- - - Servicio Informativo "Alai-amlatina" - - -
Agradecemos sus aportes económicos que permiten sostener este servicio: http://www.alainet.org/donaciones
Agradecemos sus aportes económicos que permiten sostener este servicio: http://www.alainet.org/donaciones
Un
pretexto para profundizar el libre comercio
El
“comercio electrónico” en la OMC
ALAI
ALAI AMLATINA, 03/10/2017.- Si
los países desarrollados logran meter el tema del
comercio electrónico en la agenda de la Organización Mundial del
Comercio, “el
peligro es que nunca más se atiendan las demandas de los países
en vías de
desarrollo” en ese organismo. Así
afirma
Sofía
Scasserra de Argentina,
con referencia a la próxima reunión ministerial de la OMC en
Buenos Aires
(diciembre), en cuya agenda consta la propuesta de abrir
negociaciones sobre lo
que llaman “comercio electrónico”, pero que de hecho apunta a la
desregulación
agresiva de la economía digital y los flujos de datos.
Scasserra, economista y master
en Relaciones
y Negociaciones Internacionales, se desempeña actualmente como
asesora en temas
económicos internacionales de la Federación Argentina de
Empleados de Comercio
y Servicios; y es asesora en comercio internacional para UNI
Américas Sindicato
Global.
En
diálogo con ALAI, realizado con motivo
del Encuentro “Diálogos por una Internet Ciudadana,
NuestrAmérica rumbo al Foro
Social de Internet”, en Quito, la economista aclaró por qué a los
movimientos sociales y los gobiernos latinoamericanos les
debería preocupar
esta propuesta. Nos
recuerda que la
mayoría de países latinoamericanos son receptores de tecnología,
más que
productores. Y eso significa que las normativas que se pretende
introducir en
la OMC “nos dejarían expuestos a la voluntad de las empresas
transnacionales,
sin ningún tipo de transferencia tecnológica hacia nuestros
países y una
vulnerabilidad en términos de seguridad y de datos fiscales de
los
contribuyentes, así como también de los consumidores y de los
ciudadanos en
general. Por lo cual, yo creo que los países latinoamericanos
tienen mucho de
qué preocuparse de esta agenda, porque en alguna manera daña la
soberanía
estatal y el modelo regulatorio de los Estados para poder
beneficiarse de las
inversiones extranjeras que vienen a los países de la región”. El diálogo continuó en los
siguientes términos.
¿En nuestra
región, a qué sectores de la sociedad
más les puede afectar y de qué manera?
Yo
creo que el tema de Comercio Electrónico permea a toda la cadena
productiva de
una economía, porque la economía de datos o la economía a través
de Internet
cada vez crece más y, hoy por hoy, prácticamente no hay ningún
bien o servicio
que no tenga parte de su cadena productiva a través de la Web, o
de los datos o
de un canal electrónico. Con lo cual, no hay que pensar en el
Comercio
Electrónico sólo como un portal como Amazon o eBay que venden y
compran por
Internet, sino que hay que pensar en todas las empresas de
software que dan
servicios terciarizados a empresas locales, desde la
contabilidad de una
empresa, pasando por la parte bancaria, hasta llegar a un
software como SAP
para la parte contable, o de logística o administración. Y la
agenda de
Comercio Electrónico permea todo esto, con lo cual no va a haber
solo un sector
impactado, sino que son todos los sectores, incluso los Estados,
con todos los
servicios informáticos que tienen, tanto de seguridad, como de
temas fiscales y
contribuciones, asignaciones familiares, jubilaciones,
pensiones, etc. Por lo
cual, yo creo que todo lo que es digital, en la economía, --que
hoy por hoy, es
casi todo, y, si no lo es, en un futuro no muy lejano lo va a
ser--. Esta
agenda nos preocupa a todos los sectores, sean industriales,
sean de servicios,
agropecuarios, incluso los movimientos sociales u organismos,
porque todos
tenemos alguna parte de nuestra producción que es digital, o que
pasa por
canales digitales.
Nuestros países
todavía no tienen muy desarrollado
el tema del Comercio Electrónico, entonces, podrían
preguntarse si no sería un
beneficio tener eso regulado en la Organización Mundial de
Comercio… y si no,
¿por qué?
El
problema es que la Organización Mundial de Comercio, lo que está
planteando es la
desregulación del sector, no la regulación del sector. Si lo que
plantearan
fuera la capacidad de los Estados de regular ese nuevo sector
que se está
abriendo en América Latina --y que cada vez se expande más,
puesto que el
Comercio Electrónico y la digitalización están teniendo cada vez
más relevancia
y protagonismo en la economía--, si se tratara de regularlo en
pos de esa
soberanía y en pos de beneficiarnos con la tecnología como
sociedad y como
ciudadanos, yo creo que estaría a favor. Sin embargo, el problema es
que justamente
ellos plantean reglas que sean las ‘no reglas’; es decir, que no
se puede
regular nunca más a futuro el Comercio Electrónico, el comercio
de datos o la
transferencia de datos por Internet.
En
Argentina, el Comercio Electrónico visto de manera tradicional
no está muy
desarrollado, y en toda América Latina tampoco. Y yo creo que se
debe principalmente
a que no tenemos muy desarrollado el sector logístico. En otras
palabras, para
tener una fuerte capacidad de compra-venta de artículos por
Internet, tú
necesitas como contrapartida un sector logístico muy eficiente;
y la realidad
es que en América Latina, por tener mal distribuida la densidad
de población y,
a la vez, extensiones de territorio muy amplias, resulta muy
caro tener un
sistema logístico eficiente. Por esta razón, el Comercio
Electrónico de a poco
va repuntando pero no está muy desarrollado, no así la parte
digital de las
empresas y la industria de datos, ya que existen empresas que
realmente están
trabajando mucho en la digitalización de sus sistemas con la
modernización de
todos los canales electrónicos y de toda la transferencia de
datos entre
empresas.
De
esa manera, si miramos la agenda de Comercio Electrónico, no
como compra-venta
por Internet, sino como transferencia de datos, ahí sí
encontramos que no
podría haber capacidad regulatoria si se firmara esto en la OMC
o en cualquier
otro tratado, porque este tema lo abordan también otros tratados
como el TISA,
cuya negociación está actualmente en vigencia, o el Tratado
Transpacífico, que
ahora ya no está en vigencia pero cuyos textos siguen vivos. Del
mismo modo, el
RCEP (que es acuerdo asiático con China) trata el asunto del
Comercio
Electrónico, el TTIP y muchos otros acuerdos que actualmente
están en proceso
de negociación, o cerrada la negociación o dando vueltas por el
mundo.
¿Qué tipo de
regulaciones serían favorables para
nuestros países, y nuestros consumidores/as y la ciudadanía, y
quién debería
adoptar esas regulaciones?
Yo
creo que los Estados a la cabeza deben tomar las riendas y poder
regular el
comercio de datos y proteger la soberanía, los consumidores, los
contribuyentes
fiscales, los datos bancarios de los ciudadanos. Pero, también
existe una responsabilidad
por parte de otros organismos, porque la agenda de Comercio
Electrónico no
solamente busca poner una camisa de fuerza a los Estados, sino
también a las
instancias municipales, provinciales, y no estaduales, por
ejemplo, un colegio
de abogados, un colegio de escribanos o una agencia profesional,
tampoco
podrían regular o poner normativas que vayan en contra de la
agenda de Comercio
Electrónico, como se quiere plantear. Por tanto, hay un montón
de regulaciones
–no solamente estatales-- que van a ser influenciadas por la
agenda de Comercio
Electrónico.
Los
Estados tienen la obligación de proteger a sus ciudadanos, me
parece que esa es
una de las funciones del Estado, y creo que las regulaciones
deberían exigir un
estándar mínimo de la empresa que venga a invertir al país,
exigir estándares
mínimos de performance o
de procesos
de inversión. Exigir que los datos queden en el país, que no se
los lleven, por
temas de seguridad nacional sobre todo, y también obviamente
poder tener la
capacidad de poner tribunales que protejan a sus consumidores y
también de cobrar
impuestos a las transacciones electrónicas. Hoy por hoy, ya casi
no existe un
bien o un servicio que no se pueda comprar por Internet, y al
decir que no se
puede cobrar impuestos a las transacciones por Internet, lo que
están haciendo
indirectamente es liberalizar toda la agenda de comercio
internacional dentro
de los países, y eso es algo que los Estados tienen la soberanía
para decidir
cuáles van a ser sus aranceles y sus tarifas en la OMC. Y, la
agenda de
comercio electrónico iría a diezmar todo el trabajo realizado
por los Estados
en fijar sus aranceles consolidados en la OMC.
Si se decide en
la OMC abrir negociaciones sobre el
Comercio Electrónico, ¿qué significa en la práctica?
Hay
varios puntos. El primero es que si se decide abrir la
negociación,
probablemente en esta próxima reunión ministerial que se va a
desarrollar en
Buenos Aires en diciembre no se llegará a un acuerdo; pero sí
significa que la
agenda de comercio electrónico quede de acá al futuro, en todas
las
ministeriales, para poder negociar e ir avanzando cada vez más
en lograr
acuerdos o consensos dentro de la agenda de lo que está
planteado. Esto es muy
importante porque los países subdesarrollados venían bloqueando
las negociaciones
comerciales en la OMC, exigiendo que se atiendan sus demandas.
Sus demandas
eran reglas más justas para los países en vías de desarrollo,
sobre todo en
temas de subsidios, dado que los países en vías de desarrollo
son
agroexportadores y los países desarrollados siguen
subvencionando su agro en
detrimento de los términos de intercambio respecto a los países
subdesarrollados. Entonces, estas negociaciones estaban trabadas
hasta que no
se atiendan las demandas de los países en vías de desarrollo.
Como
estos nuevos temas comerciales surgen --y los países en
desarrollo quieren
meterlos porque los necesitan negociar en la OMC--, hay una
esperanza de poder negociar
la agenda que está rezagada, a cambio de la agenda de los temas
más modernos.
Si se logra meter este tema en la agenda, el peligro es que
nunca más se
atiendan las demandas de los países en vías de desarrollo,
porque si ellos
logran introducir estos nuevos temas de la agenda comercial, muy
probablemente
ya no haya interés o incentivo por parte de los países
desarrollados en dar
concesiones a los países en vías de desarrollo para tratar las
demandas que son
realmente justas en términos de subsidios, seguridad
alimentaria, agroindustria
y otros. De modo que considero que ese es el mayor peligro:
perder capacidad
negociadora por parte de los países en vías de desarrollo.
Entonces,
entiendo que la recomendación a nuestros
gobiernos es no aceptar abrir esa negociación en la OMC… Frente a las amenazas a
las cuales te
refieres, ¿qué proponen hacer las organizaciones sociales de
Argentina y de la
región con motivo de la reunión ministerial de la OMC que se
va a realizar en
Buenos Aires en diciembre?
En
Buenos Aires todavía estamos en proceso de organización de cuál
va a ser la
movida, pero sí hay un claro consenso por parte de las
organizaciones sociales
de repudiar la Ministerial. Está la Asamblea ‘Argentina Mejor
sin TLC’ que está
movilizando a las organizaciones sociales y algunos sindicatos;
el sindicalismo
argentino, por su parte, la CGT ya se ha manifestado en contra
de estas
negociaciones, y estamos a la espera de ver si se va a armar una
gran
movilización por parte de los sindicatos. Pero todavía nos
encontramos en un
proceso complicado porque hay elecciones el mes próximo en
Buenos Aires, y esto
genera un juego de ajedrez donde hay temas que no se están
tratando.
Pero
hay un recuerdo muy grande por parte de los organismos sociales
y de los
sindicatos de lo que fue el proceso del No al ALCA. Y hay un claro consenso de
que estamos en
contra de esta agenda, de que no queremos a la OMC, no queremos
Tratados de
Libre Comercio, tampoco queremos al G-20.
Y que todas estas instancias lo que buscan en definitiva
es desregular y
privatizar nuestras economías y atar de manos y pies a los
Estados en su
capacidad soberana de regulación.
Así
que el consenso está claro, las declaraciones se hacen. Lo que
hay que definir
bien es cómo se va a organizar todo de cara a la ministerial.
Estamos rumbo a
eso. Estamos trabajando fuertemente en este tema. Esperamos que
toda América
Latina se sume a la lucha en contra de estos acuerdos que tanto
dañan a
nuestras economías, a nuestros Estados y a nuestra soberanía
nacional.
URL
de este artículo: https://www.alainet.org/es/articulo/188410
Contribuciones: http://alainet.org/donaciones.php
Mas informacion: http://alainet.org
FaceBook: http://facebook.com/America.Latina.en.Movimiento
Twitter: http://twitter.com/ALAIinfo
RSS: http://alainet.org/rss.phtml
______________________________________
Agencia Latinoamericana de Informacion
email: info@alainet.org
Suscripciones: http://listas.alainet.org/listas/subscribe/alai-amlatina
No hay comentarios:
Publicar un comentario