásticos que las alteran completamente, y esto se refleja claramente en el terreno de la cultura y más específicamente en el de las convenciones sociales. Ciertamente la civilización corrompe. El paso de una sociedad primaria, relativamente simple, a una sociedad compleja en el marco del estadio de desarrollo histórico que representa la civilización conlleva, a su vez, unas profundas transformaciones en todos los ámbitos de la vida humana, pero de manera muy particular en el de la cultura. La complejidad social, derivada en gran parte de la existencia de clases sociales en las que determinados grupos llevan una vida ociosa a costa del trabajo ajeno, genera unas condiciones de creciente heterogeneidad social para satisfacer las también crecientes necesidades del sistema de dominación que la articula. La división del trabajo y la excesiva especialización conlleva la aparición de una gran diversidad de grupos sociales, hasta el punto de que la cultura se convierte en una cuestión exclusiva de ciertos grupos que se dedican a ella de manera profesional y deja de ser así una creación popular para convertirse en el monopolio de unos pocos. En el marco de la civilización la cultura desempeña una función específica dirigida a conseguir varios objetivos complementarios. Uno de estos es el consentimiento de la población al orden constituido, de manera que la mentalidad de la sociedad es moldeada de tal forma que vea como aceptable el sistema de dominación que la gobierna. La otra gran función de la cultura es el control de la población mediante la imposición de unas convenciones sociales que adaptan el comportamiento de las personas a las exigencias del poder establecido. Como consecuencia de esto último en las sociedades civilizadas la cultura se ha convertido en una industria de consumo para las masas, pero sobre todo en un artefacto para controlar a la población en la medida en que se da un exceso de cultura, entendido esto como un exceso de convenciones sociales que coartan la libertad de las personas y las someten a unos cánones impuestos por el poder. La cultura deviene en un elemento de alienación que deshumaniza a las personas al estar más pendientes de satisfacer unas determinadas convenciones sociales, y por ello unas expectativas sociales culturalmente determinadas, que no en satisfacer sus propias necesidades. El comportamiento, entonces, es orientado según las exigencias del poder cultural que domina la sociedad y que la adapta a las necesidades del sistema de dominación. El resultado de todo esto es la deshumanización a través de la generalización de la hipocresía, pues las personas actúan de un determinado modo para cumplir con unos códigos de conducta, unas reglas, unas expectativas, etc., que constituyen lo que hoy se conoce como lo políticamente correcto. Se trata de una forma de coerción desarrollada por la cultura, y sobre todo por un exceso de cultura debido a que esta ya no ocupa una esfera limitada sino que se ha vuelto omnipresente para organizar el comportamiento humano de una forma total. Las convenciones sociales, en el contexto histórico que representa la civilización, se convierten en un instrumento por medio del que las personas ocultan sus verdaderas intenciones. La dictadura de lo políticamente correcto que genera el exceso de cultura, junto al elevado peso de las convenciones sociales, hace que la imagen pública que las personas proyectan de sí mismas sea, por el contrario, muy diferente de la real. La persona actúa del modo en el que lo hace no por convicción interior, sino que por el contrario la mayoría de las ocasiones lo hace para evitar romper las convenciones imperantes y con ello eludir las consecuencias que ello provocaría, como es el rechazo, la crítica, la estigmatización, etc. La hipocresía se normaliza, y con ella la falta de sinceridad y la deshonestidad se generalizan. A todo esto le sigue la sospecha y la desconfianza entre las personas que en su hipocresía no toman en serio el comportamiento ajeno, y que por ello lo consideran un fingimiento. De este modo comprobamos que la civilización, con sus convenciones, ahoga la libertad y tiraniza a las personas que se ven obligadas a satisfacer unas exigencias culturales, generalmente impuestas, en detrimento de su integridad moral y de la satisfacción de sus propias necesidades. El individuo, y la sociedad misma, es sacrificado por las convenciones. El peso de las convenciones sociales aplasta al individuo y a la comunidad al arrebatarles la libertad. Es el precio de la civilización que da más importancia a una serie de apariencias, de formas y refinamientos, que van en claro perjuicio de cuestiones más importantes que afectan a la dimensión específicamente humana de las personas como es la honestidad, la sinceridad, la espontaneidad, etc. Si las formas que son inherentes a esas convenciones tienen tanta importancia es porque son una herramienta de control que adapta a las personas y al conjunto de la sociedad a las necesidades, definidas en términos de poder, del sistema de dominación y de su elite dirigente. Pero además de esto generan un problema de fondo que afecta de lleno a la convivencia, pues el sentido asignado a determinados comportamientos, usos, reglas, etc., cambia completamente cuando no son tomados en serio, lo que da lugar a que el significado que oficialmente tienen asignado en la sociedad difiera del que finalmente reciben cuando son aplicados por los individuos. Esto genera incomunicación, incomprensión y desencuentro en las relaciones personales, de manera que la cohesión social se ve resentida. La civilización quita más de lo que da a cambio. Ciertas mejoras materiales y comodidades se pagan a un precio muy alto que es la pérdida de la libertad, la alienación y la deshumanización. No sin razón Julio Camba, en su etapa anarquista, abogó por un ser humano en un estado natural, ajeno a los condicionamientos de la civilización. La civilización lo que hace es domesticar al ser humano, pues no sólo somete su entendimiento mediante el adoctrinamiento, sino que sobre todo reprime su instinto de rebeldía y sus ansias de libertad al generar en este una visión fatalista de su existencia. Es por eso que Julio Camba se mostró favorable a desandar ese camino a la civilización para recuperar el instinto de libertad propio de las sociedades primitivas.[1] Una sociedad libre, por necesidad, es una sociedad en la que la cultura ocupa una esfera limitada, y que por ello mismo sus integrantes disponen de una amplia autonomía al no verse sometidos al peso de unas convenciones sociales excesivas. No se trata, entonces, de eliminar por completo las convenciones sociales, pues estas son inseparables del ser humano. Sino más bien de limitarlas en lo posible para que no sean las personas las que estén a su servicio sino, por el contrario, que dichas convenciones estén al servicio de las personas para facilitar la satisfacción de sus necesidades humanas, tanto materiales como inmateriales. De lo contrario sólo estaríamos reproduciendo una nueva dictadura de lo políticamente correcto bajo unas formas distintas. Se trata, en definitiva, de recuperar la libertad pero sobre todo de conservarla y engrandecerla, lo que únicamente es posible si la espontaneidad y la autenticidad son la sintonía general de las relaciones que establecen los miembros de una comunidad.
Esteban Vidal
Nota:[1] Camba, Julio, “Seamos bárbaros” en El Rebelde Nº 11, 5 de marzo de 1904 Read more ... |
Posted: 18 Mar 2018 04:59 AM PDT
Nueva publicación anarquista desde Madrid. Gratuita. Podéis descargarla pinchando aquí. A continuación os dejamos el índice de contenido y la editorial. Para pedidos y demás contactos, escribir a: publicacioninfamia@autistici.org.
En la época de la Antigua Roma, la infamia era la degradación del honor civil. El afectado por ella debía haber llevado a cabo un acto deshonroso o vil, para acto seguido ser desacreditado por un censor, que le otorgaba la categoría de infame. De esta manera, el afectado no podía acceder a cargos públicos ni votar en las elecciones, lo que limitaba sus facultades sociales y jurídicas.El derecho romano reconocía dos tipos de infamia según sus causas.La infamia iurs, era una consecuencia de un fraude o de alguna acción dolosa. La infamia facti se decretaba cuando la persona desarrollaba un acto contrario al orden público, la moral o las buenas costumbres. Es con este tipo de infamia con el que nos sentimos identificadas, aquella que reivindicamos con orgullo, pues ¿qué tarea, acción o estrategia netamente anarquista no cabe bajo de la definición de “un acto contrario al orden público, la moral o las buenas costumbres”? Si su orden público se basa en el ejercicio de una violencia (tanto explícita como simbólica) para obligarnos a actuar en contra de nuestros intereses y a favor de los beneficios de asesinos y explotadores, nos rebelamos contra él y nos declaramos infames. Si su moral lo único que defiende es la propiedad privada (concepto bajo el cual se lleva a cabo el expolio de la gran mayoría de desposeidas y oprimidas a través del acaparemiento de los medios de vida en unas pocas manos privilegiadas), nos rebelamos contra ella y nos declaramos infames. Si sus buenas costumbres nos atan a la jerarquización social, convirtiéndonos en seres humanos de segunda clase, nos rebelamos contra ella y nos declaramos infames. Por eso nace esta publicación. Para extender la llama de la infamia y la desobediencia. Para luchar por la anarquía. Read more ... |
Posted: 18 Mar 2018 01:10 AM PDT
Ayer
La socialdemocracia es una corriente política que surgió a finales del siglo 19 del seno del movimiento obrero alemán. El Sozialdemokratische Partei Deutschlands o SPD alemán, fundado en 1869, no sólo fue el partido socialista más antiguo y el más importante, sino que además fue el modelo a seguir por el resto de partidos de la Segunda Internacional: Dinamarca 1878, España 1879, Bélgica 1885, Austria y Suecia 1889, Hungría 1890, Italia y Polonia 1892, Rumania 1893, Bulgaria y Holanda 1894, Argentina 1896, Rusia 1898, Francia 1902/1905. En Inglaterra y algunos otros países optaron por denominarse laboristas. Expulsados los anarquistas de la Segunda Internacional, en 1896, todos los partidos socialistas adoptaron principios ideológicos inspirados en el marxismo. Hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial, anidó en el seno de todos los partidos nacionales una tendencia revolucionaria, radicalizada y minoritaria, pero teóricamente potente y muy activa (Luxemburgo, Lenin), enfrentada a una base sindical y popular de carácter moderado y mentalidad reformista (Bernstein, el último Kaustky, Lassalle). Los objetivos fundamentales de los partidos socialistas fueron el sufragio universal y la conquista del Estado, para utilizarlo como medio de transformación gradual del capitalismo hacia el socialismo. Bernstein defendía este gradualismo como un proceso de reformas políticas y económicas. Estas reformas eran el objetivo prioritario del movimiento obrero, y en consecuencia las elecciones y el parlamentarismo se convirtieron en el método principal, sino único, del lento, progresivo y constante avance hacia el socialismo. Para Bernstein las reformas que propugnaba no eran sólo un sistema de obtención de beneficios inmediatos, sindicales o sociales, sino que la democracia era un concepto mejorable y además un objetivo político que debía conquistarse mediante la lucha por el derecho de los sindicatos a participar no sólo en la administración de empresas, sino también en la dirección política del Estado. Por su parte, los partidos laboristas pensaban que la transición al socialismo podía lograrse, mejor, con una evolución de la democracia representativa que por una revolución violenta, o algún otro medio alternativo al de las elecciones democráticas. Bernstein fue condenado y rechazado, en teoría, por todos los partidos socialistas; pero en la práctica sus posiciones gradualistas influyeron enormemente en el socialismo internacional y en la mentalidad de los militantes socialdemócratas. La Primera Guerra Mundial supuso la quiebra de la Segunda Internacional, cuando los diferentes partidos socialistas, sobre todo el alemán y el francés, votaron favorablemente y casi por unanimidad los créditos de guerra en sus respectivos parlamentos nacionales. Las conferencias internacionales de Zimmerwald y Kienthal visualizaron que todos los revolucionarios opuestos a la gran carnicería de trabajadores cabían en sólo dos coches. El triunfo de los bolcheviques en Rusia hizo que el socialismo internacional se dividiese definitivamente en dos grandes tendencias ideológicas; las facciones más radicales de los partidos socialistas se escindieron y acabaron conformando partidos comunistas, integrados en la Tercera Internacional (también llamada Internacional Comunista o Komintern), que seguía una línea cercana al gobierno de Moscú. Así surgieron los partidos comunistas de Italia, España, Francia, etcétera. Los partidos socialistas, escindida el ala radical, adoptaron con mayor fuerza el concepto y apelativo de socialdemócratas. Algunos de estos partidos llegaron a alcanzar tareas de gobierno, en solitario o en coalición, incluso con partidos comunistas, en la Europa de entreguerras, en los llamados Frentes Populares. Estos partidos socialdemócratas defendían la unidad antifascista y las reformas como el camino hacia un socialismo sin propiedad privada y no se oponían a la existencia de la URSS. Los partidos laboristas, influidos por el keynesianismo, entendían que lo fundamental era el control estatal de los mecanismos financieros, a partir de lo cual seguiría un proceso lento de evolución hacia el socialismo. Después de la Segunda Guerra Mundial, la socialdemocracia europea abandonó el marxismo y elaboró una nueva visión de las relaciones entre capitalismo y socialismo, proponiendo un mayor intervencionismo estatal en los procesos de distribución de la riqueza, una política fiscal progresiva y una red asistencial subvencionada, que configuraba el Estado del bienestar. En 1959, en el Congreso de Bad Godesberg, el SPD abandonó el marxismo, identificando totalmente socialismo y democracia. El PSOE lo haría en 1979. Los pensadores y políticos más destacados fueron León Blum, Ramsay McDonald, Pierre Mendès-France, Tony Crosland, John Maynard Keynes, John Kennet Galbraith, Olof Palme (Primer ministro sueco, desde 1969 hasta 1976), Bruno Kreisky (Canciller de Austria, 1970 -1983), Willy Brandt (Canciller alemán, 1969-1974), Nehru, etcétera. Sin ánimo de caer en la caricatura sus exponentes españoles son Pablo Iglesias Posse (1850-1925), Francisco Largo Caballero (1869-1946) y Felipe González. Zapatero sería ya un progre de pies a cabeza, sin vestigios de ningún pensamiento, ya fuera socialdemócrata o no. Hoy Hasta el siglo 21 los socialistas se presentaban como los mejores gestores del capitalismo. Eran un movimiento político que propugnaba la reforma de las estructuras sociales y políticas capitalistas. Concedían el máximo valor a la lucha parlamentaria como instrumento para el logro de sus fines; rechazaban la violencia y la acción ilegal. Eran los más reticentes a la alianza con los comunistas y los más favorables y cautos ante las corporaciones transnacionales y la especulación financiera. Muchos socialdemócratas mantienen que no hay un conflicto entre la economía capitalista de mercado y su definición de una sociedad del bienestar, mientras el Estado posea atribuciones suficientes para garantizar a los ciudadanos una debida protección social. Se diferencian del liberalismo y del neoliberalismo por su insistencia en la regulación de la actividad productiva y en la progresividad y cuantía de los impuestos. Esto se traduce en un incremento de la acción del Estado y los medios de comunicación públicos, así como de las pensiones, ayudas y subvenciones a asociaciones culturales y sociales. Algunos gobiernos europeos, bajo la presión del neoliberalismo, aplicaron una variante: la llamada Tercera Vía, con un menor intervencionismo y presencia de empresas públicas, pero con el mantenimiento de las ayudas y subvenciones típicas de la socialdemocracia. Era la vía propuesta por Tony Blair (Primer ministro del Reino Unido, 1997-2007), que muy pronto se mostró obsoleta. Podemos decir que la socialdemocracia nutre en la actualidad a la ideología de la izquierda política del capital y a la mentalidad progre, pero ha quedado muy dañada por las críticas neoliberales y la ruina del Estado del bienestar. Entre los pensadores que han tenido más influencia sobre la socialdemocracia en el presente se encuentran Gerhard Schoeder, Paul Krugman, Robert Solow, Joseph Stiglitz, Norberto Bobbio y Zyfmunt Bauman. Las ideas que dieron paso a las posiciones de Tony Blair provenían de la obra de Anthony Giddens y Jeffey Sachs. Los partidos socialdemócratas se encuentran entre los más importantes en la mayor parte de los países europeos. En Estados Unidos los socialistas son una rareza y siguen siendo considerados, fuera de toda razón, como peligrosos extremistas y revolucionarios. La mayor parte de los partidos socialdemócratas son miembros de la aséptica, funcionarial y burocratizada Internacional Obrera y Socialista, fundada en 1951. A menudo se utilizan los términos "socialismo" o "socialista" en referencia a la socialdemocracia y los socialdemócratas, pese a que el concepto "socialismo" es más amplio, ya que en diferentes países pueden incluir a socialistas, comunistas y anarquistas, aunque cada vez más sólo como referencia histórica a su origen ideológico común a mediados del 19. Progres El pensamiento progre es entendido como una serie de ocurrencias, más o menos incoherentes e inconexas, propias del centro-izquierda del arco parlamentario. El refundado PSOE lideró el progresismo político durante el gobierno de Felipe González (1982-1996). Con Zapatero (2004-2011) se perdió ya toda ideología socialdemócrata y los progres mostraron todas sus contradicciones e ineficiencia, propias del vacío oportunismo político que los nutre. Abandonado el marxismo por Felipe González (1979) y convertido el PSOE con Zapatero en el partido único PP-PSOE, los progres proponen verbalmente unos planes de bienestar social cada vez más reducidos e imposibles, defendiendo en la práctica el capitalismo salvaje de las transnacionales y el capital financiero, que sólo genera mayor concentración de riqueza y desigualdad social. Con la crisis de 2008, la única joya programática socialista, el Estado del Bienestar, se derrumbó hasta disolverse en la nada, convirtiendo a los progres en pésimos gestores del capital. Apenas si se diferenciaban de la extrema derecha por su buenismo, tolerancia y talante cultural, favorables al aborto, el reconocimiento de los derechos homosexuales, la igualdad de la mujer y la resignación ante una masiva inmigración. En agosto de 2011 Zapatero y el partido único reformaron la constitución por vía de urgencia, sin referéndum, para someter los presupuestos a la disciplina fiscal exigida por Merkel. Su fracaso en las políticas sociales, al no poder conservar los presupuestos para educación y sanidad, subvenciones sociales, mantenimiento de las pensiones, etcétera, junto con el incremento desmesurado del paro y los casos de corrupción generalizada en sus filas , como en cualquier otro partido, hizo de los progres unos ineptos sin ningún tipo de credibilidad. En privado hacen exactamente lo contrario de lo que predican en público. Ya no creen en la utopía y quizás en nada. Ignoran la vieja tradición socialista, que aún fingía defender principios como la solidaridad o la igualdad. Su evidente despolitización los convierte en oportunistas amorales, inverosímiles, despreciables y despreciados. Los diputados socialistas que han permitido la investidura de Rajoy no son traidores a nada, sino todo lo contrario: han sido coherentes. Los que han votado no es no a Rajoy valoran más la propia imagen que el servicio debido a sus amos: es una cuestión de estética. La ideología progre no es ya una filosofía, ni una ideología, ni una fe; sino sólo una coartada para defender sus propios privilegios elitistas en una sociedad, como la española, líder europeo en paro, prostitución, alcoholismo, tráfico y consumo de drogas, nula calidad en la enseñanza, fracaso escolar, incremento de la pobreza, desprestigio de la democracia representativa, edén de las castas políticas y pérdida de valores éticos. Son unos inútiles bobos y su antiguo prestigio es irrecuperable. Sus ruinas ideológicas y programáticas se encuentran entre los siguientes postulados, en los que ni creen ni se les cree, porque entran en contradicción con su fundamental fidelidad y defensa del sistema capitalista y de obediencia a los dueños del mundo:
Estos diez puntos destacan las brutales contradicciones insalvables de los progres, los convierten en la izquierda del capital, aliados naturales de la derecha del capital con la que conforman pensamiento y partido único (PP-PSOE), y los alienta a considerarse teatrales competidores de la extrema izquierda del capital (En común-Podemos), a los que intentan entregar la antorcha para continuar la farsa. Porque no se trata de conquistar el Estado, sino de destruirlo.
Agustín Guillamón
Barcelona, octubre 2016
Publicado en catalán en Catalunya núm. 188 (enero 2017)
Read more ... |
Posted: 16 Mar 2018 01:44 PM PDT
La editorial Banderas Negras y Sin Retorno Ediciones, tienen el placer de invitarlos a la presentación del libro Del lado del pueblo: El periplo de los anarquistas venezolanos durante la rebelión popular de 2017, del compañero Rodolfo Montes de Oca, misma que se llevará a cabo el 5 de abril del presente año, a las 19:00 hrs en el foro El Mundano, ubicado en Eje Central No. 130, segundo piso, Ciudad de México.
“Del lado del pueblo: El periplo de los anarquistas venezolanos durante la rebelión popular de 2017, es un texto inédito de Rodolfo Montes de Oca donde aborda la historia reciente del anarquismo venezolano con uno de los hechos políticos-sociales más importante acontecido en este país, por su extensión cronológica, personas involucradas y hechos inéditos. Este escrito está dividido en dos capítulos, el primero de ellos es un detallado relato histórico-jurídico sobre la descomposición del proceso bolivariano durante el gobierno de Nicolás Maduro, que de ser una democracia progresista devino en la primera dictadura latinoamericana del siglo XXI; y el segundo se basa en la participación, límites y contradicciones del movimiento anarquista durante la jornada de desobediencia que vivió el territorio por cuatro meses. Un texto que pone en balanza las actuaciones del movimiento anarquista y abre las compuertas para una necesaria renovación en las ideas y tácticas. Un libro que te hará replantear tu silencio y poca solidaridad con el pueblo venezolano. Es un texto que también deja entrever un estancamiento en la idea libertaria aunado a un movimiento ficticio internacional, compuesto por siglas pomposas y una historia de supuestas glorias pasadas; pero que en el presente es incapaz de entender dinámicas no tradicionales encajadas en autores del siglo pasado, que le hace el juego a la neolengua autoritaria y que demostró ser incapaz de aplicar lo básico del anarquismo que es el apoyo mutuo.”
Banderas Negras
Read more ... |
Posted: 14 Mar 2018 09:42 AM PDT
Cansadas de la normalidad que representa el uso de pieles arrebatadas a los demás animales, y a la contaminación de diversos ecosistemas perjudicando a animales de otras especies y la nuestra (trabajadorxs de estas industrias y habitantes donde se sitúan estas fábricas o talleres artesanales) que esta actividad genera, es que un domingo de febrero decidimos intervenir en aquel centro comercial donde laboran decenas de tiendas de este rubro.
Banderolaso, pancartas, manifiesto, arengas y volantes. La seguridad del lugar pretendió acallar nuestras voces y nuestra indignación, pero no pudieron. Algunas personas se solidarizaban con nuestra lucha, aún siendo parte del consumismo que afecta al planeta y sus habitantes. Mientras otres atinaron a querer silenciarnos por haberles malogrado su momento de tranquilidad en familias y amigas. No faltó aquel heroico agente de seguridad que para recibir la palmada de su patrón explotadora, le arrebató algunos volantes a un compañera como señal de victoria. Y no faltó aquella institución de seguridad de la municipalidad de dicho distrito que junto a sus patrullas intentaron capturar a quienes alzamos nuestras voces al especismo, antropocentrismo y su normalidad. El hostigamiento fue por varias cuadras, pero no se logró concretar su objetivo y salimos todas sin rasguños ni detenidos. El uso de Pieles y su estética son también dominación ¿Qué es la libertad? Algunas entendemos por libertad, a esa instancia donde cada una podamos desenvolvernos de manera autónoma, osea de acuerdo a nuestros propios deseos. Desde luego sin que esto genere daño a otras. Vivir en libertad entendemos no solo se trata de vivir sin jaulas ni delimitaciones físicas como las fronteras. Se trata también de alejar de la mente, aquellos deseos de dominación y por supuesto de no ser parte ejecutora de tales deseos. Se trata del entendimiento hacia una vida sin amas ni esclavas. Vivir en libertad supone volver a ser parte del equilibrio perdido con la naturaleza en el cual todas vivimos, nos relacionamos, nos retroalimentamos y morimos para seguir produciendo vida y equilibrio... Sobre el uso de pieles Lejos estamos de aquellas épocas donde el clima era adverso para nuestras ancestras, y que para sobrevivir se tuvo que recurrir al uso de pieles de otras animales y a una alimentación de origen animal no humana. Oponerme al uso de pieles solo por el grado de violencia que esta representa en su proceso, sería pedir que este proceso sea “más humana” y eso las industrias o quien sea que lo practique lo podrían resolver con más inversión económica y tecnológica. Y ese no es el objetivo, al menos no el mío. Yo deseo la libertad para todas y no solo reformas para mejorar las condiciones de esclavitud, entendiendo la esclavitud como la carencia de libertad del individua que está bajo dominio de otra individuo, y no solo como algo cruel cuando las condiciones son extremas o visibles. ¿ Y las esquimales ?, preguntarán por ahí. Respondo : Las Esquimales son parte de una cultura que tuvo sus inicios hace aproximadamente 4 mil años en el paso del Estrecho de Bering, donde se fueron asentando en esas zonas de bajas temperaturas, adapatando sus cuerpos con el pasar de los años y con la ayuda de la caza que ejercían para sobrevivir: alimentación, vestimenta, construcción de herramientas para caza y hogar. Respecto a las bajas temperaturas. Podría decir que No tiene sentido ya vivir en zonas de temperaturas extremas en las que para no morir de frío se tenga que asesinar a otras animales para usar su piel como abrigo y sus cuerpos como alimento. Esto lo haría claro desde un pensamiento civilizado desde la ciudad, con cierto privilegio de vivir en la ciudad. Enfatizando que yo no viviría donde mi cuerpo no pueda soportar las condiciones climáticas, ya que considero esto como intentar vivir dentro de un volcán y que para lograrlo tenga que recurrir a usar a otrx animal o planta o mineral que me protega del intenso calor que ahí emana. Pero trato de entender que quizás es algo que ciertas tribus esquimales no ha tomado en cuenta y que lejos de cuestionar su modo de vida respecto a las demás especies animales en ese ecosistema extremo, siguen con la misma tradición de cazar para alimentarse y vestirse tal como lo hacían sus ancestras. O talvés yo no entienda lo que ellas piensen, podría ser que ellxs sí se sientan otrxs animales más en ese ecosistema y no animales superiores ahí, por lo menos refiriéndome a las tribus que hasta antes de su contacto con gente civilizada domesticado cazaban solo para sobrevivir y no para comercializar como sé algunos grupos lo hacen ahora. Es a este tipo de "convivencia" al que lanzo mi crítica final antiespecista, al que caza por realzar una especie de supremacía o por motivos económicos (sea usando formas de cautiverio o no) y no a quienes lo hacen por motivos de supervivencia y manteniendo la horizontalidad en todos sus aspectos en ese momento de caza, aceptando también que se puede ser presa cuando se realice la acción de cacería. Resalto también y reconozco que tribus ancestrales (sobre todo las que no han sido domesticadas aún) generan menor impacto en el ecosistema en el que viven distanciándose ampliamente al impacto que generamos nosotrxs las civilizados en las ciudades e indirectamente fuera de las ciudades que son los lugares donde se suele extraer la “materia prima” y donde se suele inclusive verter los desperidicios de nuestro consumismo. El cuestionamiento a su modo de vida, es algo que solo ellxs podrían hacerlo desde sus verdaderas inquietudes y ganas de hacerlo. Y no desde la palabra “evangelizadora” proveniente desde nuestra moral domesticada y domesticadora. Pues con qué cara iríamos a zonas salvajes a difundir el respeto al planeta, si con nuestra presencia en las ciudades hacemos todo lo contrario, sea del grado que sea. Podemos hacer el cuestionamiento en conjunto, eso sí me parece coherente y sincero. "Para el frío en las ciudades" El caso de las ciudades es parte del equilibrio que hemos roto con la naturaleza, consecuencia de la lógica de la propiedad privada que empezó con el comienzo del neolítico que trajo consigo el sedentarismo. Y en las ciudades tampoco hay esa necesidad de usar pieles como abrigo. Es más, las pieles que se usa en su mayoría de casos son por lujo, comodidad, estética, ... ningún motivo vital. En todo caso hay otras formas para apañar el frío en ciertas ciudades, y sin la necesidad de promover el uso del plástico y sus derivados para estos abrigos. Así también está más alcanzable el poder rotar de lugares en temperaturas extremas. Es necesario también resaltar que los climas extremas, al menos en el ahora, son repercusiones de nuestros actos como civilización. Es el intento o la forma de curación que tiene el planeta. Las pieles que se usan son parte de una industria que ya no solo caza a las especies a despellejar, sino que al igual que hace la industria cárnica, ha creado granjas peleteras donde a parte de criar, también se reproducen o mejor dicho violan a esas especies para obtener más crías para su industria. Del número total de pieles arrebatadas a las diversas especies animales, la presencia de granjas peleteras representan el 85% de todo ese mercado. El 60% de las granjas peleteras se encuentra en Europa del Norte, el 10% en Norteamérica, y el resto dispersas por todo el mundo, en países como China, Argentina o Rusia. En España se calcula que hay actualmente alrededor de unas 50 granjas de visones de las 402 que existían en el 2014. Dicha reproducción se hace también usando la biotecnología que mediante la transgenia se elige los mejores genes para modificar tipos de pieles y más resistencia y cantidad de la misma. A las demás animales que se les ve como producto, se les condena a ser más productivas. También se realizan violaciones llamadas “prácticas tecnológicas” como cruzas dirigidas, técnicas de reproducción asistida e inseminación. Impacto ambiental generado por las curtiembres Para el proceso productivo de pieles se usan ingredientes tóxicos, tal es así que veremos la presencia de altas concentraciones de cromo, zinc y plomo en las desembocaduras de los ríos que usan para su industria. Pues para esa industria la gran cantidad de agua es indispensable, millones de litros de agua se utiliza diariamente, que contamina y tira al río. Debido a esta contaminación se detectan casos de metahemoglobinemia en lactantes, un trastorno sanguíneo causado por el consumo prolongado de agua con elevada presencia de nitritos. Es entonces que se empieza a ponerse en duda la calidad del agua de pozo que consume cada pueblo. Recordamos que estos procesos industriales nocivos, no los hacen dentro de zonas Residenciales. El constante peligro que se corre en zonas donde se realizan estas industrias, es incalculable porque los desechos de estas empresas, como se dijo anteriormente, terminan en el río y esto produce no sólo una contaminación del agua sino también del suelo, ya que los químicos que utilizan se infiltran llegando a los sedimentos del río. Pero ahí no termina el alcance nocivo de estas sustancias, ya que debido a las emisiones gaseosas provenientes de la separación del amoniaco y las calderas, esto se propaga por el aire. Es así que se muestran también la proliferación de problemas respiratorios, oftalmológicos y dermatológicos. Como ejemplo de contaminación, colocamos uno de los tantos datos que se pueden obtener en estudios relacionados a contaminación por metales usados en esta industria. En este caso hablaremos del Cromo, cuya concentración natural en sedimentos debe ser menor a 50 o hasta 100 miligramos por kilo (mg/kg). Y cuya concentración hallada en zonas con presencia de industria de curtiembres fué de entre 296 y 3000 miligramos por kilo (mg/kg). Superando más de 30 veces los parámetros correspondientes a zonas no contaminadas. Peces, crustáceos y demás animales que parte de su dieta alimenticia es el cromo, se ven afectadas con estos altos índices de cromo generados por las curtiembres. Esta nocividad también afecta a las otras especies que se alimentan de estas especies primeramente afectadas. Así se extiende la cadena de intoxicación en el medio ambiente y los seres que lo habitan. La sustentabilidad que nos quieren vender como lavado de imagen de las empresas peleteras A través de comerciales nos muestran una serie de propuestas y proyectos llamados “amigables con la naturaleza”, dentro de estos están : -Reducción de las huellas carbón que generan, reducción y no erradicación.. -Reciclaje que perpetúa el consumismo. -Normas estándar que normalizan la contaminación legal y moralmente. -Reducen el uso de pieles en algunos de sus productos y le hacen publicidad para crear una apariencia de consciencia. -Programas asistencialistas en zonas infectadas con sus tóxicos. -Programas de exámanes del agua y sanidad bajo estándares supuestamentes no contaminantes llamados “permisibles”. -Programas de salud y nutrición para apaciguar a las personas infectadas. -Programa de educación y cuidado infantil para evitar denuncias públicas. -Promesas de cuidado laboral con equipamiento de “última generación”. -Tecnificación y emergimiento de la economía en la población, de tal modo que solo importe el dinero y no la salud. -Contratos con algunos miembros de la comunidad, usualmente con los que mejor disposición y poco cuestionamiento tienen. -Uso de materiales con menor efecto contaminante, la industria no puede parar por ese motivo. -Captación de habitantes de la comunidad que contaminan, para sus fábricas. Solo para gente capacitada claro. -La llamada reforestación, que en realidad es plantación de monocultivos pre-destinados al uso en otras industrias. La farsa de la conservación : El caso de la Vicuña en el Perú – Amor a su piel y no al individuo. El número de vicuñas en Los Andes (cuya extensión comprendía varios países) era de aprox. 2 millones de vicuñas durante el Imperio Incaico, que también usaba a esta especie tanto para alimentación como para vestimenta y sus huesos para herramientas. Con la llegada de aquel grupo de colonizadores y posteriormente con la industria, la caza de la vicuña hizo que su número redujera a aproximadamente 10 mil vicuñas. Es entonces que junto con otros conservacionistas, Felipe Benavides (Fundador de la Cárcel Parque de Las Leyendas de San Miguel) planteó la creación de la Reserva Nacional de Pampa Galeras. Para este propósito consiguió la invalorable aportación del presidente de la Sociedad Zoológica de Frankurt, el profesor alemán Bernardo Grzimek, quien gestionó dos millones de dólares -provenientes de la República Federal Alemana- en ayuda técnica para esta llamada “área protegida de vicuñas”, que en realidad era un área de explotación de vicuñas. El establecimiento de esta reserva -dedicada al cuidado, manejo y explotación de este animal silvestre- se concretó con la intervención en la comunidad de Lucanas, que cedió parte de sus tierras con engaños a cambio de recibir asistencia gubernamental. EL PROCESO de la lana virgen (entre otros procesos en la industria de la piel) Las partidas de lana se venden a cooperativas y empresas que separan por lotes y calidades los diferentes vellones. Además de las diferencias en cuanto a razas, la lana de las patas de una oveja es diferente a la de la barriga o lomo. Este sorteo de lanas se realiza a mano normalmente por mujeres. Una vez clasificada, son los lavaderos los encargados de eliminar las impurezas (pastos del campo) y sobre todo grasas que lleva la lana adherida, es la suarda o lanolina. Una vez desprenda esta grasa , la lana estará dispuesta a ser hilada. Tarea que realizan las hilaturas o fábricas de hilado, generalmente a través de máquinas de cardaje de gran volumen. Con este hilo ya se puede tejer y elaborar paños, telas o el producto final, no sin antes pasar por el batanado, proceso mecánico que desordena las fibras de lana a base de fricción física y agua. Por último secado y perchado para sacar el pelo si procede. Y el producto estará listo! Con lo expuesto arriba no pretendo ni creo que todo cambie drásticamente. Pero vale la pena, conocer las raíces del problema para llegar a soluciones sinceras y reales, y no terminemos creando solo parches de un problema que luego se reventará e infectará aún más y empeorará la herida. Lejos estoy de ir por reformas o de apelar a una nueva industria “compasiva” con las demás especies animales y/o el planeta. Pues investigando las supuestas soluciones que hoy en día nos otorgan, lo real es que estas supuestas soluciones terminan siendo la perpetuación del problema que dicen querer arreglar. Como ejemplo de esto doy el caso de la creación de las nuevas energías llamadas “renovables” cuyo propósito dicen es reemplazar a las antiguas energías, pero lo real es que las perpetúan. Basta solo preguntarse ¿de dónde sacarán los materiales para su construcción y el resto del proceso y deshecho?. Esas falsas soluciones debemos dejarlas de lado, investigar antes de aceptarlas. Rechazo todo intento de domesticación, la no libertad y toda reforma que la perpetúa. Un ejemplo de esta estrategia la industria de la carne, para hacerla “más humana” con su nuevo invento de “la carne sintética” donde se sigue usando a las especies animales que se desea relicar su carne en laboratorios. Se podría usar el mismo método respecto al uso de pieles. Así seguirían restringiendo libertades de aquellas especies animales que usan para quitarles su piel. Y por supuesto no sería la solución. Sería seguir perpetuando esa lógica consumista guiado por ese pensamiento que dicta que “podemos y tenemos la potestad de hacer uso de cualquier especie animal o vegetal y del universo mismo para nuestros fines” que nada tienen que ver con equilibrio y supervivencia. En el caso del uso de pieles, sería perpetuar la estética y sus cánones de belleza que genera tanta desigualdad, bullying, enfermedades físicas y mentales, afecta vidas, fomenta y expande la bullimia, la anorexia, la depresión, etc... ¡ Por un mundo de libertad, lejos de la normalidad de la opresión ! LA MISMA LIBERTAD PARA TODAS LAS ESPECIES - AHORA . Read more ... |
Posted: 14 Mar 2018 08:56 AM PDT
Este próximo 19 de marzo tendremos la oportunidad de debatir sobre los vínculos de la ayuda internacional, las ONG y el neocolonialismo. Con la excusa de presentar “Del apoyo mutuo a la solidaridad neoliberal” pretendemos establecer un debate sobre las formas que ha tomado la solidaridad que se mueve bajo los parámetros del neoliberalismo, dedicándole una especial atención, como dijimos, a las nuevas realidades neocoloniales. Este acto tendrá lugar el próximo lunes a las 15 h. en el Aula Social (sótano) de la Facultad de CC. Políticas y Sociología de la UCM. Os recordamos que dicho acto ha sido organizado por la Federación de Estudiantes Libertarios de Madrid y que contará con el autor del libro arriba citado. Para más información sobre ese texto os dejamos un enlace:
Read more ... |
Posted: 14 Mar 2018 06:17 AM PDT
Hoy, martes 13 de marzo la triste noticia del fallecimiento de Eduardo Colombo nos golpea dolorosamente. Con Eduardo no solo desaparece un entrañable y fraternal compañero, sino también un pensador de primerísimo plano y un militante anarquista de inquebrantables convicciones.
Corrían los años cuarenta cuando el joven estudiante Eduardo Colombo se involucró intensamente en el movimiento anarquista de su Argentina natal participando en las luchas anarcosindicalistas de la FORA (Federación Obrera de la Región Argentina), colaborando y asumiendo responsabilidades de dirección en su renombrado periódico “La Protesta”. Ha transcurrido desde entonces un extenso periodo de más de setenta años durante el cual Eduardo Colombo no abandonó ni un solo minuto su temprano e intenso compromiso con “la idea” y con la causa de esa ansiada Revolución Social por la cual bregó toda su vida con inagotable entusiasmo. Medico y psicoanalista, también fue profesor de psicología social en la universidad de Buenos Aires hasta que el golpe militar de 1966 lo expulsó de sus tareas docentes y le obligó pocos años más tarde a buscar asilo en Paris donde llegó con su compañera Heloisa Castellanos en 1970. Allí, pese a las dificultades para reubicarse profesional y socialmente no dudó en involucrarse de inmediato en las actividades del movimiento anarquista en Francia, a la par que estrechaba lazos con la lucha antifranquista del exilio libertario. Su voluntad de acoplar permanentemente pensamiento y acción le llevó a situarse como uno de los teóricos más importantes del anarquismo contemporáneo, a la vez que participaba en decenas de eventos en el plano internacional. Mencionemos como simple botón de muestra de esa incansable actividad internacional su participación como conferenciante en las jornadas libertarias de Barcelona en 1977, su contribución a la organización del extraordinario encuentro anarquista internacional de Venecia en 1984, o sus intervenciones en el encuentro anarquista internacional de Saint-Imier en 2012. Sus numerosos libros y artículos contribuyeron a que fuese permanentemente solicitado para conferenciar, sobre todo en Italia, Grecia, España, Argentina y diversos países latino americanos, fue además uno de los fundadores en 1997 de la revista anarquista de lengua francesa “Réfractions” y uno de sus principales animadores durante dos décadas. Tiempo habrá para detallar más detenidamente su inolvidable figura y sus valiosas aportaciones intelectuales que van más allá del ámbito propiamente anarquista y cubren también el campo del psicoanálisis y de la filosofía, pero no podemos cerrar esta breve reseña de urgencia sin recalcar nuevamente que quien nos ha dejado hoy fue un militante anarquista de incomparable entereza y valía, además de ser una bellísima y entrañable persona.
Tomás Ibáñez
Barcelona
13 de marzo de 2018
Read more ... |
Posted: 14 Mar 2018 03:57 AM PDT
Clara: ¿Te puedes presentar y contarnos un poco lo que te llevó a las las protestas contra el fascismo el pasado 20 de enero de 2017?
Hex: Soy Hex; soy ingeniero en seguridad informática y anarquista y vivo en Seattle. Creo que mucho de lo que ha pasado comenzó antes de la elección de Trump como presidente. Cuando se acercaban las elecciones empezó a ser cada vez más obvio que Trump iba a ganar. La gente no me creía. Pero provengo de un montón de pequeñas ciudades, y la forma en la que Trump habla y se muestra y los valores que proyecta se parecen mucho a algo que reconozco. Es como el sheriff de cualquier ciudad pequeña, como el alcalde de cualquier ciudad pequeña. Y si miramos a las elecciones en ciudades pequeñas, muchos de ellos, no hay ninguna prueba de que sean demócratas, incluso si creen en este sistema. Así que reconocí el carácter, reconozco quién es y cómo se proyecta a sí mismo. Y eso es algo que funciona en muchas partes de EEUU – en los EEUU rurales, en los lugares en los que he estado y de donde vengo. Así que me pareció perfectamente posible que fuera a ganar.
Así que en los meses previos a las elecciones, empecé a reunirme con gente para contactar y organizarnos. Y me encontré con un grupo de otros compañeros que estaban conversando sobre Rojava y lo que está pasando allí. Y si queríamos un modelo para cómo lidiar con el autoritarismo en crisis, es muy difícil encontrar un ejemplo mejor. Creo, que lo que está pasando en Rojava ahora mismo..., hay un montón de lecciones que podemos aprender de este proceso. Así que la gente que ya estaba pensando sobre todo esto realmente eran las primeras personas a las que se les podría comentar. Así que nos juntamos un pequeño grupo de personas, y una de las primeras cosas que pasaron, en seguida, fue este evento: iba a haber una charla de Milo Yiannopoulos en el campus de la Universidad de Washington en Seattle, la noche de la investidura, el 20 de enero de 2017. Aparentemente no creían que iban a ganar, pensaban que Trump no iba a ganar – incluso los Republicanos de la Universidad – así que esto era un gran ¡Jódete! A Hillary Clinton. Pero claro que ganó. Así que para nosotras, para las que estábamos desde hace tiempo organizando movidas de resistencia antifascistas, era como si..., este es un momento perfecto para que los fascistas se movilicen y organicen un mitin. Así que avisamos en la Universidad, pero la administración no creía que era un ponente que tenía un discurso de odio –y creo que todavía no lo creen. Así que los meses previos, un montón de grupos diferentes se estaban organizando y tratando de hacer cosas. Había una llamada a protestar en persona, estar allí. Al mismo tiempo, había otra manifestación que se estaba llevando a cabo para resistirse que estaba organizada por gente universitaria de izquierdas o progresistas. Pero nos parecía algo un poco tonto que hubiera una manifestación oponiéndose al fascismo cuando un verdadero fascista estaba dando una charla en nuestra ciudad a la que podíamos ir directamente a oponernos. Así que estos son, más o menos, los antecedentes. La semana previa al evento yo estaba en Hawaii para el funeral de mi abuela. Así que estaba allí, en pleno duelo, celebrando su vida y todo eso. Y volví a casa para resolver de alguna manera todo esto y la pérdida de conexión con un lugar y un montón de sentimientos diferentes, para llegar inmediatamente a una catástrofe total. Llegamos tarde a casa la noche anterior, y fuimos directos a la “catástrofe” – que era exactamente lo que tenía escrito en el calendario para el 20 de enero: “CATÁSTROFE”. Acabó siendo un poco profético. Clara: ¿Puedes describir brevemente qué ocurrió el 20 de enero del pasado año en Seattle? Hex: Pues el 20 de enero había un evento al cual esperábamos que acudieran nazis. Incluso discutimos la posibilidad de que hubiera nazis con cuchillos o pistolas. Había habido, previamente, un evento en junio, el año anterior, en junio de 2016 en California, en Sacramento; había un mitin nazi y los nazis apuñalaron a varios contramanifestantes. Así que este era el contexto que teníamos para este evento. Pensábamos, vale, así que los nazis se han estado organizando, asesinando gente, apuñalando a gente, etc, etc. Sabemos que esto está ocurriendo; lo sabíamos antes del 20 de enero, antes de lo que ocurrió en Charlottesville, etc. Hemos sabido de la amenaza nazi durante un tiempo bastante largo ya, y esto era básicamente más de lo mismo y eso es lo que teníamos en mente para este evento. Así que un montón de gente apareció en bloque, así que la gente llevaba la cara tapada, porque a Milo Yiannopoulos se le conoce por atacar a la gente y por hacerle doxxing**. Por señalar a gente e intentar que otras personas les asalten físicamente. Así que es físicamente inseguro estar en una resistencia a ese evento sin taparse la cara. Yo en ese momento no me estaba preocupando mucho por ello. Así que esa noche pasaron muchas cosas. Había una persona que se le había visto repetidamente en peleas –está grabado en vídeo en muchos lugares, peleándose con otra gente. Así que vi a esta persona, que había estado peleándose con un montón de gente, echando gas pimienta con un spray en la cara de algunos pacifistas noviolentos (no sólo noviolentos, sino también gentes pacifistas). Y cuando paré a esta persona, y les dije que me dieran el spray de gas pimienta y que entonces les dejaría marchar –este es Mark Hokoana– se lo dije, dame el spray de gas pimienta, y te dejaré marchar– su compañera sacó una pistola y me disparó. Esto fue justo después de que yo había conseguido bajar la tensión en otra situación. Dos personas habían tenido un desacuerdo muy fuerte y me metí en medio. Así que Elizabeth Hokoana me disparó, y entonces los dos huyeron del lugar. La policía no acordonó el lugar, no intentaron proteger la escena del crimen, no llevaron a cabo el protocolo de cuando hay un disparo de arma de fuego, por el que deberían haber acordonado la zona. Ellos no sabían que los Hokoana se habían escapado –y si lo sabían, entonces es peor, porque les dejaron escapar, etc. Y a partir de ahí, he hablado mucho sobre las cosas que siguieron a ese momento. Quiero reafirmar que por mí, por mi experiencia. Yo estaba en el suelo, no estaba totalmente seguro de si iba a sobrevivir o no. Pero aparte de esto –había todavía un convencimiento de que si me asesinaban allí, que habría algo que impulsaría a la gente, que despertaría a la gente. Y estas son algunas de las cosas que me estaban pasando por la cabeza, que algunos de mis compañeros llevarían esto consigo. Así que por mí, también estaba intentando aceptarlo. Pero un montón de gente, como mi compañera, por ejemplo, tuvieron una experiencia muy diferente. Yo soporto económicamente a mi compañera, lo que significa que, si hubiera muerto, habría sido muy duro para ella. Y estaba mi experiencia y también el impacto en mi compañera. Estaba también la experiencia de las auxiliares de emergencias que vinieron a salvarme la vida, que han tenido muchas experiencias traumáticas anteriormente que en conjunto comprende el Síndrome de Estrés Post Traumático que todos tienen. La vida tiene estas cosas extrañas, de alguna manera todo fue muy fuerte para todas nosotras, pero también fue muy perjudicial para todas nosotras. Y otra vez, me han entrevistado bastantes personas, he hablado de todo esto con mucha gente, pero una de las cosas que se ha repetido en estas conversaciones es que me preguntan por mi experiencia y qué es lo que yo quiero, lo que yo siento, y todo eso, y lo que yo entiendo por justicia, cuál es el significado que yo le doy a la palabra justicia. Y que un montón de gente no han hablado sobre mi pareja o con ella, o con mi suegra que rápidamente salió a cuidarme y me ayudó a navegar el sistema médico, ya que yo estaba supercolocado de opiáceos y trataba de darme cuenta de qué partes de mi cuerpo me habían extirpado y qué significado tenía esto. O hablar sobre la experiencia de las auxiliares de emergencias o la otra gente de los grupos de apoyo. No era sólo yo; era toda la comunidad entera y toda nuestra comunidad activista en Seattle ha sido traumatizada debido a este disparo. Y no solo en Seattle: en muchos sitios, por todo EEUU. Y en Seattle gran parte de nuestra comunidad respondió apoyando a mi compañera, apoyándome a mí, apoyándonos y saliendo adelante incluso enfrentándose al terror absoluto. Yo he contado mi historia, y creo que lo realmente interesante son algunas de las historias sobre las que no hemos hablado y que yo no puedo contar. Clara: En el periodo que siguió al disparo que te hicieron, afirmaste públicamente que te gustaría ver un abordaje de justicia restaurativa para dar una respuesta a los Hokoana. Ha habido mucha controversia en torno a esto, incluso algunas críticas de anarquistas que han rebatido que no podría tener sentido en esta situación ni justicia restaurativa ni respuestas punitivas desde el Estado. Un año después del disparo, ¿cómo ha evolucionado tu perspectiva sobre las posibilidades y límites de la justicia restaurativa? ¿Qué sugieres a la gente que está intentando abordar el daño sin el recurso al Estado y a las prisiones? Hex: Esa es una pregunta difícil. Quiero enfrentar el hecho de que, creo que es muy importante hablar sobre cómo hacernos responsables ante nuestros compañeros que están en prisión. Hasta el punto de que perpetuamos un sistema punitivo como si fuera justicia, cuanto más perpetuamos y apoyamos la narrativa de que la justicia punitiva, el castigo, es de hecho justicia, más validamos la narrativa que soporta y refuerza el sistema penal. Si somos responsables ante nuestros compañeros que están en prisión, entonces tenemos que hacer todo lo que podamos para confrontar la narrativa que los mantiene encarcelados, que los mantiene en este sistema de tortura. Sólo desde una perspectiva de justicia. Pero, ¿qué es justicia? Creo que es un tema que verdaderamente tenemos que abordar y hablar sobre ello. ¿Es justicia que alguien, que de otra manera, si no me hubiera disparado, sea totalmente invisible? –Elisabet Hokoana podría ir su vida entera a la cárcel sin haber visto más allá de su familia y amigos y su grupo social, etc. Así que ¿es verdadera justicia castigar a alguien por estar tan cabreado que intenta atacar de la manera que le es posible? Porque yo he estado en esa situación. Porque yo lo comprendo. Crecí en caravanas y aparcamientos de caravanas. Nunca pensé que estaría donde estoy. Trabajo en seguridad informática; gano bastante dinero. Nunca pensé que estaría aquí. Entiendo perfectamente de dónde vienen los Hokoana, porque sé lo que es sentirse invisible. Sé lo que es sentirse sin esperanza y que no hay manera alguna de hacer algo que pueda cambiar algo. Y solamente por la suerte pude salir de todo eso. Y por haber tenido influencias políticas muy diferentes, obviamente, de las que ellos han tenido, no hay ninguna razón por la que yo no podría haber salido políticamente como ellos. Nuestros intereses están, de alguna manera, alineados: que no quiero, de ninguna manera, que nadie pase por lo que yo tuve que pasar. No quiero que ninguno de mis amigos que todavía están en esas comunidades sigan siendo invisibles, y sientan que no pueden tener ningún impacto más grande en la sociedad. Así que, ¿es justicia castigar a alguien por haber sido conducido lisa y llanamente hacia la violencia? No creo que eso sea justicia. ¿Y es justicia castigar a la gente por hacer lo mismo que hace la policía con tanta frecuencia? Para dar algo de contexto, el juicio todavía no ha tenido lugar. Recientemente ha habido una vista para los Hokoana. Hubo una continuación, así que ha pasado ya un año, que este sistema que supuestamente nos da “justicia” está prolongando este peso que ha estado rondando sobre mi cabeza durante un tiempo y obviamente está rondando sus cabezas también. Incluso si el castigo fuera justicia, serían unos 12 años en la cárcel, que es lo que Elizabeth posiblemente está enfrentando, ¿sería lo mismo que me abran en canal y perder parte de mis intestinos y otras cosas, o estar a punto de morir? ¿Es esto lo mismo? ¿Hay alguna manera en la cual esto podría ser lo mismo? Todo esto es muy absurdo. Así que la justicia basada en el castigo, la justicia punitiva, no hace sentirse seguro a nadie. No hace que mis compañeros estén más seguros. Porque en último término, es el sistema legal, es la policía, es la misma gente que los está amenazando ahora mismo, los que hicieron esa violencia posible. Los Hokoana decidieron matar a alguien con el convencimiento de que estaban haciendo algo que sería considerado legal. Decidieron matar a alguien con el convencimiento de que crearían una situación en la que estarían actuando “en defensa propia” y que la policía les protegería. Así que es de hecho la policía y el sistema legal lo que hizo que esto fuera posible, y les empujó hacia la violencia. Y desde luego, está el sistema de propaganda de extrema derecha que condujo a esto. Así que yo, realmente, fundamentalmente rechazo todo esto y digo, eh, ¿qué estamos haciendo para que el estado asuma su responsabilidad? ¿Qué estamos haciendo para que la Universidad asuma su responsabilidad? ¿Qué estamos haciendo para que asuma su responsabilidad esa maquinaria de propaganda de extrema derecha, la maquinaria que le dice a la gente cosas tan absurdas como que los progresistas está diseccionando bebés y vendiéndolos en el mercado negro, y que está ocurriendo una gran revolución bolchevique? La respuesta es: nada, obviamente. Eso no es justicia. Así que el único marco en el cual podemos aproximarnos a la justicia, desde mi perspectiva, es la justicia restaurativa. Mientras sacamos estas cuestiones, socavamos la narrativa que soporta el sistema penal, y hasta cierto punto, intentamos apoyar a nuestros compañeros que están en la cárcel. Y eso es. Esto es lo mejor que puedo hacer. Una de las cosas sobre las que la gente ha estado pensando y hablando es que cuando tu te enfrentas a un fascista –cuando te enfrentas a alguien que es lisa y llanamente un atacante al que no le importan realmente nuestras normas sociales o de justicia –¿es posible que funcione la justicia restaurativa? No tengo una respuesta a esa pregunta, no lo sé. Un preso había escrito en respuesta a un artículo en Fifth estate, estaba leyendo algunas de estas respuestas de algunos presos, y su respuesta, lisa y llanamente era: disparad a los fascistas. (Obviamente estoy parafraseando un poco). Que a veces es necesario usar la violencia para protegernos. No estoy en desacuerdo con esto. En mi caso, he tenido una posición muy especial, que mi privilegio me permite responder de una manera noviolenta. Puedo exigir compasión, porque a mí no me van va a eliminar. Si no fuera un privilegiado –o sea, si no pudiera contratar a un abogado y trabajar junto a un montón de compañeros para cambiar la narrativa que se hace sobre el caso y cambiar la forma en que la gente ve ciertas cosas– creo que incluso pudiera ocurrir que se le retiraran los cargos a los Hokoana. Si yo no fuera un blanco de clase media, se podrían creer la declaración de legítima defensa y quitarles los cargos. Pero es mi privilegio el que ha hecho posible que yo pueda decir que creo en la compasión, que creo en reconocer de dónde vienen estos señores; que estoy tratando de criticar el sistema penal; que tengo esta plataforma desde la cual puedo trabajar, e incluso hablar. No creo que todo el mundo tenga lo que yo tengo. Y si no lo tienes, haz lo que a ti te sirva. La respuesta que venga de tu parte será la respuesta correcta. No creo que pudiera hacer lo mismo ahora. He tenido la experiencia de un trauma muy intenso. Mi habilidad para no responder de manera noviolenta, para rebajar la tensión y poner mi cuerpo en medio, y todo esto: se fue. Ya no puedo hacer eso y puede que nunca pueda volver a hacerlo. Así que pienso que es muy importante para mí usar la plataforma que tengo de la manera que lo hice debido a todos esos factores. No estoy diciendo que esta sea la estrategia correcta de salir adelante. No lo es. Y lo que quiero decir no es: “así es la manera en la que haré las cosas de ahora en adelante, hacedme caso.” Esa no es una manera anarquista de hacer las cosas, ¿no? Clara: Lo que estabas diciendo me trae a la cabeza como una de las cosas más sorprendentes para mí y para otras anarquistas que hemos seguido tu caso es el sentido de compasión y humanidad compartida que has dirigido hacia la persona que te disparó. Eso es fascinante, en parte porque contradice una cierta estética antifa que realmente glorifica los ataques físicos contra los fascistas. Veo esto como una parte de lo que podríamos llamar una fetichización más amplia de la violencia revolucionaria; vemos esto expresado estos días un poco por todas partes desde fotos de coches de policía ardiendo a imágenes de armas o el meme del puñetazo a Richard Spencer. No te quiero preguntar sobre la violencia vs. noviolencia que es un debate estéril cuyos términos los anarquistas normalmente rechazan. Pero poniendo a un lado discusiones de naturaleza táctica, estoy interesado en cómo tu experiencia tan cercana a la muerte a manos de un fascista ha participado en tu perspectiva de las maneras en las que anarquistas y antifascistas hablan sobre la violencia, y el lugar que tiene la empatía o la compasión por nuestros enemigos en nuestra cultura de resistencia. Hex: Este es el momento donde creo que esto se vuelve bastante complicado. Hice una entrevista hace un tiempo con KUOW sobre dar puñetazos a los nazis. Había un tipo nazi que vino al WestLake Center, que es un área del centro de Seattle, que tenía un brazalete nazi. Estoy seguro de que todo el mundo ha visto el vídeo: al nazi le dan para el pelo. Y entonces yo defendí esta acción. Este acto específico, esta acción específica, lo dejé claro: podría haber intentado hacer algo de manera diferente, pero no soy la persona que estaba allí y no creo que esté bien condenar a la persona que estaba allí por sus acciones, especialmente basándonos en lo que sabemos de lo que ha ocurrido. Así que este nazi aparece y dice un montón de cosas racistas (como hacen los nazis). Creo que lo que pasó fue, le tiró un plátano a un chico negro y dijo algo sobre que este chico era un simio o algo así, Así que el chico respondió dándole un puñetazo. ¡Esto es totalmente razonable! Es una respuesta completamente razonable. Así que, lisa y llanamente, probablemente no es lo que yo habría hecho, pero yo no soy esa persona. Así que, a la vez, yo diría que hay espacio para reconocer que la violencia es necesaria en ciertos momentos. Al mismo tiempo, estoy empezando a darme cuenta de lo patriarcal que es todo esto –que salir y pegar a nazis no siempre podría serlo– podría estar inspirado en algunos de los mismos sistemas de opresión a los que nos estamos oponiendo. Y creo que es muy importante que nos demos cuenta de ello. Y ahora es cuando voy a decir lo verdaderamente controvertido. Muchos de estos nazis o lo que sean, fascistas en general: mucho de esto viene de un profundo odio hacia sí mismos. Hay algo profundamente patético. Miro a Trump y, lo primero que me sale es, que le den a este tipo, no? Pero si lo miras más atentamente hay algo increíblemente triste y patético. Se ve a sí mismo como ese tipo grande y poderoso –o al menos así es como trata de proyectar su imagen– pero la inseguridad es taaaan obvia. Tiene que estar todo el tiempo fanfarroneando para sentirse bien o para lo que sea. Y esto traiciona lo profundamente triste y patético que es. Cree que es un mujeriego, pero realmente está jodido porque lo que pasa es que es un depredador sexual que ni siquiera entiende su posición. Y ahí está la cosa: sí, hay tantas partes de esta masculinidad tóxica, él solamente es una manifestación de ella. Pero también viene de algún tipo de autodesprecio triste y patético. Y, no sé; creo que lo que deberíamos hacer, cueste lo que cueste, es defendernos. Pero, en último término, el sistema que queremos construir –el sistema que creo que queremos construir– es un sistema compasivo, y un sistema que sea mejor para todo el mundo, incluso para los fascistas. Que ellos deberían reconocer que sí, que queremos un mundo mejor, de hecho, y que va ser mejor para todas. Una de las cosas de las que no solemos hablar es que el patriarcado es antihombres, que es dañino para los hombres también; que la supremacía blanca, el racismo, es perjudicial para cualquier grupo imaginario incluido en esta supremacía. Que todos los sistemas de opresión son perjudiciales incluso para aquellos que se benefician de ellos. Y que creo que es una cosa sobre la que tenemos que pensar y buscar la manera de hablar más sobre ello. Esta es solamente mi perspectiva, y no sé hasta qué punto está influenciada por mi experiencia de privilegio: que tengo espacio para poder decir que deberíamos hablarle a la gente, porque esto no se trata de mi vida. Quiero decir, sí que se trataba de mi vida pues estuve a punto de perderla, pero ahora ya no. Y creo que parte de lo que he intentado hacer es intentar ser influenciado por las personas que son blanco del sistema capitalista, y las que son blanco de la supremacía blanca, etc. Así que algunas de las cosas sobre las que hablo en términos de justicia restaurativa e intento recalcarlo lo saqué directamente de la campaña No New Youth Jail (No Más Jóvenes en la Cárcel), que es: hay una cárcel para niños que se está construyendo aquí, en Seattle, a la que la gente se está resistiendo. Y algunas de las personas que están resistiéndose son jóvenes de color. Block the Bunker (Bloquea el Bunker) es otra campaña relacionada; estas dos campañas contra la policía del estado y la expansión de la policía del estado, y hasta cierto punto me radicalizaron más. Así que, entonces, mi respuesta ha estado influenciada por estas dos campañas. Y creo que, probablemente, hay un montón de gente ahora mismo que están hablando sobre cómo reaccionar correctamente. Creo que quizás una de las reacciones correctas es una de las cosas que realmente tenemos que hacer, es mirarnos a nosotras mismas y pensar en serio sobre las maneras en las cuales, como ya dije, nuestras reacciones están influenciadas por el patriarcado y los sistemas históricos de violencia. Y las formas en que podemos confrontar esos sistemas de violencia, a través de cosas como la compasión a través de la sanación. Quizás necesitamos sanarnos a nosotras mismas, quizás necesitamos mirarnos a nosotras mismas y buscar las maneras en las cuales podemos reaccionar de manera más abierta y efectiva, y quizás eso requiere que nos sanemos a nosotras mismas y escuchemos a la gente que no está diciendo: ¡vamos a salir a la calle! O ¡vamos a atacar a los fascistas! O cosas del estilo. No me llegué a dar perfecta cuenta de la intensidad –no entendía completamente el Síndrome de Estrés Post Traumático antes de esto, todavía no lo llego a entender completamente– y cómo eso guió parte de mi activismo. Y cómo me radicalizó y quizás me nubló el juicio en ciertos momentos. Mi compañera me dijo hace un rato que el rollo “vamos a luchar en las calles”, “expongámonos a la violencia”, “vamos a que nos hieran”, el abordarlo en forma de confrontación que nos pone en peligro: es muy fácil glorificar a la gente herida, y además suele pasar. Pero también hay otra gente. Hay un montón de personas cuidadoras a las que se suprime, en esa narrativa confrontativa, en esa narrativa de los héroes que hemos perpetuado culturalmente, en la cual hay una persona o un grupo de personas que, ellas solas, van a salvar el mundo. Esta es una narrativa muy común: es una cosa muy común y necesariamente suprime a un montón de gente que hace mucho trabajo. La narrativa del héroe, en cierta manera, es una narrativa muy patriarcal. Y las maneras en las que glorificamos la violencia, las maneras en las que glorificamos ciertos tipos de acción sobre otros, las maneras en las que glorificamos la cosas visibles sobre las invisibles, confrontación versus sanación, confrontación versus construcción de comunidad, acciones personales e interpersonales. Todo el conjunto es patriarcal: es algo que tenemos que enfrentar. Y para mí, estoy intentando, hacer este año que sea un año de sanación en la medida de lo posible. Mi compañera y yo estamos intentando que sea nuestro año de la sanación. Creo que quizás esa es parte del trabajo que de verdad tenemos que hacer y sobre el que tenemos que estar pensando. Porque hemos estado en este bucle de acción-reacción durante demasiado tiempo. Quizás esto no sea la respuesta, pero creo que ayudará. Las maneras en las cuales reaccionamos este año –o el año pasado–, las formas en las cuales respondimos a la violencia fascista, a la aparición de los fascistas, creo que les obligó a dar un paso atrás, creo que cambió el discurso, creo que se hicieron un montón de cosas bien, pero puede que no nos deje superar el ciclo de auge y caída del fascismo. Queremos salir de este bucle, queremos algo mejor. Y quizás ahora es el momento de darse cuenta de qué es lo mejor que se puede hacer. Quizás sea el sanarse y fijarse en todas las cosas que son invisibles, y darse cuenta de que son cosas importantes y hacerlas visibles. Clara: Hablando de sanación, está claro que el año 2017 ha sido un año bastante traumático para muchas anarquistas: hemos visto muchas detenciones, represión estatal, comparecencias ante un Grand Jury**, violencia fascista, etc. Está claro que el estado y los fascistas están intentando usar el terror para mantenernos inmovilizados. Has sobrevivido a una de los ejemplos más intensos de violencia represiva del pasado año, y aun así te has mantenido activo y seguido con tus compromisos políticos y has rechazado la intimidación. ¿Puedes ofrecernos algún conocimiento o sugerencia para la gente que está luchando por recuperarse de lo que han experimentado y continuar activas en la resistencia? Hex: Sí, creo que esto es algo muy importante. Primero, ¿qué significa activo? Sólo vemos como “activas” algunas cosas: hablar en público o trabajar en organización. Creo que una de las mejores cosas que he hecho en términos de apoyar a nuestra comunidad y apoyar la continuación de algunas cosas a las que ayudé a organizar es tomar un poco de distancia. Recientemente he tomado distancia de un montón de temas organizativos, y creo que eso está muy bien; creo que esto es muy importante. Nos mantuvimos muy muy activos y continuamos la lucha, no porque tuviéramos un gran secreto o tuviéramos alguna clase de secreto o alguna clase de deseo de enseñar a los fascistas que no nos echaríamos para atrás. Y esto es porque estábamos muertos de miedo. Fue porque teníamos miedo, estábamos acojonados con la posibilidad de morir. Que estábamos enfrentándonos a que nos hicieran doxxing** y amenazas de muerte y todo tipo de cosas. Y eso ayudó a solidificar nuestra comunidad, nos mostró quién era capaz de mantenerse y quién debía echarse a un lado. Y gracias a esto ocurrieron un montón de cosas. Todos nosotros estamos traumatizados. Yo no sé todo lo que salió de los que estamos traumatizados siguiendo con nuestro trabajo, no sé si todo eso estuvo bien... Y quizás lo que estamos diciendo –oh, nos mantuvimos activos y hicimos todo esto. Sí, estuvo bien, todo lo que evitamos– si no hubiéramos hecho esto, si no hubiéramos continuado luchando, si no hubiéramos salido a oponernos a los Patriot Prayer** y otros grupos como este, si no hubiéramos resistido el embate. Pero yo no pude dejar de estar involucrado. Y lo intenté. Intenté varias veces echarme a un lado y dejarme sanar, Y dediqué mucho tiempo retraumatizándome. Como..., sabes..., antes de que dieran el puñetazo al nazi, estábamos en un canal de internet mirando dónde estaba y dónde iba y lo que estaba haciendo. Así que durante un día completo –perdí un día de vacaciones, y estaba pensando, tengo que relajarme, estoy intentando parar, no hacer nada, sanarme, y hacer todas estas cosas. Y a la vez estaba en un chat donde la gente decía: estamos siguiendo la localización de este nazi, sólo para estar seguros de que no hace nada. Le vamos a vigilar y estar alerta. Así que de alguna manera me di cuenta de todo esto y estaba acojonado con que alguno de mis amigos sufriera un disparo – que le hicieran lo mismo que a mí, que tratara de provocar una pelea y entonces sacara una pistola. (Y aún hoy no me creo que no llevara un arma; solo creo que le tumbaron de un puñetazo antes de que pudiera sacarla). Así que intenté echarme a un lado, pero no podía. Y así hasta ahora, que he tenido un montón de amigos diciéndome que está bien, que he sido capaz de hacerlo. Y una de las cosas que es importante que nosotros como anarquistas enfrentemos, como antifascistas, es que la sanación también es resistencia. No solemos hablar de la sanación de la comunidad como acción antifascista. No solemos hablar de cómo afrontamos el trauma como acción antifascista. Pero debería ser una de las acciones más importantes que tenemos que llevar a cabo. Así que esas son algunas de las cosas que me llevo de todo lo que ha pasado. Así que parte de ello es, no te sientas culpable por tomarte un descanso, en la medida de tus posibilidades. Y hablemos realmente del hecho de que apoyar a los prisioneros es importante, y que el apoyo a la gente que está sufriendo la represión es importante. Esto es acción; es acción invisibilizada. Salir a la calle y marchar en una manifestación es una cosa, y está bien, y algunas veces es super útil. Pero apoyando a la gente que ha sido detenida en esas manifestaciones es increíblemente importante. Apoyar a la gente que detienen por robar en una tienda, ¿sabes? No sé, sólo es un pensamiento, todavía estoy intentando entenderlo. Y todos deberíamos hacerlo. Clara: ya has tocado este tema de manera superficial, pero ¿tienes algún pensamiento más sobre en qué es lo que quisieras que las anarquistas y antifascistas nos enfocáramos en nuestra resistencia en 2018? Hex: Escuchar a toda esa gente que fue socializada como mujer, principalmente. Escuchar a la gente a la que se le ha enseñado culturalmente que está bien sanarse o a los que entienden que hay algo más que simplemente pelear. Esto es algo muy importante. Y otra cosa es otra gente, que fue socializada como hombre, diciéndome que está bien, repitiéndome lo que otra gente ya me había dicho. Porque todas nosotras –sin importar cuánto hemos intentado desprendernos de nuestra opresión internalizada, todas lo tenemos, todas estamos intentando superarlo, y a veces ayuda mucho que gente que se presentan como hombres como yo que gente socializada como hombre me diga que pare, que está bien que pare para sanarme. Creo que esto de decir a los demás que pueden parar, diciendo a los demás que está bien y abriéndose y hablando las cosas y llorando y todo eso. Hay un montón de cosas que todos estamos intentando superar. Creo que una de las cosas que fue muy útil fue una persona que estuvo hablando sobre como algunas comunidades de activistas aúnan esfuerzos para superar el trauma y el síndrome de estrés post traumático. Principalmente lo que decía es que la gente ya estaba traumatizada con anterioridad, mucha gente activista, y eso de alguna manera nos ha empujado a la acción política o apolítica o lo que sea que estamos haciendo. Y todas esas acciones nos han retraumatizado. Podríamos tener traumas preexistentes, y entonces vamos al espacio activista y los policías nos lanzan pelotas de goma o nos disparan o lo que sea. Es muy difícil para nosotras ser capaces de integrar que el concepto de sanación es parte de lo que estamos haciendo, es parte del mundo que intentamos construir. Lugares donde esté bien sanarse. Me parece que a veces replicamos el capitalismo en las maneras como concebimos el activismo –utilizo la palabra activismo; la gente puede usar cualquier otra palabra, no importa. Me parece que replicamos el capitalismo en nuestros espacios anarquistas, en lo que hablamos, en lo que pensamos: ¿qué resultados estamos obteniendo? ¿Qué estamos haciendo que sea visible? ¿Cómo estamos resistiendo esto? Y eso es en lo que nos estamos concentrando, eso es lo que miramos y así es como medimos nuestros éxitos. Pero no hablamos mucho de cuanto tiempo nos tomamos para sanarnos. Fui a un taller sobre sanación comunitaria, y hablando sobre ello y escuchando me hizo pensar de verdad. La persona que lo estaba dinamizando hablaba de cómo externalizamos nuestra sanación; no es parte de todo el proceso en conjunto. No es una acción; no es una manifestación, no es un mitin, así que no es importante. No es visible, así que no es importante. Simplemente, escuchando esto y darse cuenta de que sí que es importante, que todas estamos super traumatizadas, y que quizá podamos hacer cosas mejores –quizá podemos construir el mundo que queremos vivir– quizá incluso podemos imaginar el mundo que queremos vivir una vez que estamos realmente sanando, una vez que estamos realmente cuidando a las demás y a nosotras mismas. Y ¿qué podría ser más un reflejo del mundo que queremos construir más que un mundo que acepta que somos humanos? Intentando resolver como vamos a conseguir este mundo que queremos construir, y simplemente hacerlo, existir, tratándonos a nosotras mismas como personas. Me gustaría vernos que de hecho estuviéramos dando ese paso atrás y mirar todo lo que hemos hecho y darnos cuenta de cuanto hemos cambiado las cosas, y apreciar nuestro trabajo y darnos cuenta de que está bien sanarse. Todavía tenemos mucho que hacer, todavía tenemos un largo camino por recorrer. Pero quizás, podemos parar y apreciar por un segundo lo que hemos hecho, y aceptar que quizá nos da un tiempo para apreciar, y tomarnos un tiempo para sanarnos, para reflexionar, y para imaginar un mundo que no es tan terrorífico como el que estamos experimentando. Aun así es terrorífico. Pero conseguimos hacerles retroceder un poco, y eso es mucho. Me gustaría que al comienzo de la reflexión sobre lo que estamos haciendo, de lo que hemos hecho y de lo que podemos hacer, reconozcamos nuestro potencial para hacer las cosas diferentes de verdad. Sí, eso creo que es. Clara: Hex, muchas gracias por hablar con nosotras. Hex: ¡Sí! ¡Encantado de hacerlo! Notas: Doxxing: exponer públicamente el nombre real o la dirección de una persona que intentaba que fuera privados en internet. Milo Yiannopoulos es conocido en EEUU por hacer doxxing contra activistas de izquierda intentando conseguir que alguien los agreda físicamente. Grand Jury: En el sistema legal estadounidense, un grand jury es un jurado de consulta que decide si debe acusarse a una persona de un delito y llevarla a juicio. Este jurado está compuesto por un número de miembros que oscila entre doce y veintitrés, y normalmente llevan a cabo sus reuniones en secreto. El grand jury tiene autoridad para citar a testigos a prestar declaración. Patriot Prayer: grupo derechista de Portland (Oregon) en EEUU. Patriot Prayer se describe a sí mismo como abogados de la libertad de expresión y opuestos al exceso de gobierno. El grupo ha organizado mitines pro-Trump y otras protestas en zonas predominantemente progresistas en las cuales se han encontrado con grandes cantidades de contramanifestantes. El grupo está relacionado con el Partido Republicano y con grupos ultraderechistas como The Proud Boys (fundado por Gavin McInnes a su vez cofundador del grupo Vice Media).
Fuente: Briega
Read more ... |
Posted: 13 Mar 2018 11:14 AM PDT
Hemos pasado hace pocos días por una huelga feminista y me gustaría poder aportar algunas reflexiones a los planteamientos de esta. Yo he hecho huelga, porque considero que todo lo que sea frenar este sistema productivo mortífero en el que vivimos, respirar por un día más allá del trabajo asalariado que ahoga la vida, salir a la calle para juntarnos con quien tiene disponibilidad para vivir, es positivo. Considero positivo parar, salir a la calle con nuestros niños, nuestros familiares, parejas, amigos y amigas, mostrar que nos cuidamos juntas, desprivatizar la vida y los cuidados.
Me preocupa la desvalorización de los cuidados y del ámbito doméstico, que se diga que el único problema es el reparto del trabajo a casa1; considero que es una anomalía histórica el hecho de que los cuidados estén privatizados en el familia nuclear; considero un despropósito que las asuman mujeres u hombres encerrados en casa, que las asuman funcionarias estatales (ley de dependencia), así como profesionales plegados a las demandas del mercado de las necesidades que este propio sistema impone (lo que nos provee con una mano nos lo desprovee por la otra). No estoy de acuerdo con la mayoría de planteamientos de la huelga. Por un lado algunos los entiendo, por el contexto histórico y cultural en el que nos encontramos en el occidente capitalista, y cada vez más en todos los estados y territorios integrados en el orden mundial actual. En este contexto a las mujeres sólo nos queda llorar, porque en el marco de la modernidad capitalista nunca podremos alcanzar la igualdad2, y paradójicamente ésta se considera el bien más preciado por el que luchar. Se considera que si fuéramos iguales habría menos violencia contra las mujeres y que lograríamos sociedades más justas. Pero esta premisa no se puede demostrar, pues los países paladines de la igualdad (típicamente los países nórdicos) no son ejemplo de nada en este sentido3. La mayoría de feminismos derivan de este hecho la conclusión de que la dominación de género debe ser algo más antiguo y primordial, si es que con todos los esfuerzos que se hacen por la igualdad, ésta no se elimina4. Y si el problema de todo ello fuera la manera de mirar el problema? En las sociedades pre-modernas no existía la igualdad, existía la equidad. Todas las culturas y sociedades del mundo han hecho distinciones por razón de sexo (en tareas, en rituales, en espacios ...) pero esto no implica per se una desigualdad, una opresión hacia las mujeres. En primer lugar, porque las esferas asociadas a los hombres y las esferas asociadas a las mujeres tenían un valor similar, ya que el ámbito público no estaba tan sobrevalorado como ahora, que parece que si las cosas no pasan públicamente, tanto en la esfera de la política pública como en las redes "sociales", la televisión, etc., directamente no existen. Las esferas de ambos sexos eran complementarias y sinérgicas, y aunque ligeramente jerárquicas, no constituían la desaparición del ámbito femenino y la dominación absoluta de las mujeres, entre otros motivos porque hombres y mujeres estaban juntos en la lucha por la vida, existía la comunidad, los vínculos, que protegían de las violencias y de la sensación de separación y exterioridad que existe ahora, pre- condición para el abuso de poder, la cosificación, el individualismo y el explotación5. Así las cosas me pregunto: ¿cómo podríamos luchar de manera que nuestro discurso y en la medida de lo posible, nuestra praxis, no reprodujeran el sistema dominante y al mismo tiempo teniendo en cuenta que no nos podemos sustraer utópicamente de él? Podríamos subvertir las bases modernas que le han dado fundamento al feminismo, construyendo unas relaciones entre sexos más libres y autónomas (el principal problema del modelo pre-moderno era quizás la falta de elección consciente, la adjudicación automática de un rol, que si bien podía proveer seguridad e identidad también podía constreñir excesivamente). Podríamos resituar la cuestión de la mujer en un marco histórico de relaciones entre sexos? Así como con la cuestión nacional catalana muchas nos hemos sumado de manera crítica y constructiva, para intentar hacer del proceso algo más afín a nuestros planteamientos, aunque las tendencias predominantes sean otras, como podríamos hacer lo mismo con las tendencias predominantes dentro del feminismo6? Si nos consideramos de alguna manera colonizadas por el sistema capitalista y moderno actual (a nivel de instituciones, de valores, de voluntades, de expectativas, de perjuicios ...) no deberíamos hacer un poco de autocrítica de las bases del feminismo moderno y pensar en un «feminismo» (o como le queramos llamar) que se adapte más a nuestra visión del mundo? Ha habido discursos más marginales y minoritarios el 8 de marzo y más allá, pero con la tendencia global éstos quedan atrapados en formas concretas de entender la problemática de género de acuerdo con la evolución capitalista que, en muchos otros frentes, combatimos y cuestionamos desde la raíz. Los feminismos y las ciencias sociales siempre ponen el énfasis en los espacios de prestigio masculino y proyectan las ideologías y valores capitalistas en su análisis de esta sociedad y de otras. He encontrado en el feminismo decolonial algunas ideas respecto la herramienta de la huelga feminista que me parecen interesantes y que, salvando distancias, nos pueden inspirar: Los métodos de lucha, no son cualquier cosa. Ellos dicen mucho sobre las bases en las que se asienta un movimiento social. Los métodos son prescriptivos de mundos: los regulan. De allí que la decisión de tomar el paro de actividades como método habla del tipo de narrativa y comprensión del mundo a la que adherimos. La idea de paro reedita una imaginería excluyente de las experiencias de trabajo y de organización de lo común que no encajan con la noción de empleo asalariado y ascenso social que señala el ideario de progreso capitalista. Estos modelos de organización comunal y de vida en relación son los que históricamente han resistido de manera radical al capitalismo y a la expansión del orden moderno-colonial. Que no los reconozcamos como formas de resistencia válidas más acordes a nuestra experiencia histórica es porque nosotras mismas encajamos más de lo que creemos y de lo que nos gustaría admitir con el sistema mundo moderno y el modelo económico de explotación capitalista. Un puñado de mujeres privilegiadas definen la política feminista [en América Latina]. Vale decir, que esta hegemonía se asienta y es productiva a la subalternización de los mundos que le exceden condenando a invisibilidad las apuestas y las metodologías de resistencia de millones de mujeres indígenas, afrodescendientes, campesinas y populares que cada día enfrentan la violencia sistemática del sistema moderno colonial capitalista de género. Sigue quedando fuera de nuestra imaginería, nuestra creatividad, nuestros deseos de mundo, nuestras formas del hacer, aquellas ontologías y modelos de gestión de lo común y de la reproducción de la vida que no se han subsumido tan fácilmente a la razón occidental moderna, ni al feminismo que le hace complicidad. No hay representatividad legítima en la ausencia, y mucho menos en la imposición de un único modelo de comprensión, porque un discurso general sobre posibles preocupaciones comunes impide precisamente que éstas sean finalmente develadas7. Como decía, no estoy de acuerdo con la mayoría de planteamientos de la huelga, ni tampoco con algunos argumentos que se esgrimen desde varios sectores feministas, pues los considero falaces o directamente falsos8. Creo que a veces el movimiento se alimenta de experiencias traumáticas concretas que se hacen extensibles al resto de la humanidad, victimizando a todo el colectivo de mujeres. En cuanto a la feminización de la pobreza, tal vez debería hablarse de empobrecimiento de la feminidad. Cuando se dice que ser mujer es la principal causa de pobreza se está repitiendo la diatriba progresista y occidentalocéntrica de las Naciones Unidas. Decir que las mujeres están más afectadas por la pobreza en el marco capitalista y desde el punto de vista capitalista no significa que sean pobres por el hecho de ser mujeres, como se suelta torpemente a menudo. No se pueden mirar los problemas de hombres y mujeres por separado, sólo la cooperación horizontal puede liberar a las comunidades concretas de la explotación vertical, que es la única causa verdadera de la pobreza9. Las reclamas constantes de derechos se me hacen indigeribles. Derechos que nos debe otorgar el poder, el papá Estado, para salvarnos de los malvados hombres que nos rodean. Que la lucha contra la violencia de género ya sea un «pacto de Estado» debería hacernos desconfiar. En lugar de aspirar a encontrar la justicia proporcionada por el Estado, como los derechos legales, que constituyen una preocupación importante del feminismo dominante, el movimiento de mujeres kurdas llegó a la conclusión de que el camino hacia la liberación requiere de una crítica fundamental al sistema. (...) De hecho, esperar cualquier cambio significativo de los propios mecanismos que perpetúan una cultura de la violación y de violencia contra las mujeres, como es el Estado, sería como recurrir al liberalismo con pretensiones feministas y democráticas. (....) deberíamos preguntarnos qué clase de feminismos acepta este sistema y cuáles no10. Además, muchas reivindicaciones que se hacen son irrevindicables, pues nadie las puede otorgar («Exigimos ser protagonistas de nuestras vidas ...»). Se piden más y más leyes y más recursos para paliar la violencia, pero lo cierto es que cada vez hay más violencia (porque más casos se definen como violencia y también porque se denuncian más). Al mismo tiempo, se ignoran infinitud de violencias contra los niños, los ancianos, las personas de diferentes etnias, para visualizar sólo la violencia contra las mujeres, sobre todo en el terreno de las relaciones afectivas. En este sentido, la insistencia en que los males los tenemos «dentro de casa», las «cargas», las violencias, las desigualdades, se ha puesto en primer plano, cegandonos respecto a problemas urgentes, y, más que politizando lo personal, personalizando lo político11. Lo cierto es que en el último siglo hemos pasado de la revolución social a la insurrección personal, y de ella a la lucha interpersonal. Temo que la huelga (aceptada por los sindicatos de toda clase y condición, por la patronal y soportada por los gobiernos de todos los colores) sea un simple reajuste, un simple perfeccionamiento del capitalismo moderno, una capa de barniz femenino al sistema12. Por cada mujer que alcanza un puesto de poder hay miles que se quedan "hacia atrás". Por cada mujer que se convierte en «macho» para alcanzar puestos de poder en la neutralidad ciudadana capitalista, mueren miles, desaparecen en el anonimato por ser simples mujeres que sustentan la vida13. El Estado ve una nueva posibilidad de regular y controlar más y más la vida de la gente y de engordar con los impuestos de las personas las bolsas de los amigos de turno que se apuntan a las tendencias políticas del momento. El mercado ve una forma de avivar más y más la competencia entre iguales, fomentar las aspiraciones de medrar en su paradigma .....Se promociona la parcialidad, se enmascara la desigualdad, se pinta con una gruesa brocha lila a las mujeres de toda clase y condición. Pero mujeres hay de toda condición, así como hombres: amantes de la libertad, sinceras, cobardes, mentirosas, madres y malas madres, poderosas y sin poder. Se tritura aún más a la clase trabajadora, ya que el «feminismo» se ha politizado y polarizado de tal manera que es un tema extremadamente polémico que divide no sólo a los hombres y a las mujeres sino también a las mujeres, y eso es lo que interesa más en el marco actual: que cada uno luche por su pequeña parcela, como si fuera la más importante14. Corremos el riesgo de sustituir el discurso de clase social por el discurso de género, y ver a las mujeres como nuevo proletariado del siglo XXI, y que el patriarcado sea la raíz de todos los males como antiguamente lo había sido el Estado burgués. La construcción del Estado burgués bebía de la premisa de que «el hombre es un lobo para el hombre». La construcción del Estado feminista bebe de la premisa «El hombre es un lobo para la mujer». La solución es sólo politizar a las mujeres, empoderar a las mujeres para la igualdad de participación política y laboral? No es esto dar por supuesto que es allí, en la esfera política publica, donde tiene interés real estar, y depreciar por tanto, otros espacios de politización informales o domésticos? ¿Qué significa para las mujeres «militar»? Es o debe ser lo mismo que para los hombres? Todo esto no se cuestiona en esta huelga. Se da por supuesto, por tanto, el marco actual, no se generan nuevos imaginarios. El feminismo kurdo expone también algunas críticas al feminismo occidental que sería bueno poner de manifiesto: La mirada del movimiento de liberación kurdo sobre la liberación de las mujeres es de una naturaleza comunalista explícita. En lugar de rechazar a los hombres o deconstruir los roles de género hasta el infinito, trata las condiciones que están detrás de los conceptos actuales del ser mujer como un fenómeno sociológico y trata de redefinir esos conceptos formulando un nuevo contrato social. Critica el análisis que hace el feminismo dominante del sexismo, pues mira exclusivamente en términos de género, así como su incapacidad de generar un cambio social más amplio al limitar la lucha al marco del orden preexistente. Una de las mayores tragedias del feminismo es haber caído en la trampa del liberalismo. Bajo la bandera de la liberación, el individualismo extremo y el consumismo se propagan como emancipación y empoderamiento, planteando obstáculos muy evidentes para la acción colectiva. Por supuesto que las libertades individuales son fundamentales para la democracia, pero la incapacidad de movilizarse desde abajo requiere una autocrítica urgente del feminismo15. Parece ser que con la huelga de este año el impacto de la movilización feminista ha sido un éxito político y mediático. Pero cabe preguntarse: ¿si el año pasado en Barcelona se manifestaron 7000 personas, es sólo por el trabajo desde abajo de las organizadoras, que este año han sido cerca de 200.000? Más allá de la cortina de euforia, creo que el «tsunami feminista» de masas cae en sus presupuestos, demandas y contenidos en el más burdo feminismo liberal. Su potencia transformadora, por lo tanto, es muy cuestionable. Está transformando o reforzando el orden establecido? La difusión de los grandes medios de comunicación y la apropiación del discurso feminista por parte del poder no hace muy buena espina. Si esto es la libertad puede que, como decía Emma Goldman, haya llegado el momento de emanciparnos a nosotras mismas de la emancipación16?
Laia Vidal
NOTAS1 Dice un amigo haciendo una reflexión sobre los planteamientos de este 8 de marzo: «De aquí a unos años, si no hacemos nada por evitarlo, cada vez habrá menos tareas de las que llaman “reproductivas”, no realizadas ni por hombres (que ya lo hacen hoy en la mayor parte de los casos que se dan, ya que la figura horrenda del ama de casa ya se ha desmantelado y sólo quedan restos de aquello) ni por mujeres. No por nada la natalidad viene cayendo en picado casi de manera constante desde hace casi 40 años. Además, la condena al trabajo asalariado, primero impuesta a los hombres, y luego a las mujeres, está produciendo generaciones en cadena que sólo saben vivir para trabajar (encima hoy en trabajos que poco o nada sirven fuera del trabajo, en la gran industria de los servicios y en el funcionariado, en su mayor parte), y cada vez saben hacer menos cosas para llevar adelante su propia vida (desde una tortilla de patatas, criar a los hijos (ahí están los miles de libros sobre crianza), cultivar unos tomates, hacer pan, organizar y ser parte activa de fiestas populares, fabricar cualquier objeto de uso cotidiano, levantar un muro o tejer una prenda de vestir, entre otras miles de cosas) de manera independiente al orden constituido y dependiente con los iguales. Pero parece que esto no son problemas por los que haya que luchar.. El problema es el reparto desigual en las tareas del hogar...» 2 Ivan Illich en El género vernáculo explicaba: «Al reflexionar, veo ahora que una economía industrial sin una jerarquía sexista es tan inconcebible como una sociedad preindustrial sin género, es decir, sin una clara división entre lo que hacen, dicen y ven hombres y mujeres. Ambos son sueños de opio, sin importar el sexo de quien los sueña. Pero la reducción del nexo monetario, es decir, de la producción y la dependencia de mercancías, no está en el reino de la fantasía. Tal repliegue, es cierto, significa la renuncia a las expectativas y los hábitos cotidianos hoy considerados "naturales al hombre". Mucha gente, incluyendo algunos que saben que dar marcha atrás es la alternativa necesaria al horror, considera imposible esta opción, pero un número rápidamente en aumento de gentes experimentadas, junto con un creciente número de expertos (algunos convencidos y otros oportunistas) coinciden en que es la decisión más sabia. La subsistencia que se basa en una desconexión progresiva del nexo monetario parece ser hoy una condición de supervivencia.» 3 De hecho se habla de la «paradoja nórdica». https://elpais.com/elpais/2017/03/05/eps/1488668739_148866.html. En un sentido más amplio la crítica película La Teoría Sueca del amor tampoco deja en muy buen lugar a las sociedades nórdicas a nivel humano. 4 Lucia González Mendiondo pone en entredicho esta premisa de «a más igualdad, menos violencia» en su tesis doctoral La construcción del discurso contra la violencia de género como verdad social. Implicaciones preventivo-educativas y claves para una propuesta alternativa desde la educación de los sexos. «Hoy en día la igualdad social entre los sexos, aunque siga siendo una aspiración, es más cercana que nunca. Pese a ello, el conflicto en las relaciones de pareja sigue existiendo. La prevalencia de la violencia en las parejas adolescentes y jóvenes que han crecido en un marco social mucho más igualitario puede considerarse, como se hace desde la perspectiva de género, como signo de la existencia de un orden simbólico que reproduce la dominación masculina, concluyéndose, de este modo, que la prevención de todas las formas de violencia de género comienza por la complicada y eterna tarea de educar en la igualdad. O, por el contrario y como se mantiene en estas páginas, puede servirnos como evidencia de que la interiorización de los valores patriarcales no es argumento suficiente para explicar la diferencia entre los sexos, tampoco cuando esta se torna desigual y violenta, y buscar nuevas maneras de abordarla». (....) «Existe la necesidad de abandonar el enfrentamiento entre los sexos como marco explicativo de las relaciones de pareja también cuando éstas se tornan conflictivas y violentas, en tanto que este planteamiento complica la relación entre los sexos, puesto que no busca el entendimiento entre ambos, que parte de la aceptación de las diferencias, sino la superación de tales diferencias reformuladas como desigualdades. (...)El criterio de igualdad que se impone en lo público resulta tramposo en lo privado y lo íntimo y acaba por contrariar a hombres y mujeres ante la imposibilidad de ser iguales y ser sexos». 5 En este sentido Rita Laura Salgado en su libro La guerra contra las mujeres diferencia entre el patriarcado de baja intensidad pre moderno y el patriarcado de alta intensidad actual. La definición de patriarcado de alta intensidad corresponde más al concepto de neopatriarcado, entendiendo que el patriarcado ha sido un invento de las élites de poder para dividir y enfrentar el pueblo, enfrentando a las comunidades desde dentro. La autora explica: «si el eslogan moderno es “diferentes, pero iguales” (que al final es una ficción, porque en la estructura binaria eso es imposible, no hay lugar para el otro, el otro es una función del uno), en el mundo tribal el eslogan sería “desiguales, pero diferentes”, el mundo es francamente plural... La modernidad tiene un discurso igualitario que enmascara la desigualdad... En el mundo tribal, hombres y mujers son dos naturalezas diferentes. No existe el postulado de un equivalente universal, de un ser humano universal, con todos los problemas que pueden derivarse de allí. No son jerárquicamente iguales, pero en esa desigualdad los dos son plenos en su ser, en su diferencia, en lo que son. Y tienen su mundo propio. Entonces, son desiguales, pero en un mundo plural. Decir “desiguales, pero diferentes”, es una alerta, un desafío. 6 Dilar Drik, activista e investigadora kurda propone, en un sentido similar en Feminismo y movimiento de liberación kurdo: «si conceptos como hombre y mujer, por muy socialmente construidos que sean, parece que van a durar todavía un tiempo, ¿no deberíamos quizá plantear nuevos términos de existencia y dotarlos de una base liberadora? Si es posible reimaginar conceptos de identidad como el de nación, disociándolo de sus implicaciones étnicas e intentando generar una unidad basada en principios, es decir, una unidad de pensamiento, formada de sujetos políticos y no objetos al servicio del Estado (que es la idea que se defiende en la multicultural Rojava, la “nación democrática” como articula Öcalan), ¿podemos crear también una nueva identidad de mujer libre basada en la autonomía y la libertad, para conformar un nuevo sentido de comunidad sin jerarquías ni dominación? (...)Y, sin embargo, al criticar la fijación del feminismo con el género, el movimiento de mujeres kurdas también reconoce la necesidad urgente de prestar atención a opresiones concretas». 7 Algunas reflexiones sobre metodologías feministas 8 El ejemplo repetido hasta la saciedad es el de la brecha salarial, que se desmonta fácilmente aquí. 9 El libro de reciente aparición Juntas contra el sexismo y la opresión concluye: «La mayoría de feminismos actualmente se quedan en una antítesis a lo que supuestamente ha sido la historia de las relaciones entre sexos, invirtiendo roles y sonriendole a la dominación. El antisexismo se quiere situar en una síntesis, ir un paso más allá expresando: "juntas, las personas", en equidad y reciprocidad, sacando lo mejor de cada uno sin encasillarnos en roles, un nuevo ser humano que integre las cualidades " femeninas "y" masculinas "sin perder la conexión con nuestro ser que es también sexuado, con las connotaciones biológicas y sociales que esto puede implicar pero sin hacer de esto una excusa para oprimir ni dominar nadie.» 10 Dilar Dirik, idid. 11 Desde la comisión organitzadora 8 de Mazo se ha expresado orgullosamente después de la huelga :"Hemos puesto al machismo y la desigualdad en todas las casas, en toda la sociedad, y nadie puede quedarse indiferente después de este día". 12 Aquí se dice: «El feminismo pretende embutir a la mujer en los procesos más bestiales y definitorios del capitalismo, quiere igualdad salarial y prerrogativas legales que obliguen a su empoderamiento capitalista, quiere añadir más y más tareas domésticas al engranaje económico, de las que el Estado y la empresa se lucren a través de impuestos y regulaciones; y a la vez, quiere combatir un tal neoliberalismo que, lejos de definirse como categoría central de su discurso, queda nada más pincelado como algo así como la dominancia internacional de una élite empresarial. No sólo se yerra al identificar al enemigo de los pueblos libres del mundo, que es el poder del Estado, la imposición normativa, el ejército, las armas, la coerción, la imposición homogénea de la moralidad del buen ciudadano a la inconmesurable amalgama de diferentes subjetividades individuales repartidas por el mundo y por el tiempo; no sólo se señala al ultracapitalismo moderno, sino que además las peticiones que se recogen con ánimo supuestamente de liberar a la mujer trabajan directamente en mejorar las condiciones de explotación de ese mismo neoliberalismo demoníaco. 13 Alessandra Bocchetti en Lo que quiere una mujer dice: "Según los criterios de la justicia social, las mujeres deben ser iguales y estar al mismo nivel respecto a los hombres. Según esto, el hombre sería para la mujer como una meta a la que llegar y al mismo tiempo un límite que no se puede traspasar. La mujer no puede aspirar a más o a menos, ni pensar en algo diferente o mejor. Se dice que deben estar en las instituciones; puede que lo quieran, puede que no; no se habla de deseos. La igualdad y la paridad son criterios matadores, no dejan que la mujer se represente a sí misma de una manera independiente, teniendo ambiciones autónomas ". 14 Si las feministas anarquistas de otros tiempos levantaran la cabeza...«¿Feminismo? ¡Jamás! ¡Humanismo siempre! Propagar un feminismo es fomentar un masculinismo, es crear una lucha inmoral y absurda entre los dos sexos, que ninguna ley natural toleraría». (Federica Montseny). «Yo no soy feminista; nunca lo fui y muchas veces he hecho ya esta declaración. No obstante, empieza a preocuparme el feminismo, porque empieza a manifestarse en la mujer un sentimiento de preocupación de su significación social y está muy expuesto que sufra desviaciones lamentables.(…)El feminismo implica masculinismo y lo único que faltaba, en el actual caos social, es que la mujer, al querer reivindicar sus derechos, se colocara enfrente del hombre, en actitud hostil, y que éste se mofara y hasta se preparara a combatirla en éste, su resurgimiento social. (Antonia Maymon.) 15 Dilar Dirik, ibid. 16 En el artículo La tragedia de la emancipación de la mujer: «¡Libertad e igualdad para la mujer! Qué esperanzas y aspiraciones despertaron estas palabras cuando se pronunciaron por alguna de las más nobles y valientes almas de aquellos días (...) Mi esperanza se encamina igualmente hacia ese objetivo, aunque mantengo que la emancipación de la mujer, como se interpreta y se pone en práctica en la actualidad, ha fracasado en conseguir ese gran fin. Ahora la mujer debe hacer frente a la necesidad de emanciparse a sí misma de la emancipación si realmente desea ser libre». Read more ... |
Posted: 13 Mar 2018 08:04 AM PDT
Hace ya muchas sabatinas Morán despotricaba de esa funesta moda de la Tercera España, a la que parecía sumarse Reverte, con un artículo publicado en el inefable diario El País, del 18 junio 2010; ese mismo diario que en treinta y pico años no ha sabido encontrar ni un solo republicano que no admirase el actual régimen, esto es la monarquía nuestra de cada día, dánosla hoy y mientras dure, no nos dejes caer en republicanas tentaciones, amén.
Y Reverte se apuntaba a la Tercera España, esa de la novela de Cercas, esa que no es fascista ni republicana, que no fue ni azul ni roja, esa que no se sometió jamás ni a unos ni a otros, esa que nunca existió. Pero es que esa España número 3, que sólo existe en la fantasía de gente que nunca vivió la Guerra, a setenta y pico años de que acabara, es muy cómoda. La Tercera España es aséptica y generosa como una sala de donantes altruistas de sangre, imparte justicia desde el olimpo inmaculado de los dioses y, sobre todo, presume de no tener las manos manchadas de sangre. Es una España de ángeles, que en su vida ha empuñado una pistola y que suele pagarlo todo con visa. Una España que ha olvidado la división esencial entre los españoles durante setenta y pico años entre VENCEDORES Y VENCIDOS. Esa Tercera España nace desde la ignorancia más supina de lo sucedido durante la Guerra civil. Ni comprende ni entiende nada. Esos terceristas suelen ser profesionales de la historia, o del periodismo, que con la mayor naturalidad del mundo opinan desde una previa desnudez. Se desnudan de toda cronología y juzgan el ayer desde su cómodo presente. Opinan, como todo el mundo, y todo el mundo tiene opinión, como tiene su culo. Y exhibicionistas a tope, nos enseñan su culo, dándonos su opinión. Pero antes han de desnudarse de la historia, del sentido común y de la división entre vencedores y vencidos, sin la cual no se entiende nada. Y meten en el mismo saco a fascistas y republicanos; meten en el mismo saco a quienes siguen enterrados en cunetas y a quienes fueron beatificados en solemnes y soeces ceremonias vaticanas; mete en el mismo saco a quienes obtuvieron prebendas e impunidad absoluta por sus crímenes y a quienes, inocentes o no, tuvieron que exiliarse, purgar cárcel, o morir en el paredón o el maquis. Pues no; no es admisible que se meta en el mismo saco a fascistas y a republicanos, a verdugos y a víctimas, por muy de tercera que se sea. Entre otras cosas porque la Guerra civil empezó porque hubo una sublevación de militares felones contra su pueblo y contra el régimen democrático establecido. Esos son los culpables de todo lo que vino después, aunque sólo fuera porque iniciaron la matanza. ¿Por qué se ha puesto de moda esa Tercera España, sustentada por intelectuales de tercera? No en vano, durante cuarenta años, España ha sido gobernada dictatorialmente por un criminal de guerra. La añoranza es profunda. Esa Tercera España, con las manos limpias, que rechaza todos los asesinos, por igual, y que reivindica todas las víctimas, por igual, criminaliza con “Pío” Mir y Pío Moa, la Transición democrática y banaliza la dictadura. Mir, en su último libro, dice que el dinero que pagaron los maristas a Aurelio Fernández fue entregado por éste a Tarradellas, y éste último se lo dio a su vez a Josep Asens para que comprara armas en Suiza. No basta con demostrar cronológicamente que eso fue imposible. No basta con argumentar que los republicanos no cometían delito alguno por comprar armas, a no ser que se admita que tenían que defenderse con piedras de los ataques del fascismo. No importa demostrar que Mir falsifica datos, porque quien difama ya ha ganado, y siempre tendrá un Reverte que le cite como autoridad creíble, o novelistas por encargo que mezclen vampiros y anarquistas. Lo que le importa a esa Tercera España y a sus intelectuales de tercera es difamar a Tarradellas, figura fundamental de la Transición, porque en el fondo añoran la dictadura franquista. Reverte, además, pasa de matute que la división entre españoles ha sido, y es, aún, una división entre vencedores y vencidos, y no entre víctimas de ambos bandos y verdugos de ambos bandos. La media España de los miserables que perdió una guerra, y que fue fusilada, exiliada y humillada hasta el hartazgo, por su ejército, su iglesia, sus amos y los asesinos a sueldo, disfrazados de falangistas o policías, sufre el síndrome de Antígona, porque durante cuarenta años tuvo prohibido enterrar y honrar a sus muertos, y cuando fue la hora de reclamar ese derecho, durante la Transición, no pudo hacerlo, porque proseguía el terror de esos cuarenta años, que aún nos impedía ser libres. Aún se mataba en las calles. Y luego se produjo el 23 F para mayor oprobio, amenaza y aviso de que todo estaba a prueba, bajo vigilancia militar de volver a las andadas del fascismo Así nos va, ahora, escarbando por caridad en esta o en aquella fosa común, y con el último timo de una infame ley, llamada de recuperación de la memoria histórica. El rey Creontes enterró viva a Antígona; en España se han muerto de viejos los padres y hermanos de quienes fueron fusilados y echados como perros en las cunetas, con la maldición de Antígona rabiando en sus entrañas. Sólo quedaron sus huesos. Y los nietos aún han de batallar como jabatos para recuperar los huesos de sus antepasados. Asesinaron y robaron lo que quisieron y se sabían impunes. Que un criminal de guerra, confeso y victorioso, ocupase la Jefatura del Estado durante cuarenta años no se borra fácilmente, y sus secuelas son innumerables y persistentes. Mientras tanto, los jueces españoles se atreven con los criminales de guerra de allende mares y continentes, persiguiendo torturadores y genocidas, discípulos y émulos de sus maestros franquistas. Pero cuando intentan barrer en su propia casa, no ha lugar, y son acusados de prevaricación, pero jamás por tolerancia con la tortura. Archiveros de algunas instituciones se otorgan el poder de decidir, a su capricho, qué puede ser consultado. Antígona fue enterrada viva por Creontes y Transición. Ya es demasiado tarde para muchos, pero los nietos siguen en pie. La ignominia continúa, el combate por conocer toda la verdad, también. Queremos los nombres, todos los nombres: el de los de los asesinados y el de los asesinos. Queremos saber cómo, dónde, cuándo, por qué y quién se enriqueció y/o detentó el poder gracias a tanta muerte, a una represión tan feroz, a tanto dolor. La Guerra Civil no fue una guerra fratricida, fue una guerra de clases. El franquismo reprimió, claro está, a las minorías democráticas, pero sobre todo impuso el terror a una clase obrera derrotada por las armas, vencida. El franquismo fue un régimen genocida y criminal, de principio a fin. No hay otro remedio al dolor, ni existe otra solución que saberlo todo, por todos los medios, con todos los archivos abiertos, sin traba alguna. Queremos que se concedan los recursos económicos que sean necesarios para recuperar los huesos de los asesinados. Queremos saberlo todo, queremos todos los nombres, de asesinados y de asesinos, de cómplices y delatores, queremos saber el cómo, dónde, cuándo y por qué de cada muerto. Queremos saber cuántos y qué menores fueron secuestrados, quién los vendió y quién los compró. Queremos saber cómo y qué se robó, a quién se robó y quién se lucró. Queremos conocer toda la verdad. De no ser así, nos están enterrando en vida, como hizo Creonte con Antígona. Esto no se arregla con monumentos o vanos homenajes. Y para empezar, que el Ayuntamiento de Barcelona devuelva a los vecinos de Sants, y al pueblo barcelonés, el local de la Cooperativa obrera La LLeiltat Santsenca, con la misma gentileza con la que trata y trató en su día los negocios de un señor de Barcelona, llamado Millet, que para vergüenza y oprobio de todos sigue libre, disfrutando de las riquezas del botín saqueado, y que aunque es un ladrón confeso, se sabe impune, porque tiene un seguro de inmunidad mafioso, infalible y a todo riesgo, como aquel del que gozaban los pistoleros fascistas de los años cuarenta, que jamás impidió a nadie escalar los mayores cargos y honores, no ya nacionales e internacionales, sino hasta olímpicos, no ya durante el franquismo, sino incluso en la Transición y por toda la eternidad. La historia de España es una historia obscena, repleta de chulos criminales, omnipotentes y glorificados, que oprime terriblemente un presente cargado de corrupción y delitos condonados o no juzgados, porque en este país sólo pagan los vencidos, los miserables, los indignados. Los ladrones y asesinos fascistas, colmados de medallas, honores y crímenes contra la Humanidad, hartos de firmar condenas a muerte, y con blasones tan infames como los asesinatos de Vitoria, no sólo gobiernan toda su fratricida y larga vida, sino que son enterrados como héroes y “grandes hombres”. Los telediarios y obituarios certifican que en este país no hay, ni ha habido nunca, una extensa y mayoritaria Tercera España, esa que no era roja ni azul. Aquí hay lo que siempre ha habido: una España de tercera, humillada, que calla y sufre, sin más consuelo que ver pasar el cadáver del enemigo por la pequeña pantalla, previa precaución de suprimir el volumen de voz. Uno menos.
Agustín Guillamón
Publicado en Catalunya núm. 155 (noviembre 2013)
Catalunya es el órgano en catalán de la CGT
Read more ... |
Posted: 13 Mar 2018 05:23 AM PDT
Durante los últimos meses el servicio secreto ruso ha arrestado a muchas anarquistas y antifascistas en las ciudades de Penza y San Petersburgo, las cuales han sido acusadas de crear una “organización terrorista”. Las arrestadas fueron torturadas con cables y descargas eléctricas durante muchas horas, así como brutalmente golpeadas sin ningún tipo de cuidado en evitar causar graves daños o dejar visible los golpes. Los oficiales humillaron a nuestras compañeras e intentaron que se auto-incriminasen o de que realizaran acusaciones contra las otras detenidas. Estas acciones propias de una verdadera Gestapo por parte del FSB (servicio secreto de Rusia) no pueden hacer más que llamar a vigorosas protestas de todas las personas honestas que conocen la verdadera situación.
Al mismo tiempo que las detenciones en San Petersburgo, el FSB realizó redadas y detenciones contra anarquistas en Crimea. La semana de solidaridad internacional llevada a cabo entre el 7 y el 12 de febrero expuso la amplia reacción del movimiento libertario mundial ante esta terrible represión y tuvo una gran repercusión informativa en Rusia. Pero no fue suficiente para que la situación mejore, pues pronto apareció la información de que algunas de las anarquistas arrestadas fueron nuevamente torturadas e intimidadas. Además, los oficiales del FSB les exigieron que se rehúsen a participar en campañas de resistencia contra las torturas y la represión. Más aún, tras las acciones de solidaridad en Rusia la policía desencadenó la represión contra sus participantes. Compañeras fueron procesadas en las ciudades de Moscú y Cheliábinsk. En esta última ciudad las anarquistas fueron torturadas con electricidad por la policía mientras eran acusadas de hoohliganismo (!) Es necesario continuar y reforzar la campaña de solidaridad para obligar a las autoridades rusas a poner fin a las torturas y la represión política. El mejor día para realizar nuevas acciones es el 18 de marzo, el día de las elecciones presidenciales en Rusia. En dicha jornada el régimen gobernante es más vulnerable ante los del mundo que estarán atentos a lo que se desarrolla en nuestro país. Realizamos un llamado urgente y desesperado a todas las anarquistas, izquierdistas, antifascistas y colectivos democráticos alrededor del mundo a organizar acciones de protesta y resistencia, de cualquier tipo, ante las embajadas, consulados o cualquier otra oficina oficial de la Federación Rusa en vuestros países. Nuestros eslóganes son: ¡FSB – es el mayor terrorista!! ¡Vuestra electricidad no matará nuestras ideas! ¡Libertad para las anarquistas y antifascistas rusas! Read more ... |
Posted: 12 Mar 2018 05:45 AM PDT
Mes histórico, este de marzo de 2018, frío y lluvioso, destemplado. España se estremece por muchas razones que no son solo climáticas. El Estado y el Capital agitan sus banderas con la prepotencia propia de aquellos que no esperan resistencia. Son los dueños de los medios de comunicación, poseen un ejército de policías y militares a sus órdenes, tienen en nómina a partidos y sindicatos institucionales (UGT-CCOO), han generado leyes (Reforma Laboral, Ley Mordaza) ―que los jueces a su servicio aplican sin piedad― para generalizar la opresión sobre las asalariadas, a sabiendas de sus consecuencias deleznables. Aunque en la calle la visión sea parcial, según el conflicto que afecte a cada persona, en realidad el frente de batalla es global, su agresión lo es, afecta a todos los aspectos de nuestras vidas y por tanto la respuesta, de igual modo, debe ser global. La precariedad en el empleo se generaliza como un estándar de vida, el desarme del sistema de pensiones toma forma con el 0,25 % de incremento anual, mas no se queda ahí, avisan que las medidas restrictivas irán más allá y afectarán de forma decisiva a las próximas generaciones. Los asesinatos a mujeres se multiplican y la brecha salarial aumenta entre estas y los hombres (30%). Los accidentes laborales crecen. La libertad de expresión es papel mojado en sus manos, sus tribunales de orden público actúan a su antejo y lo mismo les da cerrar un periódico (Egunkaria), que retirar un libro de las librerías («Fariña»), que censurar una obra artística en ARCO («Presos políticos en la España contemporánea» de Santiago Serra), que meter a titiriteros en la cárcel (Compañía Títeres desde abajo); todo esto seguido de condenas a raperos (Pablo Hasel y Valtonyc, por ejemplo), twitteros (Cassandra Vera), gente que hace pintadas (Julen Ibarrola), independentistas gallegos o catalanes, anarquistas (Caso Pandora, Piñata o El Pilar) o sindicalistas como Ermengol Gassiot CGT), entre los últimos represaliados. Mientras, la banca aumenta de manera exponencial sus beneficios, el gasto militar se incrementa de manera oculta, la corrupción campa a sus anchas, la Iglesia sigue siendo el eje hegemónico que marca el paso ante cualquier actitud progresista que afecte a sus intereses, se refiera esta a la religión, la sexualidad o al patrimonio histórico esquilmado.
España es una finca en manos de los de siempre, los que se beneficiaron de la unidad española después de la reconquista y el ascenso al poder de los celebrados Reyes Católicos, los que acapararon haciendas y poder, crearon bancos e industrias y se conjuraron a mantenerse como dueños y señores de la piel de toro a toda costa. Hasta hoy lo han conseguido, ahí están, bien representados en el IBEX 35, en todo su esplendor. A principios del siglo XX hubo una explosión revolucionaria orquestada por el anarquismo que el Estado sofocó a sangre y fuego. Ya entonces estaba claro, o al menos aquellas generaciones lo tenían muy claro, que la transformación social no pasaba por la lucha institucional dentro del Estado, porque el Estado era el problema. Ahora no quieren que ese cuestionamiento -que puso sobre la mesa el 15M («El sistema es el problema»)- se repita ni en su más nimia expresión, y para evitar cualquier tipo de contestación popular estrangulan nuestras vidas como lo que son: psicópatas sin escrúpulos. Sin embargo, la Historia no ha muerto, a pesar de que tanto la pregonan, las contradicciones sociales generan tensiones que tarde o temprano reventarán en su cara. Si prohíben una obra de teatro en un lugar, la representaremos en cualquier rincón donde tengamos espacio para ello. Si censuran una obra de arte o escrita, la replicaremos para que llegue hasta el último de los hogares. Si cierran uno de nuestros medios de comunicación alternativos, abriremos mil más. Si nos encarcelan a una de nosotras con sus operaciones policiacas periódicas, seremos sustituidas por una multitud de hombres y mujeres que quieren escribir el presente y el futuro desde una contestación firme y transformadora, que persigue por encima de todo la extinción de toda explotación. Hoy los pensionistas están en pie de guerra asqueados del trato que reciben después de toda una vida de trabajo y sacrificio. Las mujeres declaran una huelga general el 8 de marzo que reivindica una igualdad ninguneada a pesar de ser el cincuenta por ciento de la humanidad y las responsables de la existencia de la misma. Los sindicatos revolucionarios toman la calle, dejando clara sus posturas, y que es necesario organizar la resistencia para avanzar y poder pasar en el futuro a tácticas más ofensivas. El debate político abandona los parlamentos, aunque sea temporalmente, y vuelve a los barrios y a los tajos con una idea que flota en el ambiente: «No podemos seguir callando. La lucha es el único camino.» Sumario:
Pincha aquí para bajar el nº 32
Grupo Libertario Pensamiento Crítico
Read more ... |
Posted: 12 Mar 2018 05:11 AM PDT
Se cumplen ahora cuarenta años del asesinato a golpes del compañero Agustín Rueda. Los asesinos: funcionarios de prisiones de la cárcel de Carabanchel (Madrid) en la que estaba preso. La paliza que acabó con su vida se la propinaron por no querer delatar a quienes estaban preparando una fuga. El médico de la cárcel fue cómplice de los asesinos por no parar las torturas. Pero ¿quién era Agustín Rueda? Para contarlo, reproducimos el artículo (sin firma) que publicó la revista Ajoblanco en mayo de 1978. Añadimos el poema que dedicó a Agustín nuestro compañero Luis Farnox.
Nació el 14 de noviembre de 1952 en una barraca de la Colonia de Sallent, pueblo minero con importante porcentaje de inmigrantes. Madre tejedora y padre minero que, con el drama de la miseria habitual en la época, no conseguirán algo semejante a un piso hasta el 56, concedido por la empresa. Esta Colonia donde nace será objeto de reflexión constante a lo largo de su vida; su pensamiento remitió a ella en todo momento. Acude a la escuela –otro hito– hasta el 8 de julio de 1966 en que finalizados los estudios primarios topa con su condición de hombre pobre: ha de conseguir trabajo. Cuatro años de aprendiz de matricero en una empresa auxiliar del automóvil (Metalauto entonces, Authi luego, al cambiar de propietarios; ahora Commetasay) a 8 kilómetros de la Colonia. Es fácil adivinar los componentes del cuadro que le llevan a tener ya en esos momentos una conciencia inicial de explotado. Su respuesta, sin embargo, no es encuadrarse en un partido, hacerse cuadro. No se politiza por un ansia abstracta de libertad, por el Vietnam o por el Mayo del 68. Lo inmediato le oprime y le impacta; así pues, luchará en un terreno inmediato. Tratando de vencer la apatía tradicional –el ciclo expotación-miseria-ocio brutalizado repetido todos los días hasta la inevitable enfermedad o despido– intenta dinamizar el barrio. Crea un Club Juvenil, consigue proyecciones, conferencias, recitales de cantaores... Apasionado del fútbol, consigue crear un equipo al que también siempre volverá su recuerdo. Tiene 18 años. El acoso El aprendizaje parece haber sido en varios sentidos. En abril del 71 deja la fábrica y, luego de dos trabajos cortos como montador en una mina y en una fábrica de tejidos, logra trabajo en Sallent. En febrero de 1972 se produce la huelga y encierro de los mineros de Balsareny y Sallent. Agustín se vuelca: asambleas informativas, manifestaciones, grupos de ayuda... Llega a reunir a los comités en su casa a falta de lugar mejor. Consecuencia lógica: en septiembre es expulsado del trabajo. Los caciquillos industriales de la comarca ven en él un enemigo. Continúa sin embargo ligado al lugar. El 17 de noviembre, en el cruce de la salida de la Colonia con la carretera, muere atropellada la madre de un compañero. Otra consecuencia más de la explotación y la miseria de condiciones de vida de la Colonia. En la manifestación subsiguiente, 19 de noviembre, es detenido, buscado expresamente en su casa por la policía. Ingresa en la Cárcel Modelo, de donde saldrá en febrero del 73. Es el fin de una época. Agustín comienza a exigirse a sí mismo. Vuelve a Sallent, pero para las autoridades y la escasa gente de orden se ha convertido en la bestia parda. No le dan trabajo. Lo consigue esporádicamente, como albañil o como temporero en vendimias y recogidas de fruta. La vida le arrincona. Su madre queda ciega. El Club Juvenil –fundamental como dinamizador– es cerrado por la empresa y la Guardia Civil con la típica excusa banal: les acusan de robar unas cajetillas de tabaco. La tensa situación se rompe con la llamada a filas. El 9 de mayo de 1974 se incorpora a Infantería de Marina en Cartagena. Luego, Ferrol, el 26 de junio. El 17 muere su padre, tuberculoso, debilitado por la miseria. Hay pocas noticias de su mili. Escribe poco a Sallent y sólo acude para los funerales de su padre y de su madre, fallecida el 31 de diciembre de 1974. Se queda sin casa. Se licencia el 28 de octubre de 1975 y reaparece en la Colonia. La aventura consecuente A su vuelta continúa el acoso. No hay ningún trabajo para él, pero su presencia dinamiza al grupo joven del barrio. No olvida la importancia de la diversión y organiza un torneo de fútbol, afición de toda su vida. En abril del 76 pasa por primera vez a Francia para ayudar a un desertor de la Colonia. El 14 llega su primera carta. Ha tomado contacto con los exiliados de Perpiñán y vive encima de la Librería Española. Al poco tiempo una bomba vuela la librería y destroza la casa. Trata por todos los medios de llevar una vida propia, independiente de la política y de la existencia viciada del pequeño círculo de exiliados. Recoge fruta en Ceret y trabaja el campo en Cornellá de la Ribera durante varios meses. En octubre llega clandestinamente a Barcelona. Pasa libros y panfletos libertarios. Vuelve a Francia con desertores para retornar en noviembre a la Colonia. Necesita Sallent, pero las autoridades le rechazan. Otra vez el acoso. No quiere ser una carga para su hermana y duerme en un piso que la empresa, dueña de todo, ha concedido graciosamente a un grupo musical para sus ensayos. Enterada la dirección, clausura el piso. Va a vivir a una masía abandonada próxima a la Colonia. Por supuesto, no tiene trabajo. Hay que escapar al acoso. Ya con pasaporte, en febrero del 77, vuelve a Perpiñán. Entra en contacto con un grupo autónomo libertario, pero en absoluto renuncia a su vida. No es un “siniestro terrorista profesional”. Su único dinero procede del trabajo del campo. Vive pobremente, fuera de Perpiñán y vuelve a jugar al fútbol, en el SMOC. Un labrador jornalero libertario que juega al fútbol es algo bien distinto a un revolucionario profesional. El 15 de octubre del 77, sábado, a las 6 de la mañana es detenido en la frontera, en tierra española. Excesiva buena fe y un claro chivatazo. Última consecuencia: cárcel Pasa 3 días en la comisaría de Layetana de donde le llevarán a Figueras, a restablecerse de la paliza. A fines de mes pasa a la cárcel de Gerona. Entra en contacto con la COPEL (Coordinadora de Presos Españoles en Lucha) y se convierte en miembro activo, tratando de hacer tomar conciencia en el interior y de coordinar las actividades en el exterior, siguiendo la línea de la COPEL que tanta'hostilidad y silencio ha tenido en la prensa y los bienpensantes partidos. Los abogados Vidal (Comité Propresos CNT) y M. Seguí (familiares y amigos presos políticos) parece que se encargarán de su caso. Sólo el primero le vio; una vez y al principio. Como consecuencia de su trabajo en la COPEL, es trasladado el 1 de enero de 1978 a Carabanchel. Sus abogados, en principio, ni se enteran. Hay un sospechoso silencio administrativo y un notable desconcierto. El Comité Propresos de Madrid indaga en Carabanchel y recibe el “aquí no está” por respuesta. Son meses duros en la COPEL y Agustín tiene abogado de oficio. El 2 de marzo el Comité de Solidaridad de Sallent se traslada a Madrid y contacta con Anabela Silva, a quien encarga la defensa del caso. Para entonces el caso ya es otro. Es la cárcel en España. Conocedor de las razones y de las consecuencias de la miseria, Agustín Rueda no distinguió entre políticos y comunes, y se entregó de lleno a la COPEL. Por ello nunca llegó a ver al juez. Tuvo otros jueces; sus mismos verdugos. Murió el 14 de marzo, a las 7,30 debido a un shock traumático como hizo constar el doctor Gregorio Arroyo. Nadie le vio después de la brutal paliza. Trasladado el cadáver a Sallent fue enterrado sin permiso, incluso sin el de Sanidad. Había que evitar escándalos. El director de la cárcel y 10 funcionarios están procesado –como en su tiempo el inspector Matute– pero a ellos no les juzgarán sus carceleros ni sus encarcelados. Ellos están en un país de derecho. Agustín Rueda 1978 (poema) Hemos muerto jóvenes, sin oportunidad, sin apenas tocarnos, con el alma intacta.
Agustín Rueda, aquella madrugada
era el último toro de la lidia. Los diestros y su cuadrilla, total quince, abrieron sin conmiseración la faena. El presidente, ajeno o toxicómano -hoy es un muerto de memoria inventada, tal vez cómplice- no necesitó dar su consentimiento. Rodolfo, el aguacil, ya lo había permitido. - ¡Que no quede ninguno! -se le había escuchado gritar-, son de corazón negro, son toros bravos, son anarquistas; como el mal nacido de mi padre -repetía Rodolfo, el aguacil con gafas de pasta y apestosas.
La luz que proyecta una bombilla
balanceándose en un columpio asesino, casi siempre es el tobogán que conduce al infierno. Cada vez que se ilumina la escena del horror los rostros toman su auténtico aspecto diabólico. Cuando recibes los tres primeros golpes con tal determinación, precisión y potencia, intuyes que el final de la paliza será mortal. Con los tres primeros, tan solo con los tres primeros golpes, la embestida, por muy bravo que seas, se vuelve vómito. A continuación ya no eres persona, ni animal ni toro ni anarquista; ahora eres un trapo que friega tu propia sangre por el suelo.
El barrio de Carabanchel dormía
el martes 14 de marzo de 1978. Los siniestros matadores con taleguilla azul de funcionario de prisiones, los machos de cobardes bien atados, los alamares deslumbrantes como los ojos que esconden la capucha del verdugo, se abalanzaron sobre aquel ser indefenso, ahora sí; convertido para siempre en bayeta inservible o en persona guiñapo. La barriada obrera dormía y soñaba con las verdes praderas de González; unos, con un rojo y glorioso amanecer; otros, con la dulce ignorancia reparadora; casi todos. La barriada dormía, un perro aullaba su pronóstico y mientras, en la Cárcel de Carabanchel, continuaba la orgía.Diez matadores, dos médicos, el director de lidia y su ayudante, junto a un cura torero, rematan la faena. Ese día el sol asomó avergonzado, anubarrado, como una aspirina a medio disolver en la mentira de un vaso de lejía. Aún las rotativas no se atrevían a despertarse en aquella mañana de 1978. Así se cimentó el futuro de una casta gloriosa de cobardes, embusteros, usurpadores, ladrones, hipócritas y arteros. Los criminales, cuando llegan a ancianos, arrojan gran cantidad de misericordia y perdón sobre la memoria que, durante toda una vida, han falsificado: Cuando el alma molesta, lo mejor es abandonarla en un charco de sangre. Hoy, los asesinos acompañan a sus nietos al parque, y con cándida inocencia empujan el columpio.
Luis Farnox
Publicado en el Periódico Anarquista Tierra y Libertad, marzo de 2018
Read more ... |
Posted: 12 Mar 2018 04:50 AM PDT
|
Posted: 12 Mar 2018 02:19 AM PDT
Inauguración: sábado 17 de marzo a las 12:00h. en la sede de la FAL: calle Peñuelas, 41 (Madrid). Organiza: Fundación de estudios libertarios Anselmo Lorenzo y CNT. La exposición Mujeres Libres (1936-39), precursoras de un mundo nuevo, trata de recuperar la historia olvidada de la organización Mujeres Libres, una agrupación femenina surgida en el seno del movimiento libertario durante el año 1936, cuyo propósito era unir a las mujeres de clase obrera para luchar por su emancipación. Con ese objetivo, Mujeres Libres desarrolló un vasto programa dedicado a concienciar y elevar la cultura de las mujeres a través de la educación y la formación laboral; pretendían con ello superar lo que denominaban triple esclavitud de la mujer obrera: la de su ignorancia y la derivada por su condición de mujer y trabajadora. Para lo anterior, consideraban que tenían que emprender una doble lucha: por un lado, acabar con el sistema económico y social que las explotaba, junto a sus compañeros, con el fin de establecer una sociedad basada en el Comunismo Libertario, y, por otro, acabar con su propia explotación como mujeres. Transcurridas ocho décadas desde la creación de esta organización femenina, la Fundación Anselmo Lorenzo, a través de esta exposición itinerante, trata de rescatar a estas mujeres del olvido dándoles el reconocimiento que merecen, para que su lucha sirva de experiencia y aprendizaje al movimiento feminista actual. La muestra está compuesta por 16 paneles, además de materiales sonoros y audiovisuales, con información sobre la gestación y desarrollo de la organización, sus reivindicaciones y ámbitos de actuación, sus planteamientos sobre igualdad, educación, trabajo, sexualidad y la participación activa que desarrolló para ganar la guerra contra el fascismo. A día de hoy, lo avanzado de sus planteamientos y acciones sigue siendo un referente en el que vernos reflejadas, siendo nuestro deber mantener ese legado para que sirva como base de la lucha de las mujeres por la consecución de la igualdad real. Read more ... |
Posted: 10 Mar 2018 01:40 PM PST
A raíz de los acontecimientos acaecidos el pasado jueves 8 de marzo, día en el que se celebraba el día internacional de la mujer, y en el que cientos de millares de mujeres tomaron las calles en diversos rincones del mundo, me ha dado por pensar. El foco de mis pensamientos se ha centrado en la conveniencia, o no, de la rica diversidad de movimientos reivindicativos que podemos observar hoy en día a nuestro alrededor: feminismo, animalismo, anti-racismo, LGBQT, etc.
Creo que lo primero es aclarar que todos estos movimientos tienen - y siempre tendrán - todo mi apoyo, creo firmemente en las ideas de base de todos ellos, creo en la total igualdad entre la mujer y el hombre, en los derechos de los animales a ser tratados dignamente y con todo el respeto que se merecen nuestros compañeros de andanzas en esta aventura que es la vida en nuestro planeta, creo en la igualdad de todo ser humano, independientemente de su color de piel, o su preferencia sexual... en fin, creo en que dentro de todos nosotros - por mucho que a veces se esconda - hay una vocecita gritando "libertad...igualdad...". Creo firmemente que si se presentase la situación en la que pudiésemos elegir vivir en un mundo en el que todos coexistiésemos en paz y armonía; en el que midiésemos nuestra felicidad no por lo que poseemos, sino por lo que somos; en el que aprendiésemos a respetarnos todos como iguales, incluyendo no solo al resto de seres humanos, sino a todos los elementos que conforman el planeta que habitamos; creo firmemente, que la gente se asiria a este mundo con todas sus fuerzas, sin mirar hacia atrás nunca más. El problema es que estamos aún muy lejos de esa realidad. Vivimos en una sociedad en la que prima lo individual y lo egoísta por encima de lo colectivo, una sociedad que basa su felicidad en la idea de un crecimiento continuo y desmesurado con el que tarde o temprano nos vamos a dar de bruces, una sociedad en la que los unos nos pisamos a los otros para escalar la pirámide que, en teoría, nos conduce a la felicidad. Una felicidad vacía de significado, una felicidad temporal y ficticia, que nunca llega a hacernos felices, pero que aun así perseguimos en la forma en la que se nos dicta. Ante esta situación, por mucha simpatía y apoyo merezcan todos estos movimientos que son tan loables en el fondo que persiguen, no puedo más que dudar de su estrategia. Si algo nos demuestra la historia, es que nosotros - la gente plana y llana -, podemos ejercer presión a las clases gobernantes no como individuos aislados, sino como conjunto, en grupo, en comunidad. ¡Porque todos somos mujeres, y todos somos negros, y todos somos gays, y todos somos animales! Pero identificándonos exclusivamente, o casi exclusivamente, como mujeres, o como negros, o como gays, o como animales... no solo tenemos menos fuerza, sino que hacemos la labor de controlarnos mucho más fácil a las clases dirigentes. Con esto no pretendo decir que dejemos de apoyar el movimiento feminista, o el movimiento animalista, o las decenas de movimientos que al fin y al cabo luchan por una sociedad mejor y más justa. No, lo que pienso, es que debemos encontrar lo que nos une a todos, lo más básico... todos somos seres humanos, y es partiendo de este común denominador que debemos aunar esfuerzos y ¡luchar! Porque yo no me puedo imaginar una sociedad como la descrita más arriba en donde haya sexismo, o maltrato animal, o... Una sociedad en la que se busca alcanzar la felicidad, no a través de los bienes materiales, sino a través de los valores sociales y el respeto a lo que nos rodea, no puede ser nunca ninguna de esas cosas! Luchando por el feminismo, espero que se alcance la igualdad entre mujeres y hombres, pero eso no va a arreglar el problema con el racismo, o de desigualdad social a escala global, o la destrucción del medio ambiente. Porque ninguno de esos movimientos en singular va a solventar otras injusticias. Porque nuestro enemigo es más grande que el patriarcado machista, o que los desalmados que destruyen el medio ambiente para su propio beneficio, o que los energúmenos que insultan y apalean a otros seres humanos por sus preferencias sexuales... ellos no son nuestro enemigo real. Nuestro enemigo es un sistema que se aprovecha de cada una de todas esas injusticias para el beneficio de unos pocos, que promueve y fomenta esos valores de odio para dividirnos y que seamos más manejables, que falsamente se pone a la cabeza de cada uno de esos movimientos para no solo apaciguar nuestros ánimos con promesas de papel, sino para absorberlos y que una vez sean parte del sistema se tornen estériles - se me viene a la cabeza la situación actual de los sindicatos mayoritarios que dicen defender a los trabajadores... -. Que nuestras experiencias personales de injusticia diaria nos sirvan no solo para combatirlas en las parcelas que directamente nos atañen, sino para unir a todos los que padecen de esas injusticias, sean del tipo que sean, y cambiar la cabina de pilotaje. Porque si no, este avión en el que vamos todos montados, cada vez está más cerca de estrellarse, y necesitamos algo más grande que turbulencias pasajeras, necesitamos de una tormenta que remueva los cimientos más profundos de este patético y obsoleto sistema. Como hace no mucho dijo un grande: «Las ruinas no nos dan miedo. Sabemos que no vamos a heredar más que ruinas, [...]. Pero a nosotros no nos dan miedo las ruinas porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones. Y ese mundo está creciendo en este instante.», Buenaventura Durruti.
Adonis
Read more ... |
Posted: 10 Mar 2018 10:21 AM PST
«Exigencia prioritaria para una sociedad libre es la abolición de la autoridad y la expropiación de la propiedad. En vez de un gobierno formado por representantes permanentes electos ocasionalmente y por burócratas de carreras casi inamovibles, los anarquistas quieren una coordinación efectuada por delegados temporales, inmediatamente revocables y por peritos profesionales de hecho responsables. En tal sociedad, todas las actividades sociales que implican una organización serían probablemente administradas por asociaciones libres. Se les puede llamar consejos, cooperativas, colectividades, comunas, comités, sindicatos o soviets, o cualquier otra cosa –el título no tiene importancia, solo la función cuenta» (Sobre el anarquismo, Nicolas Walter).Dentro de la amplia y diversa bibliografía ácrata existe un sinnúmero de breviarios sobre los aspectos básicos o esenciales del anarquismo. Introducciones, manuales, diccionarios y conferencias han sido los formatos utilizados para divulgar los principios anarquistas en economía, ciencia, política y cultura. ¿Por qué, dentro de esta aún creciente fauna, escogimos la obra de Nicolas Walter? Los motivos han de ser varios. Por ejemplo, que su autor, además de poseer un vasto conocimiento de los temas que trata, fue una persona activa políticamente, lo que en otras palabras significa que su conocimiento no procede solo de los libros o la discusión académica, sino también –y sobre todo– de su experiencia en el campo de las luchas sociales. Sin embargo, más allá de esto, es la estructura argumentativa de Nicolas Walter lo que ha llamado nuestra atención: esta obra no podría ser encasillada como una introducción ni como un manual, dado que procede a través de la exposición de conceptos esenciales –es decir, que son frecuentemente expresados en los discursos anarquistas– para luego problematizar según las diversas visiones que co-existen dentro del anarquismo. Esta es una nueva edición del clásico trabajo del anarquista inglés Nicolas Walter, escritor, periodista y activo manifestante contra el poder y el Estado. Fue frecuentemente impreso y traducido a varios idiomas, incluyendo el francés, español, japonés, serbo-croata, chino, polaco y ruso. La edición que hemos realizado, además, incluye un prólogo de Colin Ward, amigo y compañero del Nicolas Walter. Descargar Libro [PDF]Read more ... |
Posted: 10 Mar 2018 10:10 AM PST
El barrio Santiago el Mayor, que lleva 180 días en lucha contra las vías del AVE, sufrió ayer nuevamente la represión de la Policía. Hay 2 detenid@s y un herido grave.
Ayer, durante la jornada de Huelga Feminista se vivieron escenas de brutal represión en la ciudad de Murcia. Ya por la mañana, la policía llevo a cabo agresiones contra varias activistas junto a las vías del tren, a unos metros de donde desde hace meses permanecen acampad@s l@s activistas de la asamblea Murcia sin muros, acampada popular contra el muro que pretende aislar el barrio de Santiago el Mayor para el paso del tren.
https://www.youtube.com/watch?v=SHeNyDkm9TU
https://www.youtube.com/watch?v=1gAblOnJBWs
Por la tarde, la manifestación de la huelga feminista salió del centro de la ciudad y se dirigió a Santiago el Mayor, que está en el extraradio. La idea era solidarizarse también con esa lucha que lleva 6 meses en pie de guerra contra la imposición del muro que dividirá la ciudad.Los problemas empezaron cuando la Policía taponó el paso a nivel impidiendo la Policía que un bloque de la manifestación lo atravesase, activistas denuncian que ese tapón podría haber desembocado en una tragedia humana en caso de estampida: "en Santiago el Mayor adonde llegó mucha gente pudo haber pasado una desgracia por la incompetencia y el sadismo del Delegado del Gobierno, Francisco Bernabé" nos relata un manifestante. Después ocurrió lo que la mayoría de la gente ya se temía: la policía cargó con saña contra l@s manifestantes, uno de los agredidos, persona activa en la lucha contra las vías, recibió contundentes golpes en la cabeza, hasta el punto de que l@s activistas llegaron a temer por su vida y tuvo que ser hospitalizado con pronóstico grave. Además, la Policía detuvo a dos personas, una pareja que transitaba por la zona al margen de la manifestación, según nos relatan a La Haine personas presentes en aquel momento "simplemente los secuestraron, los echaron a la furgoneta y no sabemos nada más". Los vídeos y fotos de la brutal carga policial y sus consecuencias hablan por sí solos:
https://www.youtube.com/watch?v=Op8mOOl0Jcs
https://www.youtube.com/watch?v=Y_bvL69469E
https://www.youtube.com/watch?v=YK5jSazOqGM
Según nos relata un activista, destacan "la falsa acusación de la policía, argumentación falsa donde dicen que fueron agredidos... Allí no hubo ninguna piedra, ningún puñetazo ni ninguna botella... Sólo hostias gratuitas de ellos"Por otro lado, esta mañana en declaraciones a la cadena SER, el delegado de gobierno en Murcia ha amenazado a l@s manifestantes: "Aviso a navegantes: están grabados y vamos a continuar con nuestra política de sanciones. No nos va a temblar el pulso. Van a ser muchos más los que en vía administrativa van a recibir un saludo cordial de este delegado del Gobierno en virtud de las denuncias que va a poner la Policía Nacional". De esta forma, el gobierno continúa su política de hostigamiento a l@s vecin@s que no quieren ser aislados del resto de la ciudad. Ya hace unas semanas se produjeron detenciones y varios cargos políticos hablaron de "terrorismo" por los sabotajes ocurridos en las vías. Read more ... |
Posted: 10 Mar 2018 09:59 AM PST
Rodeado. Así debe de sentirse el papa Francisco, y cada vez que sale de viaje debe de experimentar la misma incómoda situación de los habitantes de algunos barrios populares de Catania (Italia), que cada vez que salen de casa saben que pueden encontrársela ocupada por extraños al volver. Bergoglio es consciente de que sus enemigos anidan especialmente en las estancias vaticanas, que trabajan incansablemente día y noche, maquinando y preparando una sucesión que consiga hacer volver a la Iglesia Católica Apostólica Romana a los tiempos de las certezas.
Hoy reinan la confusión, la rabia y el espíritu de venganza por un lado, y la esperanza recuperada por el otro. Las consideradas como reformas de Bergoglio se realizan a saltitos, él las lanza aquí, deja que las cosas avancen, que los nudos se desaten y que las contradicciones se evaporen por sí solas. En este contexto, cada uno avanza como mejor le parece. Hay quien tira de la cuerda por un lado y quien tira por el otro; hay quien acelera y quien frena, con el resultado de que la cuerda podrá romperse o el coche estrellarse. De ello están convencidos tanto los restauradores como los reformadores, pero ninguno tiene el valor de dar un tirón y llevar a la Iglesia definitivamente a su lado, porque cualquier tirón puede provocar a su vez la destrucción del vehículo o la rotura de la cuerda. Y ese es el miedo en que se debate hoy la Iglesia. Todo esto, obviamente, no se muestra. Las imágenes y las noticias se refieren exclusivamente a los viajes y a las declaraciones “modernas” del Papa, y solo accidentalmente emergen las sombras que acompañan a su pontificado. Ya han pasado algunos años desde la exaltación al trono de San Pedro del Papa llegado de lejos, y sin embargo ninguno de los objetivos que se había marcado se ha concretado, desde la reforma financiera hasta la cuestión del sexo en sacristía, pasando por la democratización de las estructuras jerárquicas (las conferencias episcopales), el papel de la mujer, la cuestión del divorcio, etc. Dinero y sexo son, por otra parte, los pilares de la doctrina católica. El primero –el “estiércol del demonio”– está en la Iglesia como la sangre está en los seres vivos (humanos incluidos); sin sangre no hay vida, sin dinero no vive la Iglesia: sus bancos, sus congregaciones, legiones, sectas, hay que considerarlos como grandes sociedades de capital, de dinero pecan incluso curas y obispos de provincias, pescados de vez en cuando con las manos en la masa. Los “Papeles del Paraíso” por ejemplo, publicados recientemente en el diario italiano L’Espresso, han sacado a la luz las cuentas retenidas en paraísos fiscales de los Legionarios de Cristo, antes y después de la gestión del padre Marcial Maciel, fundador de esa congregación, que acabó en un exilio dorado por delitos de violencia sexual denunciados por decenas de sus víctimas. El jefe de los Legionarios de Cristo controlaba los fondos de su estructura, y secretamente los custodiaba desde el 28 de julio de 1992 en las Islas Bermudas, concretamente los procedentes de los círculos educativos –la red de 160.000 estudiantes repartidos por todo el mundo– sin pagar impuestos a nadie, con un flujo de ingresos calculados por el periodista Raúl Olmos en El Confidencial, de trescientos millones de dólares al año. Maciel y sus más estrechos colaboradores levantaron una sociedad entre las Bermudas y las Islas Vírgenes británicas que transfería y ocultaba fondos. El corazón de este imperio económico secreto estaba en Roma, en via Aurelia 677, cuartel general de los Legionarios de Cristo. Tocado por los escándalos sexuales, acusado por sus antiguos adeptos y por dos mujeres con las que tenía hijos, Maciel es privado del sacerdocio por el papa Ratzinger. En el negocio estaban también implicados bancos italianos y el gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, que financiaba las actividades de los Legionarios con una serie de ilegalidades contables. Desde 2006, las sumas escondidas se van retirando poco a poco. Tras la muerte de Maciel en 2008, el Vaticano activa una investigación interna: en 2013 interviene la congregación y liquida los activos de las Bermudas, extinguiendo también el fondo de las Islas Vírgenes. En el Citibank de Nueva York había también cuentas secretas. No parece que se hayan pagado nunca los impuestos en ninguno de los países de los que procedían los fondos, con Italia a la cabeza, y los personajes que compartían la responsabilidad de los fondos secretos siguen en las directivas, incluyendo los de la potente asociación laica Regnum Christi, cuyo responsable (Mario Olivieri Sangiacomo) continúa siendo el jefe de un holding ubicado en el paraíso fiscal de Delaware (Estados Unidos), que controla trece sociedades en todo el mundo. La investigación sobre los “Papeles del Paraíso” ha identificado fondos secretos de los Legionarios incluso en Panamá, en Jersey y en Luxemburgo. En el tema de la pedofilia, otro tema caliente, salen casos de todos los colores. El más gordo es uno que ha visto afectados a monaguillos del Papa, chavales objeto de abusos sexuales durante años por parte de personajes de las altas esferas. De hecho, parece que donde haya niños y curas existe un imán que se transforma rápidamente en calamidad para los primeros. El escándalo consumado durante años a pocos metros de las habitaciones papales de Casa Santa Marta ha sido denunciado en el último libro de Gianluigi Nuzzi, Peccato originale, y en algunos testimonios de víctimas entrevistadas en el programa Le iene. Pero a pocos kilómetros de estos tristes sucesos, en Caltagirone, está teniendo lugar otro importante acontecimiento: está en fase avanzada el proceso de beatificación de Luigi Sturzo, el fundador del Partido Popular, precursor de la Democracia Cristiana. Se han presentado ya todos los papeles, se han recogido firmas, se ha consignado el proceso y se ha depositado el dinero necesario. Solo falta un requisito: ¡el milagro! La comisión especial para la beatificación está esperando un hecho milagroso por obra de Luigi Sturzo para poder completar el expediente. Estamos seguros de que solo es cuestión de tiempo, ya que antes o después aparecerá el milagro. Nosotros también queremos echar una mano lanzando un llamamiento a nuestros lectores: SE BUSCA MILAGRO. Poneos manos a la obra, señalad hechos milagrosos de los que hayáis sido o seáis testigos, pero invocando al padre Sturzo, y será tarea de nuestra redacción notificarlos a la comisión para su beatificación. En espera de vuestras noticias, os desea un buen equinoccio de primavera vuestro.
Frà Dubbioso
Publicado en el Periódico Anarquista Tierra y Libertad, marzo de 2018
Read more ... |
No hay comentarios:
Publicar un comentario