Viernes, 12 de enero
de 2018.- El secretario de Derechos Humanos Délfor Brizuela se hizo
presente este miércoles en la casa de los padres de Deolinda Torres, en
el barrio 20 de Mayo.
En ese marco ofreció la solidaridad y el apoyo de la Secretaría, en todo lo que tenga que ver con el ámbito de competencia de la misma o en alguna gestión que sea necesaria. Lo hizo junto al director de Derechos Humanos de la Provincia, Camilo Farías Barros.
Tanto los padres de Deolinda Torres, como un hermano y demás familiares que se encontraban presentes, intercambiaron impresiones y posiciones sobre el lamentable e irreparable hecho, que refleja la dolorosa realidad de la violencia de género.
Brizuela se interesó también sobre la situación de los cuatro hijos de Deolinda que están bajo la tutela de los abuelos paternos y con quienes, a pesar de la terrible de la situación, mantienen una buena relación los abuelos y demás familiares maternos.
Ambos abuelos están dispuestos a colaborar y cooperar para atender a los niños de la mejor manera.
El funcionario junto al hermano de Deolinda Torres y el director Farías Barros, se trasladaron a la casa donde están los chicos y pudieron estar con ellos, verificando el buen estado de salud, alimentación y contención emocional de los pequeños.
Finalmente Pocho Brizuela reafirmó la responsabilidad del Estado para evitar con medidas efectivas y recursos, la consumación de femicidios que “son un grito desgarrador de dolor, de una sociedad donde tenemos que cambiar urgentemente pautas culturales machistas y violentas y, como Estado, poner todos los instrumentos que nos permitan erradicar la violencia y la muerte de mujeres”.
En ese marco ofreció la solidaridad y el apoyo de la Secretaría, en todo lo que tenga que ver con el ámbito de competencia de la misma o en alguna gestión que sea necesaria. Lo hizo junto al director de Derechos Humanos de la Provincia, Camilo Farías Barros.
Tanto los padres de Deolinda Torres, como un hermano y demás familiares que se encontraban presentes, intercambiaron impresiones y posiciones sobre el lamentable e irreparable hecho, que refleja la dolorosa realidad de la violencia de género.
Brizuela se interesó también sobre la situación de los cuatro hijos de Deolinda que están bajo la tutela de los abuelos paternos y con quienes, a pesar de la terrible de la situación, mantienen una buena relación los abuelos y demás familiares maternos.
Ambos abuelos están dispuestos a colaborar y cooperar para atender a los niños de la mejor manera.
El funcionario junto al hermano de Deolinda Torres y el director Farías Barros, se trasladaron a la casa donde están los chicos y pudieron estar con ellos, verificando el buen estado de salud, alimentación y contención emocional de los pequeños.
Finalmente Pocho Brizuela reafirmó la responsabilidad del Estado para evitar con medidas efectivas y recursos, la consumación de femicidios que “son un grito desgarrador de dolor, de una sociedad donde tenemos que cambiar urgentemente pautas culturales machistas y violentas y, como Estado, poner todos los instrumentos que nos permitan erradicar la violencia y la muerte de mujeres”.
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