La represión de la policía jujeña a los legisladores y dirigentes que
intentaron ingresar a la sala de audiencias para presenciar el juicio a
Milagro Sala cosechó repudios en el Frente para la Victoria. También
dirigentes de izquierda y sectores sindicales advirtieron sobre la
gravedad de los hechos. Piden la intervención de la provincia de Jujuy.
La ex presidenta Cristina Kirchner subió a su cuenta de Twitter la
foto en la que se ve a un policía agarrando del cuello a la diputada
Mayra Mendoza. “Esto es algo más que represión. Es miedo a la mujer sin
miedo”, comentó la ex mandataria, parafraseando al uruguayo Eduardo
Galeano. Fernández de Kirchner publicó además dos videos que muestran la
violencia policial.
La mayoría de las críticas responsabilizaron al gobernador Gerardo Morales, tanto de la violencia frente a los tribunales como del carácter persecutorio de los procesos abiertos contra la dirigente de la Tupac Amaru.
“Repudio y condeno el cobarde acto de represión sucedido en Jujuy. Es inaceptable para nuestra democracia”, sostuvo en este sentido el ex gobernador Daniel Scioli.
Gabriel Mariotto agregó que la represión fue “el ensayo de lo que Mauricio Macri pretende instalar en Argentina”.
La Cámpora, agrupación a la que pertenecen Mayra Mendoza y Martín García, criticó “la decisión arbitraria del gobernador de prohibir el ingreso a la audiencia oral y pública”. En un comunicado, exigió al presidente Macri que “acompañe el rechazo generalizado a estas políticas represivas, tomando las medidas que tiendan a garantizar la liberación de Milagro Sala y el restablecimiento de las garantías constitucionales en la provincia de Jujuy”.
El bloque de diputados nacionales FPV-PJ, que preside Héctor Recalde, recordó que la semana pasada presentó “un proyecto para pedir la intervención federal de Jujuy, porque Milagro Sala está detenida en una provincia donde no existe el estado de derecho. La situación vivida hoy –apuntaron los legisladores– no hace más que confirmarlo”.
Espacio Popular, la fuerza de Aníbal Ibarra, reclamó la renuncia de Gerardo Morales y su gabinete “o bien la inmediata intervención de la provincia, por la gravedad de la situación planteada”.
Desde la izquierda, la diputada Myriam Bregman tuiteó: “No nos equivocamos cuando dijimos que Jujuy era la capital de la represión y la impunidad, cuando denunciamos la avanzada de Morales y (el vicegobernador Carlos) Haquim sobre las libertades democráticas”. La titular de la Coordinadora contra la Represión Policial (Correpi), María del Carmen Verdú, comentó que “el aliado de Macri en Cambiemos muestra la hilacha represora sin ambigüedades”, y concluyó: “Si así tratan a diputados, imaginate cuando son laburantes o desocupados...”
También expresaron su rechazo a la violencia contra los legisladores y dirigentes el titular de la CTA de los Argentinos, Hugo Yasky, el sindicato docente SADOP, la CTA Matanza, la Diputada Nacional por Córdoba, Gabriela Estévez (FpV-PJ), y el espacio de Concejales para la Victoria, entre otros.
La mayoría de las críticas responsabilizaron al gobernador Gerardo Morales, tanto de la violencia frente a los tribunales como del carácter persecutorio de los procesos abiertos contra la dirigente de la Tupac Amaru.
“Repudio y condeno el cobarde acto de represión sucedido en Jujuy. Es inaceptable para nuestra democracia”, sostuvo en este sentido el ex gobernador Daniel Scioli.
Gabriel Mariotto agregó que la represión fue “el ensayo de lo que Mauricio Macri pretende instalar en Argentina”.
La Cámpora, agrupación a la que pertenecen Mayra Mendoza y Martín García, criticó “la decisión arbitraria del gobernador de prohibir el ingreso a la audiencia oral y pública”. En un comunicado, exigió al presidente Macri que “acompañe el rechazo generalizado a estas políticas represivas, tomando las medidas que tiendan a garantizar la liberación de Milagro Sala y el restablecimiento de las garantías constitucionales en la provincia de Jujuy”.
El bloque de diputados nacionales FPV-PJ, que preside Héctor Recalde, recordó que la semana pasada presentó “un proyecto para pedir la intervención federal de Jujuy, porque Milagro Sala está detenida en una provincia donde no existe el estado de derecho. La situación vivida hoy –apuntaron los legisladores– no hace más que confirmarlo”.
Espacio Popular, la fuerza de Aníbal Ibarra, reclamó la renuncia de Gerardo Morales y su gabinete “o bien la inmediata intervención de la provincia, por la gravedad de la situación planteada”.
Desde la izquierda, la diputada Myriam Bregman tuiteó: “No nos equivocamos cuando dijimos que Jujuy era la capital de la represión y la impunidad, cuando denunciamos la avanzada de Morales y (el vicegobernador Carlos) Haquim sobre las libertades democráticas”. La titular de la Coordinadora contra la Represión Policial (Correpi), María del Carmen Verdú, comentó que “el aliado de Macri en Cambiemos muestra la hilacha represora sin ambigüedades”, y concluyó: “Si así tratan a diputados, imaginate cuando son laburantes o desocupados...”
También expresaron su rechazo a la violencia contra los legisladores y dirigentes el titular de la CTA de los Argentinos, Hugo Yasky, el sindicato docente SADOP, la CTA Matanza, la Diputada Nacional por Córdoba, Gabriela Estévez (FpV-PJ), y el espacio de Concejales para la Victoria, entre otros.
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